Halladas seis ¨¢guilas envenenadas en una finca de caza del Estado

Una finca propiedad de Parques Nacionales vive uno de los m¨¢s graves episodios de envenenamiento de especies protegidas. La Guardia Civil recuper¨® en la finca La Encomienda de Mudela (Ciudad Real) los restos de seis ejemplares de ¨¢guila imperial ib¨¦rica con s¨ªntomas de haber sido envenenados. El caso pone en aprietos al Ministerio de Medio Ambiente, que gestiona la finca y que sirve como coto de caza para el Rey. El ministerio anunci¨® que colaborar¨¢ con la Junta de Castilla-La Mancha y la Guardia Civil y destaca que fueron sus agentes los que dieron el aviso.

Los agentes del Servicio de Protecci¨®n de la Naturaleza (Seprona) hallaron cuatro cuerpos en avanzado estado de descomposici¨®n en el suelo, uno en un nido y otro en un ¨¢rbol. Son dos adultos y cuatro pollos. Ayer rastreaban la zona para ver si encontraban el cebo envenenado que, presumiblemente, las hab¨ªa matado. Los an¨¢lisis tardar¨¢n d¨ªas.

El ¨¢guila imperial ib¨¦rica est¨¢ en peligro de extinci¨®n y en Espa?a quedan unas 350 parejas. Ecologistas en Acci¨®n consider¨® que este caso es "muy posiblemente debido al uso ilegal de cebos envenenados en la finca La Encomienda de Mudela". En muchos casos es dif¨ªcil despu¨¦s hallar los cebos envenenados, y puede que un ejemplar adulto trajera la pieza infectada -puede que despojos de ganado rociados con pesticida- de otra zona.

La finca pertenece al Ministerio de Medio Ambiente aunque, seg¨²n fuentes de Parques Nacionales, "se destina a la gesti¨®n cineg¨¦tica para la Casa del Rey". La Casa del Rey replic¨® que caza all¨ª de vez en cuando como en otras fincas. En Mudela hay tambi¨¦n un palacete p¨²blico del XIX.

Algunos gestores cineg¨¦ticos utilizan cebos envenenados para matar animales como los zorros, que se comen las perdices (lo habitual que se caza en Mudela) y merman la caza. Como m¨¦todo no selectivo ocurre que a veces caen especies protegidas.

"Pese a ser un delito incluido en el C¨®digo Penal sigue siendo habitual su uso en cotos de caza, trat¨¢ndose de un m¨¦todo masivo y no selectivo responsable de la muerte de miles de animales al a?o", conden¨® Ecologistas en Acci¨®n. En 2009 apareci¨® un oso pardo envenenado con Aldicarb, un potente plaguicida. En los ¨²ltimos a?os han aumentado las condenas por el uso de cebos envenenados -ha llegado a haber penas de c¨¢rcel aunque suelen ser suspensiones de licencia-.