El autom¨®vil entra en campa?a
El peso econ¨®mico y las discrepancias entre los representantes del sector obliga a definirse a los partidos pol¨ªticos
Los partidos pol¨ªticos se encuentran en plena gestaci¨®n, inmersos en la elaboraci¨®n de unos programas electorales que har¨¢n p¨²blicos en las pr¨®ximas semanas y en los que el autom¨®vil desempe?a un papel importante. Al mismo tiempo, las organizaciones empresariales del sector velan armas para salir a la palestra en cuanto sea nombrado el nuevo Gobierno. Alguna, como Ganvam, representante de los vendedores, ya se ha adelantado remitiendo a los partidos pol¨ªticos su "programa de propuestas para sacar al sector del autom¨®vil de la crisis de ventas, cuya ca¨ªda superar¨¢ este a?o el 50% respecto a los niveles previos a 2008". Anfac, representante de los fabricantes, har¨¢ tambi¨¦n su campa?a durante las pr¨®ximas semanas con distintos comunicados sobre los aspectos m¨¢s significativos: fiscalidad, costes laborales, log¨ªstica, renovaci¨®n del parque automovil¨ªstico... Los sindicatos, por su parte, algo m¨¢s tranquilos tras ver asegurada la permanencia de las plantas industriales en Espa?a, al menos durante la presente d¨¦cada, siguen vigilando de cerca la transformaci¨®n de un sector sometido a importantes cambios estructurales.
La nueva normativa de distribuci¨®n se retrasar¨¢ por su pluralidad
A las repercusiones de la crisis se une la incertidumbre de las nuevas tecnolog¨ªas
Y es que a las repercusiones directas de la crisis econ¨®mica que est¨¢n encogiendo las ventas hasta niveles de los a?os noventa se une la incertidumbre respecto a la incorporaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas menos contaminantes.
Y para completar el elenco se encuentra una Administraci¨®n que ha de atender la solicitud de ayudas tanto al principio del proceso en las inversiones industriales como al final en la venta directa al comprador en una red donde Faconauto, la patronal de los concesionarios, calcula en 50.000 el n¨²mero de empleos perdidos al final de la crisis, "casi los mismos que todas las f¨¢bricas instaladas en Espa?a juntas", se?ala su presidente, Antonio Romero-Haupold.
Esa dial¨¦ctica entre fabricantes y vendedores ha marcado la vida del sector durante los ¨²ltimos tiempos. Con la resaca del D¨ªa de los Enamorados el pasado mes de febrero y aprovechando el tr¨¢mite de la Ley de Econom¨ªa Sostenible, se abre la caja de los truenos al aprobar el Parlamento una enmienda que respalda las demandas de los concesionarios.
Desde entonces, y casi sin soluci¨®n de continuidad, se han sucedido los movimientos de fichas con mayor o menor acierto por parte de unos y otros. En estos momentos siguen en pie las negociaciones para tratar de que Faconauto respalde la puesta en marcha del C¨®digo de Buenas Pr¨¢cticas Comerciales que deber¨ªa regir las relaciones hasta la entrada en vigor de un nuevo texto legal, no antes del primer trimestre de 2012. De momento, el arbitraje y el sistema de mediaci¨®n en caso de desacuerdo siguen siendo una barrera infranqueable entre unas partes (fabricantes y concesionarios) con acusaciones mutuas de inconstitucionalidad.
La Ley de Contratos de Distribuci¨®n se encuentra entre los m¨¢s de 20 proyectos que han deca¨ªdo como consecuencia del adelanto electoral, pero va a ser, sin duda, uno de los primeros en renacer con las nuevas Cortes.
Josep S¨¢nchez-Llibre, portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados y uno de los protagonistas de esta movida automovil¨ªstica, est¨¢ convencido de que "ser¨¢ una de las primeras medidas que ponga en marcha el Partido Popular". Es m¨¢s, si no fuera as¨ª, su grupo est¨¢ dispuesto a plantear inmediatamente una iniciativa "en la direcci¨®n propuesta por la Ley de Contratos de Distribuci¨®n. Estamos muy comprometidos con este asunto y lo vamos a llevar en el programa electoral". Aunque est¨¢ convencido de que no se abordar¨¢ antes de principios del pr¨®ximo a?o, reconoce, sin embargo, que ser¨¢ un tr¨¢mite complejo si finalmente se trata de una ley horizontal que afecte tambi¨¦n a otras actividades que se han subido al carro, como las franquicias, estaciones de servicio, quioscos de prensa..., que provocaron su "acongojamiento" cuando la vieron sobre la mesa.
Es un problema que hay que solucionar "en todos los sectores implicados", seg¨²n el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Comisi¨®n de Industria, F¨¦lix Larrosa. Si gana el PP las elecciones, "intuye" por sus conversaciones con sus colegas populares que presentar¨¢n un nuevo proyecto de ley, aunque en la misma direcci¨®n. Y si vuelve a gobernar el PSOE, se volver¨¢ a presentar el proyecto deca¨ªdo. "Hab¨ªamos trabajado para que en septiembre saliera la ley del Senado", se lamenta.
Una ley que, seg¨²n el portavoz del PNV en la citada comisi¨®n, Pedro Azpiazu, "en las circunstancias actuales hubiera dependido m¨¢s de nosotros". Este grupo parlamentario no ha escondido sus preferencias en ning¨²n momento: "Al plantearse en esos t¨¦rminos de unos frente a otros, hemos defendido la posici¨®n de los concesionarios, pero ambos tendr¨¢n que llegar a un acuerdo de manera que unos puedan fabricar y otros vender en condiciones razonables".
Por su parte, en Izquierda Unida reconocen no tener las ideas claras ante la dial¨¦ctica planteada; seg¨²n el responsable econ¨®mico de la coalici¨®n, Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa, "en las circunstancias actuales, y dada la situaci¨®n de crisis, ser¨ªamos m¨¢s partidarios de mantener el empleo en el sector de la distribuci¨®n". Eso s¨ª, a cambio de "una mayor transparencia, aportar m¨¢s valor a?adido, procurar pol¨ªticas de abaratamiento del precio de los autom¨®viles, mejorar la atenci¨®n y el servicio...".
A la espera de lo que preparen en el PP, el ¨²nico que no ha querido responder a las preguntas de EL PA?S, y donde mantienen el coraz¨®n part¨ªo entre la defensa de los intereses industriales del sector y los del mundo de la distribuci¨®n, no cabe duda de que el pr¨®ximo responsable administrativo tendr¨¢ que pronunciarse m¨¢s pronto que tarde sobre la conveniencia de seguir apoyando a la oferta -las decisiones del Gobierno actual, con el apoyo de los sindicatos y las Administraciones auton¨®micas correspondientes, han asegurado la vida de las plantas espa?olas al menos durante la presente d¨¦cada- o inclinarse tambi¨¦n por la demanda como solicitan algunas voces internas y demostraron con su voto favorable a la enmienda incorporada en la Ley de Econom¨ªa Sostenible.
El importante peso del sector en la econom¨ªa nacional (5% del PIB, 10% del empleo, 25% de las exportaciones...), cuyos responsables no se cansan de repetir, lo van a colocar en un lugar destacado en m¨ªtines y propuestas electorales. Y ser¨ªa de esperar una mayor concreci¨®n de la que se suele hacer gala en estos periodos de promesas.
De momento, no es buena se?al que tanto fabricantes como importadores, distribuidores, concesionarios y vendedores est¨¦n todos ellos convencidos de que van a recibir los favores de todos los partidos sea cual sea la composici¨®n del Parlamento a partir del pr¨®ximo 21 de noviembre.
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