Condena a los excursionistas

Un tribunal iran¨ª ha condenado a ocho a?os a los dos excursionistas estadounidenses que fueron detenidos el 31 de julio de 2009 en la frontera con Irak. Shane Bauer y Josh Fattal tienen 29 a?os y, seg¨²n han contado, se perdieron por unos caminos mal se?alizados tras visitar una cascada en el Kurdist¨¢n iraqu¨ª. Cruzaron sin darse cuenta una frontera invisible, y de pronto se encontraron al otro lado, en el Ir¨¢n fundamentalista que sostiene buena parte de su discurso oficial en un radical rechazo a Estados Unidos y a todos sus valores. Cuando fueron detenidos iban con Sarah Shourd, de 32 a?os, la novia de Shane.

La noticia de su condena apareci¨® en la web de la televisi¨®n estatal iran¨ª, que explica que a cada uno les han ca¨ªdo tres a?os por haber entrado de manera ilegal en Ir¨¢n y cinco por colaborar con los servicios de espionaje de Estados Unidos. El abogado que defiende a los viajeros no hab¨ªa sido a¨²n informado el s¨¢bado por la noche de la sentencia, que piensa recurrir de inmediato en cuanto la reciba por conducto oficial.

El ministro de Exteriores iran¨ª, Akbar Saleh¨ª, hab¨ªa dado algunas se?ales de esperanza cuando declar¨® el d¨ªa 6 de este mes que confiaba en que los j¨®venes obtuvieran la libertad. Eso se hubiera producido si el juez desestimaba los cargos de espionaje y aceptaba, por otro lado, que los dos a?os que llevan en prisi¨®n son suficentes para pagar su entrada ilegal en el pa¨ªs.

No ha sido finalmente as¨ª. Ya hubo tensiones entre el tribunal y el presidente iran¨ª, Mahmud Ahmadineyad, cuando este consigui¨®, gracias a la presi¨®n del sult¨¢n de Om¨¢n, que se pusiera en libertad bajo fianza a Sarah Shourd, que sali¨® en septiembre hacia Estados Unidos tras pagar medio mill¨®n de d¨®lares. Su caso permanece abierto.

El poder judicial de Ir¨¢n ha mostrado, con esta sentencia, que es a¨²n m¨¢s duro con los j¨®venes estadounidenses que los propios responsables pol¨ªticos. Con estos todav¨ªa puede existir un margen de clemencia si ven favorecidos sus intereses inmediatos. A Ahmadineyad le conven¨ªa reducir la tensi¨®n con Washington. A los jueces, no. En el caso de los j¨®venes excursionistas, lo que han querido es exhibir su independencia.