Razones para adelantar las elecciones
El ¨²ltimo culebr¨®n de la pol¨ªtica gallega ha sido el del amago de adelanto de elecciones (me refiero al ¨²ltimo culebr¨®n del partido en el gobierno, porque los que protagoniza la oposici¨®n llenan una parrilla televisiva diaria). En pol¨ªtica, la t¨¢ctica del amago suele ser parecida a la del juego del pa?uelo: si uno de los contendientes hace como que lo coge, el otro pierde tanto si act¨²a confiando en que lo ha hecho como si cree que no y tarda en reaccionar. En lo de las elecciones auton¨®micas, la oposici¨®n deber¨ªa intentar pillar el pa?uelo y salir corriendo, porque el PP est¨¢ dispuesto a coger la prenda en cuanto los otros se relajen. Que a medio plazo las va a adelantar, vamos.
El motivo principal es que el Gobierno de Feij¨®o es como un ciclista novel: si para, se cae
Una de las razones para hacerlo es que no lo quiere la oposici¨®n, incluido Manuel Baltar. Otra es disfrutar de la evidente ventaja de pelear con contrincantes vapuleados en una contienda reciente. Una tercera es poder renovar el gobierno sin que se note. Y todav¨ªa una cuarta es evitar quedar a contrapi¨¦ y en evidencia tanto si el Gobierno de Rajoy acaba compitiendo en brevedad con el otro antecedente presidencial gallego -si aceptamos a Leopoldo Calvo Sotelo como gallego- como si no y hay que tragar m¨¢s sapos como la petici¨®n al Gobierno central en funciones de que paralice el AVE. Pero, sobre todo, la raz¨®n principal de que habr¨¢ adelanto, moderado o t¨¦cnico, pero adelanto, es que el Gobierno Feij¨®o es un como un ciclista novel. Si se para, se cae.
Un mito tan extendido y tan falaz como el del corte de digesti¨®n es el de que los gobiernos conservadores se centran en la gesti¨®n en detrimento de la ideolog¨ªa. De hecho, las ¨²nicas medidas concretas que ha amagado el prepresidente Rajoy son las ideol¨®gicas, y lo mismo han hecho la mayor¨ªa de los nuevos gobiernos municipales conservadores. Tambi¨¦n es lo que hizo la Xunta. Despu¨¦s de liberarnos del yugo del gallego obligatorio con un par de decretos que pretend¨ªan importar a los colegios la guerra que hab¨ªa en los peri¨®dicos y arrumbando cientos de miles de libros sin estrenar por el pecado original de estar en vern¨¢culo, lo que han hecho dar pedal en la confrontaci¨®n ideol¨®gica.
En lo que se refiere a los problemas reales, o no los han afrontado, o han intentado y han fracasado, porque los resultados son los que son. Dentro de la Espa?a que nos ha dejado Zapatero, Galicia es la comunidad en la que m¨¢s ha crecido el paro en noviembre y el ¨²ltimo ?ndice de Producci¨®n Industrial nos sit¨²a como la comunidad espa?ola en la que m¨¢s cay¨® la actividad empresarial (un descenso del 8,8%, frente a un 1,7% de la media espa?ola). Medidas como conceder siete millones de euros en ayudas del Igape a tres empresas de reciclaje de residuos constituidas por la mujer de un alto cargo del organismo cuya experiencia empresarial se reduc¨ªa a gestionar una guarder¨ªa no ayudan al crecimiento industrial (y a mejorar la competitividad del sector de residuos, menos). Del ¨¦xito del golpe de tim¨®n del plan e¨®lico ya ni hablamos, y los asuntos del campo mejor ni mencionarlos.
Estas cosas no suelen salir en los peri¨®dicos, que no han sustituido aquellas reveladoras portadas sobre los dependientes que esperaban el reconocimiento de la Xunta por otras con los despojados de la tarjeta que les garantiza la asistencia sanitaria. Pero el Gobierno gallego s¨ª sabe lo que pasa. As¨ª que la culpa era de Zapatero, y lo ser¨¢ de Merkel, o volver¨¢n los cl¨¢sicos de que estamos en una esquina (como si Noruega o Dinamarca estuviesen en el centro) o de que llueve (como si las econom¨ªas de la Europa soleada fuesen las pujantes). Tambi¨¦n lo sabe buena parte de la sociedad gallega (seis de cada diez ciudadanos, seg¨²n una encuesta reciente de Ipsos), pero los ciclistas tienen a su favor la inercia, los medios de comunicaci¨®n, el clima pol¨ªtico y la incapacidad de la oposici¨®n para levantar una alternativa cre¨ªble, en lo ideol¨®gico o en lo propositivo. Es dif¨ªcil pensar que socialistas y nacionalistas pueden arreglar las cosas de todos cuando no parecen capaces de arreglar las suyas.
Por lo que se ve, en el PSdeG y (en el PSOE) el principal problema, y la soluci¨®n, es elegir candidato. En el BNG oficialmente ni siquiera hay problema, pero por si acaso ya est¨¢n localizados los culpables, adem¨¢s de los medios de comunicaci¨®n. En el caso de los socialistas, quiz¨¢s deber¨ªan pensar en que para tener algo parecido, el electorado no considera el cambiar de proveedor. En el de los nacionalistas, que para gobernar -bien, digamos, para no soliviantar, que para transformar Galicia- se necesita sumar, no depurar, excepto que los problemas que quieras solucionar son los tuyos y no los de todos. Ning¨²n pueblo cree en su gobierno, a lo sumo, los pueblos est¨¢n resignados, dec¨ªa Octavio Paz. Ya que no hay soluciones, por lo menos tendr¨ªan que vender ilusi¨®n, pero como mucho, ofrecer¨¢n elecciones. M¨¢s pedal.
@sihomesi
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