Una met¨¢fora sobre la dignidad
La danza de Seydou Boro se adentra en el Central en la dualidad del ser humano
El caballo simboliza la integridad. Cada hombre lleva un caballo en su interior que le hace no bajar la cabeza y comprometerse con lo que le rodea. Pero toda esa fuerza interior se puede derretir. El hombre acaba entonces con su dignidad perdida, se pone a cubierto en un rinc¨®n y deja de luchar. El tango del caballo, el espect¨¢culo que el core¨®grafo Seydou Boro presenta hoy en el Teatro Central de Sevilla, habla de esa b¨²squeda de la integridad y de los peligros que la amenazan. La obra, que tambi¨¦n podr¨¢ verse ma?ana, se adentra en la necesidad de mantener la dignidad y el compromiso con el resto de los hombres. Ambas funciones del espect¨¢culo se ofrecer¨¢n a partir de las 21.00. El tango del caballo cuenta con siete bailarines (el propio Boro acompa?ado de Bienvenue Bazi¨¦, Nadia Beugr¨¦, Lauriane Madelaine, Marjorie Moy, Ouss¨¦ni Sako y Boukson S¨¦r¨¦) y tres m¨²sicos (Sylvain Dando Par¨¦, Dramane Diabat¨¦ y Tom Diakit¨¦).
"Cuando una persona pierde la integridad se lic¨²a", afirma el core¨®grafo
"En los ojos de los caballos nos vemos. Vemos el tango de nuestras vidas. ?C¨®mo mantener la verticalidad de hombre y de mujer en una sociedad que se estratifica? ?C¨®mo podemos dar forma a nuestras convicciones pol¨ªticas de hombres ¨ªntegros? ?C¨®mo escapar a ese matrimonio de la mentira con el inter¨¦s personal que retuerce el cuello a los caballos dignos?", ha escrito Boro (Uagadug¨², Burkina Faso, 1968) para dar algunas claves sobre su espect¨¢culo de danza.
"El tango del caballo es como una met¨¢fora que habla de la dualidad dentro de uno mismo. Dentro de nosotros existe una confrontaci¨®n. Cada persona tiene un caballo interno. Y si se pierde este caballo interno, uno se transforma en un mulo. La pregunta es si sigue existiendo un compromiso dentro de las personas. Si se pierde ese grito interior, esas ganas de comprometerse, es como si uno estuviera muerto. Del caballo me interesa su integridad, que lo lleva a no mentir. Intento transformar esto en danza", afirm¨® ayer Boro en la presentaci¨®n de su espect¨¢culo en Sevilla. Boro se incorpor¨® en 1993 a la compa?¨ªa Matilde Monnier, del Centro Coreogr¨¢fico Nacional de Montpellier. En 1995, fund¨®, junto a Salia Sanou, la compa?¨ªa Salia N? Seydou. En 2008, ambos core¨®grafos crearon Poussi¨¨res de sang, una obra para siete bailarines, cuatro m¨²sicos y una cantante. Poussi¨¨res de sang ofrece una exposici¨®n cruda de la violencia humana.
"El espect¨¢culo se titula El tango del caballo porque existe esa tensi¨®n dentro de nosotros. Seguimos manteniendo una visi¨®n del futuro. Esto es lo que hace que sigamos andando. El caballo es un ser honrado, ¨ªntegro... El caballo no sabe enga?ar, no sabe hacer trampas. Uno puede ver el reflejo de s¨ª mismo en el caballo. Cuando una persona pierde la integridad se lic¨²a. Esa persona ya no est¨¢ llena y se derrama. En esta obra se nota la metamorfosis de los que pierden el caballo. Es como si en los altibajos de la vida uno tirase la toalla", explic¨® Boro, al que muchos consideran el core¨®grafo africano de danza contempor¨¢nea m¨¢s reconocido del circuito internacional.
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