Una vida profesional se va al garete por 200 euros al mes
"?C¨®mo le explico yo a mi hijo que me han declarado in¨²til para el trabajo que llevo desempe?ando durante los ¨²ltimos 33 a?os?". Antonio, el nombre es ficticio, es un jefe de servicio de libre designaci¨®n que, al volver de las vacaciones, se ha encontrado que ya no tiene puesto de trabajo. "Han reducido las jefaturas de servicio a la mitad y a m¨ª, me han dejado fuera".
Antonio, ingeniero, fue contratado por el ente preauton¨®mico en 1978, "antes de que entrara Joan Lerma". Ha desarrollado su trayectoria profesional en cuatro consejer¨ªas. En la d¨¦cada de los noventa, logr¨® plaza de funcionario a trav¨¦s de una oposici¨®n restringida. Durante sus a?os de servicio a la Generalitat ha adjudicado en torno a 150.000 millones de euros en obras de su especialidad. "Varias empresas privadas me han hecho ofertas, pero opt¨¦ por hacer lo que cre¨ªa que era mejor con el dinero de todos los valencianos".
"?C¨®mo le explico yo a mi hijo que me han declarado in¨²til?"
Cuando se incorpor¨® al trabajo, el jefe de ¨¢rea le llam¨® a su despacho: "?Te ha llamado el director general? ?No? Pues te llamar¨¢".
Efectivamente, unos minutos m¨¢s tarde recibi¨® la llamada del gran jefe: "Lo siento much¨ªsimo, haremos lo posible por reubicarte, pero tu puesto ha desaparecido del organigrama en el nuevo Reglamento Org¨¢nico y Funcional de la consejer¨ªa".
El jefe de ¨¢rea, m¨¢s directo, lleg¨® a sugerirle que pidiera la excedencia y se buscara la vida en el sector privado.
Antonio est¨¢ ahora en el limbo. "Esta ma?ana ha llegado un empresario para que le firmara unas certificaciones de obra. No la va a cobrar, pero por lo menos podr¨¢ llevar al banco el papelito una vez que lo vise el interventor. Pero como ya no soy el que era he llamado a los responsables de recursos financieros para preguntar si mi firma sigue teniendo validez. Pero como ellos se encuentran en la misma situaci¨®n que yo me han dicho, haz lo que quieras, a m¨ª me importa un pito".
Antonio, cuando sea reubicado, ingresar¨¢ unos 200 o 300 euros menos al mes. Perder¨¢ el denominado complemento de destino, porque el complemento espec¨ªfico ya lo tiene consolidado. "No es tanto el dinero, que me da igual, es el golpe a la autoestima lo que me hace sentir este malestar en el est¨®mago. No pretender¨¢n que me vaya de jefe de negociado a un departamento que desconozco para ponerme a las ¨®rdenes de un piernas que es 30 a?os m¨¢s joven que yo y encima es un enchufado por ser del Opus".
El futuro de Antonio depende de la Relaci¨®n de Puestos de Trabajo que la Consejer¨ªa de Hacienda y Administraci¨®n P¨²blica debe publicar como anexo a los presupuestos de 2012. Pero el veterano servidor p¨²blico est¨¢ convencido de que la relaci¨®n en cuesti¨®n no se publicar¨¢ antes de fin de a?o.
Y concluye. "Yo cre¨¦ una empresa p¨²blica para ejecutar las obras que he adjudicado en la que trabajaban cuatro personas. Ahora son m¨¢s de 60. Y nadie, nadie, sabe a qu¨¦ se dedican el 80% de esos empleados p¨²blicos. ?No deber¨ªan haberlos tirado a ellos antes de enviar mi vida profesional al garete por 200 euros al mes?".
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