Septiembre no se acerca, se echa encima

No nos cae bien. No nos gusta su oficio ni c¨®mo lo hace. Le o¨ªmos pedir fe y obediencia ciegas y nos ponemos m¨¢s de acuerdo que nunca con Bertolt Brecht: no hay personas m¨¢s inconscientes que las que no tienen dudas. Y, un paso m¨¢s all¨¢, estamos de acuerdo con Saramago en que este ser¨ªa un mundo m¨¢s espiritual si no existieran las religiones. Pero a pesar de todo, uno cierra los peri¨®dicos y tiene que admitir que existen poderosas razones tur¨ªsticas que hacen aconsejable traer m¨¢s a menudo a Madrid a este Papa inflexible, cuyo apellido suena a Racing de Santander dicho deprisa y cuyos mensajes son una invitaci¨®n a la Edad Media, porque se ve que la madre de todas las misas ha sido un buen negocio y que su visita ha dejado unos beneficios de 160 millones de euros. Imag¨ªnense c¨®mo iban a estar las cajas fuertes si en lugar de d¨¢rselo todo a mitad de precio a los peregrinos, les hubiesen cobrado lo que nos cobran a los dem¨¢s.

Cuando acabe el verano no regresaremos a la ciudad, sino al miedo; no a nuestros trabajos, sino al temor de perderlos

Y encima, Benedicto XVI solo ha sido uno m¨¢s, porque los datos tur¨ªsticos de la regi¨®n son fant¨¢sticos: entre enero y julio de este a?o tuvimos seis millones de visitantes, casi un 7% m¨¢s que el a?o pasado, y eso que los profetas de la Asociaci¨®n Empresarial Hotelera de Madrid presagiaron un "deterioro internacional de nuestra imagen tur¨ªstica por el movimiento del 15-M". Cuando echemos las cuentas de agosto y sumemos indignados y cat¨®licos de la JMJ, vamos a tener que sacar los paraguas para que no nos caigan encima los billetes de 500 euros.

Y a pesar de todo, este no va a ser un septiembre como los dem¨¢s, porque cuando acabe el verano no regresaremos a la ciudad, sino al miedo; no a nuestros trabajos, sino al temor de perderlos. Las noticias nos hablan de la crisis y se anuncia que se avecinan tiempos oscuros, lo cual lo deja todo muy claro, porque no hay m¨¢s que comparar lo que siguen ganando los bancos y las grandes empresas con lo que perdemos casi todos los dem¨¢s para entender en 10 minutos que la visita del Papa es un ejemplo de lo que ocurre y que esto no es un problema econ¨®mico, sino moral: hay dinero de sobra, pero el capitalismo salvaje al que nos hemos entregado es un sistema c¨ªnico, cuyas ¨²nicas leyes son las de la usura y que no tiene m¨¢s m¨¦todo que la explotaci¨®n. Ellos abren un libro de Antonio Machado, lo corrigen para que diga "a tu trabajo acudes, con t¨² dinero pagas / el traje que me cubre y la mansi¨®n que habito", y listo.

"Los p¨¢jaros no pasan, se alejan", dec¨ªa un verso del poeta Dionisio Ca?as que a Juan Urbano siempre le ha gustado, y septiembre no se acerca: se nos viene encima. ?Qu¨¦ va a ser de nosotros?, nos preguntamos la mayor¨ªa. Por ahora, la ola de veneno ha llegado hasta la Constituci¨®n, que era intocable hasta que la mafia de los mercados sac¨® las tijeras y el l¨¢piz rojo. ?Qu¨¦ va a ser lo pr¨®ximo? Para saberlo, igual hab¨ªa que volver una vez m¨¢s a Brecht y recordar eso de que "primero se llevaron a los jud¨ªos, pero como yo no era jud¨ªo, no me import¨®. / Despu¨¦s se llevaron a los comunistas, pero como yo no era comunista, tampoco me import¨®. / Luego se llevaron a los obreros, pero como yo no era obrero tampoco me import¨®. / M¨¢s tarde se llevaron a los intelectuales, pero como yo no era intelectual, tampoco me import¨®. / Despu¨¦s siguieron con los curas, pero como yo no era cura, tampoco me import¨®. / Ahora vienen a por m¨ª, pero ya es demasiado tarde". Y despu¨¦s de recordarlo, sospechar que si antes el rival eran los rusos y despu¨¦s lo fueron los musulmanes, vivan la democracia y la OTAN, ya cay¨® tambi¨¦n Gadafi y el pr¨®ximo es Bachar el Asad, ahora los enemigos somos nosotros. O igual nos salva el turismo, como en los tiempos de la dictadura.