La voz dormida de Oriente Medio

Smadar Elhanan perdi¨® la vida en un atentado suicida en Jerusal¨¦n en 1997. Ten¨ªa 14 a?os. El dolor provoc¨® en su padre, Rami, hijo de un jud¨ªo h¨²ngaro que emigr¨® a Palestina tras la liberaci¨®n del campo de concentraci¨®n de Auschwitz en 1945, una revoluci¨®n interna. Sinti¨® el latido de un pueblo humillado detr¨¢s de un asesinato tan desgarrador como el de su propia hija y empez¨® a "ver a los palestinos por primera vez como seres humanos", reconoce con valent¨ªa. "Es m¨¢s f¨¢cil ver a los otros como enemigos, porque, de ese modo, puedes volcar en ellos tu rabia. Ocurre cuando la gente no quiere reconocer sus propios horrores. Somos un espejo y cuando nos vemos reflejados en los dem¨¢s es cuando nos damos cuenta de cu¨¢nto sufrimos todos. El c¨ªrculo de violencia no se romper¨¢ hasta que todos compartamos ese dolor", afirma en el documental Caminos de Paz. Las otras voces de Israel y Palestina, un trabajo realizado por las ONG Asociaci¨®n Galega de Reporteiros Solidarios (Agareso) y Asamblea de Cooperaci¨®n por la Paz (ACCP).

Yamaini vive atrapado entre la piqueta de unos y la burocracia de otros

"Lo f¨¢cil es ver al otro como enemigo y volcar en ¨¦l tu rabia", dice Elhanan

La cinta es un mosaico de dramas, iron¨ªas y esperanzas. La fuerza y la honestidad que emanan de los testimonios se engarzan como una red que atrapa la atenci¨®n del espectador durante todo el metraje. Apenas es media hora, el tiempo justo para que cada escena, conjugadas en un ejercicio audiovisual vertiginoso, resuene como un aldabonazo en la conciencia. Sus historias no son las t¨®picas de un conflicto eterno que llena miles de horas de telediarios sino las voces que no se escuchan, las de la sociedad civil que quiere di¨¢logo y paz.

En el documental hablan colectivos como Foro por la Paz, formado por un centenar de asociaciones de ambos pueblos; All For Peace, que gestiona una emisora de radio; Combatants For Peace, fundada por antiguos militares; y The Parent's Circle, al que pertenece Elhanan, integrado por familias israel¨ªes y palestinas que han perdido seres queridos en esta guerra. Comparecen otros retratos personales conmovedores, como el del palestino Hashem Yamaini. Imposible olvidarle, retratado junto a su sexta casa. Las cinco anteriores fueron derribadas en el marco de la pol¨ªtica de demoliciones que practica el poder israel¨ª como medida de presi¨®n en los territorios ocupados.

Unos 24.000 derribos contabilizan desde el Comit¨¦ Israel¨ª contra la Demolici¨®n de Viviendas (ICAHD, en sus siglas en ingl¨¦s), cuyo director, Jeff Halper, niega la versi¨®n oficial. "Esto no se hace por razones de seguridad, como dice el Gobierno, sino por razones pol¨ªticas, para incorporar asentamientos, al igual que el muro de Cisjordania, censurado pero no impedido". La realidad demuestra que esa frontera artificial en una tierra que debe ser compartida educa en el odio a miles de ni?os y construye refugios en el fundamentalismo, y tambi¨¦n revela la existencia de personas como Hashem Yamaini, que levanta otra vivienda tras el paso de cada piqueta, aunque tambi¨¦n se tope con la desesperante burocracia palestina para tramitar la licencia de construcci¨®n. "Es un sentimiento que no puedo expresar", dice.

Un equipo formado por cuatro reporteros de la asociaci¨®n Agareso viaj¨® por tierras de Palestina durante unos quince d¨ªas entre octubre y noviembre del a?o pasado. Les gui¨® quien por aquel entonces era el jefe de misi¨®n en Oriente Medio de ACPP, Jos¨¦ Ruib¨¦rriz, el nexo entre las facetas de cooperaci¨®n para el desarrollo, ayuda humanitaria, sensibilizaci¨®n e incidencia pol¨ªtica que abarca el trabajo de su organizaci¨®n relacionado con esta parte del mundo. En paralelo, las dos ONG presentar¨¢n en Santiago y Pontevedra, a finales de este mes otro documental sobre la vida de las personas con discapacidad en Palestina.

"No es f¨¢cil superar el prejuicio de que nosotros, como asociaci¨®n propalestina a favor de la creaci¨®n de un Estado soberano, tambi¨¦n trabajemos con israel¨ªes, y los periodistas de Agareso lo comprendieron enseguida. Ese es el camino, en cualquier conflicto", anota el coordinador de proyectos de la delegaci¨®n de Galicia de ACPP, Francisco Raig¨®n.

A pesar de haber probado el gas lacrim¨®geno en la manifestaci¨®n que todos los viernes ocurre en el peque?o pueblo de Nabi Saleh, cerca de Ramallah, y del interrogatorio de m¨¢s de tres horas, con tintes de secuestro, intimidaci¨®n y vejaciones, al que la polic¨ªa someti¨® a los reporteros a su salida del pa¨ªs en el aeropuerto de Tel Aviv, la guionista del documental, la periodista Luisa P¨¦rez Puga, admite que su visi¨®n del conflicto ha cambiado: "He conocido gente maravillosa. El problema es el Gobierno, el pueblo quiere la paz".