El fiscal rectifica y retira a ¨²ltima hora los cargos contra el juez Serrano

La Fiscal¨ªa Superior de Andaluc¨ªa pas¨® en un lapso de horas de considerar prevaricadora y merecedora de 10 a?os de inhabilitaci¨®n la decisi¨®n tomada por un juez de Sevilla de prolongar el r¨¦gimen de visitas de un menor para que ¨¦ste procesionara de madrugada con la familia paterna a pedir la absoluci¨®n del magistrado responsable.

El fiscal Arturo G¨®mez sostuvo en la ¨²ltima de las jornadas del juicio oral contra el titular del Juzgado de Familia n¨²mero 7 de Sevilla Francisco Serrano ayer que considera que el magistrado pudo actuar de forma "imprudente", pero no que cometiera delito alguno con su decisi¨®n. Un juzgado de Violencia sobre la Mujer ya hab¨ªa establecido el r¨¦gimen de visitas que Serrano decidi¨® modificar.

La madre mantiene la petici¨®n de 20 a?os de inhabilitaci¨®n por prevaricaci¨®n

La defensa del magistrado reconoci¨® la "satisfacci¨®n" por el repentino cambio de criterio del ¨®rgano presidido por Jes¨²s Mar¨ªa Garc¨ªa Calder¨®n, mientras que la acusaci¨®n particular mantuvo los cargos, por los que pide 20 a?os de inhabilitaci¨®n.

No obstante, el fiscal admiti¨® que Serrano actu¨® de forma "imprudente o negligente" en dicha resoluci¨®n, puesto que "obvi¨®" pruebas que pod¨ªa y deb¨ªa haber hecho y que, si las hubiera realizado, la resoluci¨®n probablemente ser¨ªa "diferente". Sin embargo, como quiera que el fiscal tampoco entiende "manifiestamente injusta" la decisi¨®n del juez, pidi¨® la libre absoluci¨®n.

El juez Serrano es uno de los principales valores y promotores de algunas organizaciones contrarias a la Ley Integral contra la violencia de G¨¦nero -lleg¨® a hablar de "dictadura del feminismo radical"- y fue expedientado por el Consejo General del Poder Judicial por presidir una de ellas.

La acusaci¨®n particular, ejercida por la madre del menor, acusa al magistrado de una supuesta maniobra que habr¨ªa urdido en connivencia con el letrado del padre en el proceso de separaci¨®n, Joaqu¨ªn Moeckel -que tambi¨¦n llev¨® una denuncia del propio Serrano contra la presidenta del Observatorio contra la Violencia de G¨¦nero, Inmaculada Montalb¨¢n-, para hacerse con el caso. El juez no oy¨®, seg¨²n ha reconocido ¨¦l mismo en el juicio, a ninguno de los progenitores, solo al menor, que acudi¨® al juzgado acompa?ado por su abuelo paterno. Las fechas "an¨®malas" y la "urgencia" del caso fueron su explicaci¨®n.

Tras la prueba, el fiscal no considera acreditado que el magistrado "actuase con nadie", en particular con Moeckel. Ambos sostuvieron durante el juicio que no eran amigos ni hab¨ªan hablado del caso con anterioridad. El fiscal tampoco cree que Serrano traspasara las fronteras de la jurisdicci¨®n al dictar la resoluci¨®n. Fue m¨¢s bien consecuencia de una urgencia "mal entendida" y le recrimina que no ponderara adecuadamente los intereses en juego.

En el reparto o asignaci¨®n del caso, seg¨²n el fiscal, "Serrano no tuvo nada que ver". "Se puede tener la sospecha de que hubiera habido alg¨²n tipo de influencia (...) pero es pura elucubraci¨®n", insisti¨® la Fiscal¨ªa Superior de Andaluc¨ªa. Seg¨²n relat¨® el propio juez, tras escuchar al menor le dijo a su abuelo que ten¨ªa que dirigir un escrito al Decanato. ?l mismo telefone¨® al juez decano de Sevilla para advertirle de la "urgencia" del proceso, pero fue Moeckel el que entreg¨® en el Decanato el escrito y quien dijo, seg¨²n el testimonio de la funcionaria que lo recepcion¨®, que "ten¨ªa que ir al Juzgado de Familia 7", al que efectivamente volvi¨®. "Ese error o manipulaci¨®n, si se quiere, nada tiene que ver con la actuaci¨®n de Serrano", concluy¨® el fiscal.