Aparato de hierro
Agrup¨¦monos todos en un equipo compacto, sin fisuras, para detener la hemorragia. El mensaje de un partido fuerte que lanz¨® Alfredo P¨¦rez Rubalcaba el s¨¢bado es, precisamente, el de un aparato fuerte, duro y cohesionado. Aparato de hierro.
El enfermo no est¨¢ para excesos, solo para empezar la recuperaci¨®n lenta desde dentro de Ferraz, con un equipo lo m¨¢s fiel posible al candidato y que aproveche el congreso para que en la ejecutiva est¨¦n los m¨¢s pr¨®ximos. En caliente duele menos y es m¨¢s f¨¢cil prescindir de quienes como Juan Fernando L¨®pez Aguilar, Jos¨¦ Andr¨¦s Torres Mora, Leire Paj¨ªn o Pedro Zerolo se identifican con el zapaterismo y han apoyado a Carme Chac¨®n. Una vez abierto en canal el enfermo sobre la camilla se aprovecha para amputar.
Elena Valenciano ser¨¢ n¨²mero dos porque ya ejerc¨ªa como mano derecha de Rubalcaba y fue su jefa de campa?a en noviembre. En el anterior congreso, Jos¨¦ Blanco quiso que ella fuera la secretaria de Organizaci¨®n pero Zapatero apost¨® por Paj¨ªn, cometiendo uno de los muchos errores de pol¨ªtica de personal que caracterizaron el final del anterior l¨ªder socialista. Blanco, otro de los que formaliza su adi¨®s estos d¨ªas, ha dado muestras de influencia sobre Rubalcaba y ve situado como n¨²mero tres del partido a Oscar L¨®pez. El nuevo responsable de Organizaci¨®n form¨® parte del grupo de j¨®venes que se hicieron en pol¨ªtica a la sombra de Blanco, hasta coger peso propio y convertirse ahora en dirigentes muy valorados por Rubalcaba. Un caso similar es el de Antonio Hernando, reforzado y renovado en el n¨²cleo duro de Rubalcaba.
El otro nombre de la nueva ejecutiva es Patxi L¨®pez, considerado por muchos como un posible tapado para las pr¨®ximas elecciones generales. El a?o que viene habr¨¢ elecciones vascas y es muy probable que los socialistas pierdan entonces el que puede ser su ¨²ltimo Gobierno auton¨®mico. Sin formaciones ilegalizadas, los constitucionalistas pueden perder el Ejecutivo vasco, pero L¨®pez mantendr¨ªa el perfil del lehendakari constitucionalista que gestion¨® el final de ETA. Su alianza de hierro con Rubalcaba, que funcion¨® en julio cuando el golpe de Estado palaciego que impidi¨® las primarias, tiene ahora parte del pago debido.
Lo m¨¢s arriesgado de la nueva direcci¨®n est¨¢ en la presidencia que, aunque solo sea simb¨®lica, transmite un mensaje inequ¨ªvoco de cierre de filas para mantener Andaluc¨ªa como sea. El riesgo evidente es que Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n pierda las auton¨®micas de marzo y el PSOE quede con un cad¨¢ver pol¨ªtico en la presidencia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.