"Yo soy la v¨ªctima, me pintaron la cara", aduce el alcalde de Mondariz
Visto para sentencia el juicio por desobediencia del regidor a la Guardia Civil
El alcalde de Mondariz, Julio Al¨¦n, en el alegato que le brind¨® la juez de Ponteareas como final del juicio celebrado ayer para dilucidar la acusaci¨®n contra ¨¦l y su hijo de desobediencia a la Guardia Civil, coloc¨® dos perlas significativas. Una: "Me enfad¨¦ un poquito cuando [los agentes] mencionaron a Franco", admiti¨®, y la otra: "En este caso yo soy la ¨²nica v¨ªctima, porque me pintaron la cara". Los hechos ocurrieron el 20 de mayo, ¨²ltimo d¨ªa de la campa?a de las elecciones municipales.
La pintada sobre su cara fue el detonante del incidente, en la playa fluvial de O Val, aquel d¨ªa muy concurrida. Aunque lo que pintaron los tres j¨®venes fue un cartel electoral de Al¨¦n pegado a un contenedor de basuras: "No les votes", escribieron con un spray. Alguien avis¨® al PP y un grupo de militantes acab¨® sacudiendo a los insurgentes, seg¨²n testigos presenciales. Pero eso no era materia del juicio de ayer. Avisada la Guardia Civil, cuando la pareja llega al lugar, ya se hab¨ªa ido la comitiva del PP, que reapareci¨® cuando los agentes estaban escuchando a los agredidos: aqu¨ª es donde el alcalde, su hijo, Julio Al¨¦n Mart¨ªnez -que se hace llamar Julio Al¨¦n Jr. y que ayer no compareci¨® por hallarse en Italia, estudiando-, y otro familiar, dieron la nota.
Julio Al¨¦n: "Me sent¨ª terriblemente maltratado"
Los testimonios en sala del alcalde y de los agentes no coincidieron en lo detalles, naturalmente. El regidor estaba en Vigo, dijo, cuando le avisaron de "un problema" en la playa, y all¨¢ fue. "Hab¨ªan insultado al de la megafon¨ªa, pero la gente nos pidi¨® disculpas y todo se arregl¨®. Nos fuimos a la sede [del PP en Mondariz] y de nuevo nos avisaron de que estaba la Guardia Civil". Volvieron a la playa y, al bajar de los coches, "hab¨ªa personas increp¨¢ndonos e insult¨¢ndonos", dijo. El alcalde se present¨® a los agentes como tal y les orden¨® que las identificaran. Uno le respondi¨® que Franco ya hab¨ªa muerto en 1975, que se tranquilizara. "??Vas a darme t¨² lecciones de Historia?!", se crisp¨® el regidor, profesor de Filosof¨ªa, seg¨²n precis¨® ayer.
El ambiente era "de gallinero, de griter¨ªo", explic¨® Al¨¦n, y de ah¨ª que elevara el tono de voz. "Est¨¢bamos en di¨¢logo [con los agentes], creo que no grit¨¦", dijo. "En ning¨²n momento hice aspavientos, aunque yo gesticulo mucho por naturaleza. Pero sin faltar al respeto, ni yo ni mi hijo", a?adi¨®, antes de admitir que, efectivamente, les dijo que llamar¨ªa al teniente [del cuartel de Ponteareas]. "Es que me sent¨ª terriblemente maltratado", adujo.
Los dos agentes coincidieron en se?alar que los ¨²nicos que armaron alboroto fueron el alcalde, "que estaba muy alterado", su hijo -que dijo "?t¨² a un alcalde no le das ¨®rdenes, est¨¢ por encima tuya!"- y el otro familiar. Los tres hab¨ªan llegado en varios coches con otras 15 o 20 personas cuando los agentes hablaban con los j¨®venes agredidos. "Nos dijeron que no denunciar¨ªan porque estaban en paro y ten¨ªan miedo al alcalde, de que les impidiera alg¨²n trabajo".
Los agentes, seg¨²n declararon, intentaron desde el primer momento apartar a los tres agitadores para calmar el ambiente. Pero no obedec¨ªan. Ni a eso ni, luego, a que el alcalde les facilitara el DNI, cosa a la que, despu¨¦s de reiteradas peticiones, accedi¨® al cabo de unos 20 minutos. Padre e hijo, por el contrario, reclamaron a los agentes que se identificaran con nombre y apellidos.
En su atestado le denunciaron por desorden p¨²blico. Pero en el juicio de ayer los Al¨¦n respondieron de una falta de desobediencia -por la que tambi¨¦n hay incoado un expediente administrativo, con multa de 600 euros-, por la que el fiscal pidi¨® para el regidor 30 d¨ªas de multa, a raz¨®n de 15 euros diarios, y de seis euros diarios para su hijo.
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