El lujo vuelve a Mil¨¢n

El circuito internacional de pasarelas est¨¢ ahora mismo detenido en Mil¨¢n. Desde el mi¨¦rcoles y hasta el pr¨®ximo martes, se presentan en la ciudad italiana las colecciones para la primavera/verano de 2012. En las primeras jornadas, la elegancia, el lujo y un cierto optimismo se apoderaron de los dise?adores. A pesar de la crisis financiera que est¨¢ afectando a los pa¨ªses del euro y, especialmente, a Italia. Apuros econ¨®micos que no se notan en la fachada de la ciudad: las terrazas de restaurantes y bares est¨¢n a rebosar, los hoteles han colgado el cartel de completo y en las gradas de los desfiles no cabe un alfiler. Eso por no hablar del calendario de fiestas y eventos, como la apertura de una megatienda de Louis Vuitton (en via Montenapoleone, en el Tri¨¢ngulo de Oro), o la exposici¨®n de la nueva colecci¨®n de joyas de Salvatore Ferragamo.

Para justificar este boyante ambiente, se repite que los pa¨ªses emergentes del BRIC (Brasil, Rusia, India y China) se han convertido en los nuevos destinos del lujo italiano. Los compradores y la prensa especializada de esas nacionalidades ya sobrepasan a sus hom¨®logos tradicionales (americanos y europeos). Tal vez pensando en ellos, los dise?adores han optado por ofrecer productos muy femeninos y cargados de toda clase de brillos y pedrer¨ªa. Frida Giannini para Gucci es, hasta el momento, la dise?adora que m¨¢s ha enfilado su colecci¨®n por el camino de la opulencia. Inspiradas en los a?os veinte, la era del jazz y el art deco (bautiz¨® la colecci¨®n como Hard Deco) sus flappers lucen vestidos rectos de talle bajo. Totalmente cubiertos de cuentas de azabache negro, bordados de espejos y pedrer¨ªa dorada y blanca, a veces, formando dibujos geom¨¦tricos. Para d¨ªa emplea el grafismo t¨ªpico del art deco en chaquetas cortas formando rombos o rayas en verde esmeralda, negro y blanco. No faltan joyas doradas en cuellos, brazos y tobillos.

Pero cualquier cosa que suceda en Mil¨¢n est¨¢ sujeta a lo que diga Miuccia Prada. La dise?adora mantuvo la apuesta por la excentricidad estadounidense que ya exhibi¨® en su colecci¨®n masculina para la pr¨®xima primavera (protagonizada por golfistas cargados de brillos y flores), pero en un registro completamente diferente. Aunque Miuccia Prada afirma que no era su intenci¨®n revisar los a?os cincuenta en EE UU, el resultado es un claro homenaje al estilo retro en el plano m¨¢s sofisticado posible. Una lujosa revisi¨®n de mitos tan manidos como Grease o Rebelde sin causa. "La obsesi¨®n del hombre que ama a las mujeres y los coches" le ha llevado a crear una colecci¨®n acerca de "la contradicci¨®n entre la dulzura y lo prohibido". As¨ª lo expresaba tras un relevante repertorio dominado por los sugerentes contrastes crom¨¢ticos y la riqueza de los bordados y los tejidos. Chaquetones armados con mangas tres cuartos (que est¨¢n en todas partes) con bordados de coches y fuego, hombros de pedrer¨ªa azul, faldas plisadas y ba?adores nost¨¢lgicos compart¨ªan protagonismo con originales sandalias decoradas con llamas de fuego.

Mucho m¨¢s pl¨¢cido de lo habitual, Francesco Sognamiglio mostr¨® su versi¨®n rom¨¢ntica y sofisticada en siluetas inspiradas en las formas de la escultura Apolo y Dafne, de Gian Lorenzo Bernini. Su colecci¨®n alterna crepes de seda con incrustaciones o trajes totalmente hechos de encaje en albaricoque, menta, blanco o negro. Finalmente, la firma Max Mara apuesta por una l¨ªnea m¨¢s bien escueta, donde diminutas chaquetas bombers de algod¨®n se coordinan con minifaldas sobre leggings o shorts alternando napa, punto y dobles tejidos de organza en champ¨¢n, turquesa, camel o blanco. Una colecci¨®n comercial pero contempor¨¢nea, la combinaci¨®n que hoy cualquiera desear¨ªa.