Hasta aqu¨ª lleg¨® el despilfarro

El Consell descarg¨® ayer sobre el lomo de los funcionarios todo el peso de su insolvencia econ¨®mica. De momento, mientras se sustancia el cuento de la lechera de las centrales de compras, los c¨¦ntimos sanitarios y las sobrecargas impositivas del IRPF para rentas altas, lo que se les quita a los trabajadores p¨²blicos es lo que va a servir para sortear el agobio de las deudas. Que, por cierto, son 108 millones m¨¢s de los 271 que el consejero de Hacienda, Jos¨¦ Manuel Vela, anticip¨® a los sindicatos el mi¨¦rcoles en la Mesa General de Negociaci¨®n y que ayer evit¨® explicar de d¨®nde los repelar¨¢.

El tormento de los funcionarios, por ahora de sanidad y educaci¨®n, que adem¨¢s arrastran la reducci¨®n del 5% que efectu¨® Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero (?por qu¨¦ no la retira ahora Mariano Rajoy?), conmueve m¨¢s que el sacrificio que se van a aplicar los consejeros y altos cargos, que seg¨²n desvel¨® el vicepresidente, Jos¨¦ Ciscar, van a vincular sus sueldos al d¨¦ficit. No es comparable y, adem¨¢s, supone poca penitencia para quienes cometieron el pecado. El propio Ciscar lo reconoci¨®: "Si no hubi¨¦semos gastado m¨¢s de lo que ingresamos, no existir¨ªa el d¨¦ficit".

Los problemas que ahora tiene la Generalitat, y pagan los funcionarios y los dem¨¢s ciudadanos, no son solo la consecuencia de la crisis y de la falta de un sistema efectivo de financiaci¨®n auton¨®mica, sino tambi¨¦n (en gran parte) de la gesti¨®n que ha hecho en los ¨²ltimos 16 a?os el PP desde el Consell (en los que el mismo Vela que ahora pone cara de sorpresa ha estado cortando bacalao como el que m¨¢s). Aquel despilfarro que nos encumbr¨® es la ruina que nos est¨¢ sepultando.