La campa?a esquiva la Ley de Costas
El PP tramita en las Cortes rebajas en la norma que regula la construcci¨®n junto al mar - "Si se abre ese mel¨®n puede haber problemas", advierten en el PSOE
Entre el aluvi¨®n habitual de promesas de los partidos en ¨¦poca electoral, la soluci¨®n al problema de las viviendas de poblados tradicionales amenazados por la Ley de Costas de 1988 ha sido sepultada esta vez por las proclamas econ¨®micas sobre la crisis y el paro. Encarrilado el caso m¨¢s emblem¨¢tico de los n¨²cleos de Mar¨ªn, la cuesti¨®n ha desaparecido de los discursos de los candidatos, pero sigue pendiente de tr¨¢mite en el Congreso una proposici¨®n del PP para cambiar la norma, salvaguardar los n¨²cleos, legalizar de paso casas construidas posteriores a la ley y recortar la protecci¨®n del dominio p¨²blico. A esta se suma otra iniciativa inquietante, pendiente en el Senado y tambi¨¦n del PP, que permitir¨ªa indemnizaciones compensatorias y la pr¨®rroga de las concesiones junto al mar. Esta ¨²ltima cuesti¨®n afecta de lleno a la permanencia de la pastera de Ence en la r¨ªa de Pontevedra, con fecha de cierre en 2018.
"No estamos por dar v¨ªa libre", avisa la nacionalista Fern¨¢ndez Davila
Aunque en el ¨²ltimo decenio han proliferado asociaciones de afectados contra la ley en zonas costeras de Ribeira, Moa?a o Vilaboa, paradigm¨¢tico ha sido siempre el caso de Mar¨ªn. Poblados marineros como Mogor o Aguete estaban en pie mucho antes de la ley del 88, pero el hecho no qued¨® acreditado durante la tramitaci¨®n. Fuese por errores en los mapas o por descuido del Ayuntamiento, los n¨²cleos fueron declarados como no urbanos y autom¨¢ticamente la protecci¨®n del dominio p¨²blico se fij¨® en 100 metros, frente a los 20 que la ley prev¨¦ para circunstancias especiales. El conflicto est¨¢ pr¨®ximo a cerrarse, despu¨¦s de que Costas del Estado y el Ayuntamiento llegasen a un acuerdo este verano. El pacto deber¨¢ consagrarse en el plan de ordenaci¨®n municipal. La alcaldesa, Mar¨ªa Ramallo (PP), asegur¨® que el documento estar¨¢ en 2012, tras una negociaci¨®n impulsada por el difunto bipartito local.
A partir de ah¨ª, la casu¨ªstica diverge. En Vilaboa hay casas antiguas, pero tambi¨¦n otras construidas en los noventa, con la ley en vigor. En Moa?a, el deslinde, err¨¢tico, permite que construcciones a pie de playa sean legales y otras m¨¢s alejadas est¨¦n amenazadas. Muchas, a pesar de su ilegalidad, obtuvieron licencia municipal. A principios de a?o, el PP aprob¨® en el Parlamento aut¨®nomo llevar al Congreso una modificaci¨®n de la Ley de Costas con esp¨ªritu de caj¨®n de sastre que legaliza casi todo lo que cuente con un "acto administrativo p¨²blico" favorable e incluso plantea excluir ¨¢reas del dominio p¨²blico por decisi¨®n municipal. PSOE y BNG se opusieron frontalmente.
Entre tanto, las protestas han aumentado de intensidad en Vilaboa en los ¨²ltimos meses. El pleno municipal acord¨® por unanimidad pedir a la Xunta que suspenda los derribos en marcha, pero el PP vet¨® en el Parlamento el mes pasado lo que apoy¨® a escala local, con el argumento de que no puede modificar decisiones judiciales. Los tres partidos plantean una soluci¨®n como la de Mar¨ªn, pero los vecinos no est¨¢n convencidos. "Costas solo aceptar¨¢ un acuerdo si demostramos que las zonas afectadas estaban edificadas en dos terceras partes, y en ning¨²n n¨²cleo del municipio se da eso", admite un miembro de la plataforma Salvemos Vilaboa. As¨ª que esperan a que la previsible victoria electoral del PP empuje la tramitaci¨®n de la ley en el Congreso. Rom¨¢n Rodr¨ªguez, portavoz de asuntos urban¨ªsticos del PP, defender¨¢ la propuesta en la C¨¢mara baja, pero no pone plazos. "Una vez que llegue el nuevo Gobierno lo pondremos encima de la mesa. Somos una formaci¨®n coherente", dice.
En el otro extremo est¨¢ Ismael Rego (PSOE), que ir¨¢ tambi¨¦n a Madrid cuando toque, pero para rechazar de plano el cambio. "Si se abre ese mel¨®n, puede haber problemas serios. La Ley de Costas es un instrumento tremendamente ¨²til para la protecci¨®n del litoral. La disculpa del PP es proteger los n¨²cleos pero el objetivo es implantar el dise?o de Telmo Mart¨ªn: Sanxenxo y Barreiros", aduce, e insiste en que la v¨ªa del plan general es v¨¢lida para Vilaboa o ciertas zonas de A Guarda, con una interpretaci¨®n flexible de la norma como est¨¢, sin cambios.
El BNG se expresa en t¨¦rminos similares. En 2009 los nacionalistas presentaron, tambi¨¦n en el Congreso, una modificaci¨®n en la l¨ªnea de la que preve¨ªa la ley de vivienda del bipartito, de alcance mucho m¨¢s restringido y recurrida a su vez por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional por invasi¨®n de competencias. "No se debati¨® porque se acord¨® con el Gobierno dar prioridad a la cuesti¨®n de Mar¨ªn", explica la cabeza de lista al Congreso por Pontevedra, Olaia Fern¨¢ndez Davila. "No estamos por dar v¨ªa libre. La propuesta del PP elimina limitaciones a la construcci¨®n y favorece la especulaci¨®n urban¨ªstica".
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