La Justicia ofrece un giro social en defensa de los afectados por la crisis

"El derecho de los acreedores tiene como l¨ªmite la vulneraci¨®n de la dignidad de las personas". Con estas palabras, a modo de advertencia, el presidente del Tribunal Superior, Juan Luis Ibarra, avanz¨® ayer que la Justicia vasca "no ser¨¢ ajena a los nuevos retos de solidaridad" que demanda la crisis. Un rotundo pronunciamiento con el que abord¨® la principal preocupaci¨®n actual de los ciudadanos y situ¨® al tradicionalmente opaco universo judicial a pie de calle, como garante de los derechos de los m¨¢s necesitados. "No queremos ni debemos estar fuera de onda respecto de los graves impactos que la recesi¨®n est¨¢ provocando en nuestra sociedad", manifest¨®.

La jurisdicci¨®n Civil ha tomado el relevo de la Social y la Mercantil en lo que al incremento de la litigiosidad se refiere como consecuencia de la crisis. En apenas tres a?os, las ejecuciones hipotecarias se han multiplicado casi por cuatro en el conjunto de Espa?a. A este dato se aferr¨® Ibarra, durante la apertura del A?o Judicial en Bilbao, como principal argumento de su solidaridad con quienes han perdido su empleo y no pueden hacer frente a los pagos comprometidos. "Nuestro ordenamiento constitucional vincula al poder judicial con la prestaci¨®n de una tutela efectiva que preserve la dignidad del deudor y el n¨²cleo de sus derechos fundamentales", defendi¨®.

El presidente del Superior defiende la "dignidad" de los deudores

Ante las decenas de asistentes congregados en la sede del Superior, entre los que se encontraba el propio lehendakari, Patxi L¨®pez, el m¨¢ximo responsable de la judicatura vasca super¨® el discurso protocolario de otras ocasiones y la mera exposici¨®n de intenciones al plantear medidas concretas como la daci¨®n en pago del bien hipotecado para la completa liberaci¨®n de la deuda. Una f¨®rmula que, seg¨²n advirti¨®, ya queda recogida en el C¨®digo Civil. "La ciudadan¨ªa no puede aceptar como justo que una vez adjudicado el piso al acreedor financiero, la persona que lo adquiri¨® siga manteniendo una elevada deuda sin amortizar", esgrimi¨®.

En el discurso m¨¢s social que se recuerda en la apertura de un curso judicial, Ibarra aprovech¨® la presencia del lehendakari por primera vez en este tipo de actos para recordar que cabe una actuaci¨®n previa por parte de la Administraci¨®n para suavizar las consecuencias del endeudamiento familiar. Concret¨® que Euskadi tiene competencia legislativa en materia de protecci¨®n del consumidor, as¨ª como de plenas atribuciones para la dotaci¨®n de servicios de mediaci¨®n intraprocesal. Dos facultades que present¨® como herramientas apropiadas para un tratamiento "preventivo" de las situaciones de endeudamiento que se podr¨ªa aplicar "de manera previa o en el curso de los procesos ejecutivos hipotecarios".

Tras poner como ejemplo el modelo de Francia, Ibarra concret¨® que la mediaci¨®n administrativa facilitar¨ªa al juez de ejecuci¨®n "un plan convencional de liquidaci¨®n de la deuda adecuado a la capacidad de pago del deudor". Una propuesta que, seg¨²n su alegato, determinar¨ªa el m¨ªnimo de subsistencia de la persona y establecer¨ªa el orden de satisfacci¨®n de las deudas contra¨ªdas, as¨ª como las medidas de aplazamiento, de reducci¨®n de pagos o supresi¨®n de intereses. "La sociedad mantiene la expectativa de que la Justicia opere como garant¨ªa ¨²ltima de defensa de la democracia y de las libertades. A ello dedicaremos nuestros esfuerzos en este nuevo a?o judicial", garantiz¨®.

Las palabras del presidente del Tribunal Superior encontraron eco en las del fiscal superior del Pa¨ªs Vasco, Juan Calparsoro. Aunque su discurso se centr¨® m¨¢s en los presos y el final del terrorismo, el m¨¢ximo responsable del Ministerio P¨²blico en Euskadi se comprometi¨® tambi¨¦n a afrontar con decisi¨®n las nuevas preocupaciones sociales derivadas de las dificultades econ¨®micas. Un reto para el que demand¨® colaboraci¨®n interinstitucional al lehendakari y a la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga, presente tambi¨¦n ayer de la apertura del A?o Judicial en Bilbao.