Despedida por acusar a La Scala de incitar a la anorexia
Una bailarina italiana denuncia la presi¨®n ejercida sobre las estudiantes
Una de las primeras bailarinas del ballet de La Scala de Mil¨¢n, que hab¨ªa criticado la plaga de anorexia entre el cuerpo de baile, ha sido despedida por la direcci¨®n en el lanzamiento de la temporada 2012. Mariafrancesca Garritano, de 33 a?os, ha sido acusada de "da?ar la imagen" de La Scala despu¨¦s de afirmar que uno de cada cinco bailarines sufre anorexia.
En una entrevista con el Observer publicada en diciembre, Garritano puso en evidencia al r¨¦gimen de la escuela de danza de La Scala, donde cont¨® que se la hab¨ªa presionado para que perdiera peso despu¨¦s de su ingreso cuando ten¨ªa 16 a?os. Dijo que todav¨ªa sufre dolores intestinales y frecuentes roturas de huesos, que ella cree que est¨¢n relacionados con la dieta, y denuncia que sus colegas eran incapaces de concebir. "He hablado con personas que est¨¢n ingresando ahora y parece que nada ha cambiado", dijo el a?o pasado.
Tuvo relaciones consentidas con varias alumnas, algunas menores
Carlo Maria Cella, portavoz de La Scala, ha admitido que en el pasado se presionaba con intensidad a las estudiantes, pero desminti¨® la afirmaci¨®n de Garritano de que la academia segu¨ªa convirtiendo a las bailarinas en anor¨¦xicas. "Decir que La Scala se parece a lo que Garritano afirma que vivi¨® hace 15 a?os es falso", dijo Cella. "Los m¨¦todos educativos que se usaban entonces no se emplean actualmente, y la escuela tiene un curso de nutrici¨®n. Acerca de la imposibilidad para tener ni?os, nueve de las compa?eras de Garritano se han quedado embarazadas en el ¨²ltimo a?o y medio".
Pero un antiguo compa?ero de Garritano dijo al Observer que hoy en d¨ªa no todo funcionaba de manera correcta con las bailarinas. "Una de cada cinco de las de aquella promoci¨®n de la escuela tuvieron trastornos alimentarios, y contin¨²an afectadas por graves consecuencias", dice Michele Villanova, de 47 a?os. "Lo vi en la manera en que la gente se comportaba, cuando entraban en profundas depresiones si ganaban peso. Es absurdo que La Scala despida a alguien solo por hacer una investigaci¨®n con profundidad".
La anorexia y la bulimia fueron reflejadas recientemente en la pel¨ªcula Cisne negro, ganadora de un Oscar, en la que la protagonista, interpretada por Natalie Portman, se obliga a vomitar para mantener el peso.
Garritano dijo que sab¨ªa que se jugaba el puesto de trabajo por sus revelaciones. Villanova coincide: "Las bailarinas tienen miedo a hablar, y lo que le ha sucedido a Garritano muestra el porqu¨¦". Al recordar sus tiempos en la academia en los ochenta, Villanova dice: "Hab¨ªa un ambiente que hac¨ªa que los estudiantes dieran prioridad a su aspecto f¨ªsico, justo en el momento en que sus cuerpos estaban cambiando. No puedes obsesionarte con perder peso cuando tienes 14 a?os".
Despu¨¦s de pasar una corta temporada estudiando en Mil¨¢n, Villanova fue enviado a continuar su formaci¨®n en el Bolsh¨®i de Mosc¨². Ah¨ª, afirma, encontr¨® un tratamiento menos draconiano del asunto del peso. "Ten¨ªan una cantina con comidas ricas en calor¨ªas, y se preocupaban por los alumnos. Si hubiera seguido mi formaci¨®n en Mil¨¢n, no creo que hubiera sido capaz de salir adelante".
No todos los colegas apoyan a Garritano. Varios bailarines de La Scala han reaccionado con hostilidad. Eleonora Abbagnato, de 33 a?os, que trabaja con la ?pera de Par¨ªs, la ha condenado y dice que solo busca publicidad.
? Guardian News & Media 2012.
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