Europa cae muy lejos...
El pasado mi¨¦rcoles, a las nueve de la noche y camino del trabajo, pongo la radio del coche. Espero escuchar las terribles noticias sobre el futuro de Europa, saber si Merkel y Sarkozy en su reuni¨®n han decido algo nuevo sobre Grecia o si Papandreu ha dado marcha atr¨¢s.
Pero resulta que no puedo conectar con ning¨²n noticiero. Est¨¢n todas las cadenas retransmitiendo los partidos de f¨²tbol del mi¨¦rcoles. Y no son la final de la Champions o de la Liga, son partidos "tontos" y comunes como hay otras decenas a lo largo del a?o. Deduzco, pues, que consideramos m¨¢s interesantes esos partidos que nuestro futuro. Estoy seguro de que a esta hora en Alemania, Francia u otro pa¨ªs del primer mundo europeo, estar¨¢n los noticieros de las radios a otras cosas m¨¢s relevantes. Espa?a es como Grecia, tenemos lo que nos merecemos. Porque un pa¨ªs que prefiere f¨²tbol a futuro, es un pa¨ªs condenado. A veces pienso que los 40 a?os de dictadura hicieron mucho m¨¢s da?o del que se ve a simple vista.
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