Crisis y servicios sociales

Los servicios sociales son el paraguas del Estado de bienestar para dar protecci¨®n a las personas m¨¢s vulnerables. Gestionan servicios y prestaciones para cubrir las necesidades b¨¢sicas de los ciudadanos. Siempre, pero especialmente en ¨¦pocas de crisis resultan fundamentales para evitar que un mayor n¨²mero de familias se deslicen hacia la pobreza y la marginalidad social.

Con la crisis, la demanda de ayuda ha aumentando, sin que se hayan tomado medidas para reforzar los servicios, por el contrario, se recortan recursos. Los centros est¨¢n colapsados, son incapaces de atender la creciente demanda de personas que acuden en busca de apoyo para poder alimentar a su familia o pagar el alquiler. Las listas de espera aumentan, los tiempos para ser atendido o cobrar prestaciones se alargan, las condiciones para su acceso se endurecen.

?De qu¨¦ sirven las leyes y normativas de protecci¨®n social, si la ayuda no llega cuando hacen falta? Estos ciudadanos tambi¨¦n tienen derechos. Est¨¢n en situaciones de extrema precariedad, si no se les da respuesta r¨¢pida y efectiva generar¨¢n importantes bolsas de exclusi¨®n social.

Si hablamos de justicia social, esto hoy, es inaceptable. Los recursos existen, 7.551 millones de euros ha dedicado el Estado al saneamiento de los bancos. Los beneficios de las empresas del Ibex 35 siguen creciendo, tambi¨¦n las ganancias de las firmas de lujo y m¨¢s de 244.000 millones se podr¨ªan conseguir seg¨²n los t¨¦cnicos de Hacienda combatiendo el fraude fiscal y la econom¨ªa sumergida.

Dinero hay. En la forma en la que se reparte est¨¢ la clave. Dedicar m¨¢s dinero a los que m¨¢s lo necesitan es b¨¢sico. No podemos dejar en la cuneta a miles de familias, cada vez m¨¢s empobrecidas, cada vez m¨¢s vulnerables.

Los sistemas de protecci¨®n hoy m¨¢s que nunca son necesarios y deben funcionar, dando una respuesta adecuada que permita vivir dignamente a las personas.