Adi¨®s propinas
El turismo for¨¢neo no logra remontar y los extranjeros que visitan Espa?a no vienen a dejarse dinero
El sol no brilla tanto en el verano espa?ol. La crisis est¨¢ recortando el n¨²mero de turistas extranjeros que visitan el pa¨ªs en los meses estivales, cuando la tradici¨®n hac¨ªa que la afluencia for¨¢nea se multiplicaba exponencialmente a la llamada del Mediterr¨¢neo y la paella. En los siete primeros meses de 2009 han cruzado la forntera un 10,3% menos de turistas que en 2008. La oferta cultural parece, por otra parte, remontar. Y Madrid se lleva el gato al agua: es la ¨²nica regi¨®n espa?ola en la que ha aumentado el n¨²mero de extranjeros en los meses de junio y julio, un 7,6% y un 6,6%, respectivamente, seg¨²n la encuesta de turismo de fronteras (Frontur), del ministerio de Industria.
En la calle, sin embargo, algo no encaja. Las terrazas de la Plaza Mayor, en la capital, est¨¢n vac¨ªas. "?Qui¨¦n ha dicho que en Madrid ha subido el turismo? A ese le dec¨ªa yo que viniese a ver esto. ?Pero si tenemos un 40% menos de ingresos!", protesta Jorge Javier Garc¨ªa ante sus mesas vac¨ªas.
La impresi¨®n se sucede en todos los puntos de Espa?a. En el centro de Valencia, a pesar de que el espa?ol es un idioma m¨¢s entre el italiano, el ingl¨¦s o el franc¨¦s, la crisis se ha dejado notar. Lo perciben en la hosteler¨ªa y tambi¨¦n en el transporte. En la parada de taxis de la plaza de la Reina, en el centro de la ciudad, se forma un corrillo de conductores. "No hay turistas que llevar", se queja uno de ellos, "ahora tenemos que estar una hora o m¨¢s para hacer una carrera".
Pero el mayor problema para los sectores que en Valencia dependen del turismo es que los visitantes que llegan a la ciudad lo hacen con viajes enlatados y baratos. Del hotel al autob¨²s tur¨ªstico y del autob¨²s al hotel. "Vienen con el pu?o cerrado", comenta otra taxista mientras gesticula aparatosamente.
"Luego nos vamos a Marbella"
En Madrid, los visitantes low cost tambi¨¦n han monopolizado las cifras. Kasia Lindmev y Magdalena Szydko, dos j¨®venes polacas, toman el sol en uno de los bancos de piedra de la Plaza Mayor, casi vac¨ªa, sin consumir. "Nosotras vinimos en un vuelo de bajo coste y nos alojamos en la casa de unos conocidos, pero el resto de la gente... A lo mejor es que se han quedado en los hoteles por el calor. Saldr¨¢n luego", comenta Kasia.
El caso es que, pese al repunte de visitantes for¨¢neos, en los hoteles no est¨¢n de fiesta. La asociaci¨®n empresarial hotelera de Madrid calcula que este verano la ocupaci¨®n hotelera es entre un 20% y un 35% menor que otros a?os, la misma situaci¨®n que se ha mantenido durante todo el semestre. Y es que hay gente que ni siquiera duerme en la ciudad. "Hemos llegado hoy y estamos conociendo la ciudad, pero luego nos vamos a Marbella", explica Diana Dimotrova, una fugaz turista b¨²lgara.
Las rutas por varias ciudades de la geograf¨ªa espa?ola parecen haberse convertido en una alternativa a la tradicional semana vacacional. Unos pocos d¨ªas para ver unos pocos rincones del pa¨ªs. Tarquin, Hassan y Tabbitha, tres amigos de 19, 22 y 21 a?os respectivamente, han decidido recorrer Espa?a este agosto. De Catalu?a, llegaron a Andaluc¨ªa y ahora disfrutan de tres d¨ªas en Bilbao, donde culmina su aventura. No ten¨ªan ni idea de que ahora la ciudad celebra la Aste Nagusia, nueve d¨ªas de fiesta en los que el Ayuntamiento se ha dejado un presupuesto de tres millones de euros. "Fue una sorpresa, en cuanto bajamos del tren vimos a la gente por la calle y nos enteramos de que estaban de fiesta".
Corinna y Nicole, dos j¨®venes alemanas de 19 y 20 a?os, han gastado poco m¨¢s que lo que les cost¨® el billete de interrail. Sus primeras paradas fueron Girona y Barcelona, desde donde llegaron a Bilbao. A trav¨¦s del couch surfing, una red internacional de viajeros, han encontrado alojamiento en casa de un madrile?o afincado en la ciudad vasca. La pr¨®xima parada es Salamanca y todav¨ªa tienen dos semanas por delante para visitar otros puntos del pa¨ªs.
El t¨ªpico turista de playa se sigue viendo, pero otras especies, quiz¨¢ m¨¢s din¨¢micas y que realizan un gasto menor, le han relegado a un segundo plano de importancia. Christine Gresch y su esposo se cubren la cara del sol para poder observar mejor la fachada de la casa Batll¨®, una de las mayores atracciones tur¨ªsticas en Barcelona. Esta pareja de alemanes, en los 40, ya hab¨ªa estado en Espa?a, pero es su primera vez en la capital catalana. "Unos amigos nos contaron que estaba muy bien, econ¨®mico y con muchos sitios para visitar", explica ella mientras ense?a la gu¨ªa de la ciudad, llena de anotaciones y papeles de colores. "La verdad es que ha sido una escapada genial", a?ade.
Ofertas para turistas taca?os
Los Gresch aprovecharon una de las ofertas de ¨²ltimo minuto de la temporada y, al llegar a la ciudad, se han encontrado con una guerra de precios hasta en las tiendas de souvenirs. Estas campa?as son, precisamente, lo que parece haber salvado la temporada. Seg¨²n datos de la patronal del turismo en Barcelona, las ofertas han reactivado la actividad en el segundo trimestre del a?o, con un incremento de turistas del 4,6% en tasa interanual.
En M¨¢laga, el ambiente de feria no confirma los datos que indican un recorte en el n¨²mero de turistas con respecto a 2008. Carmen, que tiene un puesto de sombreros y abanicos en la calle Larios, arteria principal de la fiesta durante la tarde, levanta las cejas y contesta que no cree que haya menos gente que en a?os anteriores, que turistas hay "para parar un tren, sobre todo franceses e italianos". Mar¨ªa Vera, que lleva 26 a?os trabajando en una cafeter¨ªa junto al puesto de Carmen, discrepa: "S¨ª, gente paseando s¨ª que ves, pero es de comprarse una botellita de Cartojal para tom¨¢rsela en la calle, nada", se queja mientras cruza el recibidor con bandejas de pasteles en la mano.
"Ha cambiado el comportamiento del turista", apunta el presidente de la asociaci¨®n de empresarios hoteleros de la Costa del Sol, Jos¨¦ Carlos Escribano, "ahora reservan a ¨²ltima hora y por menos noches". Y no s¨®lo eso. La crisis ha afectado sobre todo a los turistas brit¨¢nicos y alemanes, los principales visitantes de la Costa del Sol. Este a?o, el descenso de extranjeros y el aumento del turismo nacional han provocado que los espa?oles supusieran "el 55% de los turistas en julio", seg¨²n Escribano.
Menos dinero, al fin y al cabo, incluso en Madrid, que combate en solitario la tendencia decreciente del turismo for¨¢neo, con 2.839.510 m¨¢s visitantes internacionales en los siete primeros meses del a?o (un 2,5% m¨¢s). M¨¢s turistas que en 2008, pero m¨¢s taca?os: el gasto medio por persona durante el mes de junio fue de 997 euros, un 13% menos que en el mismo per¨ªodo del a?o pasado. "?Has mirado en ese restaurante? Vengo de all¨ª y est¨¢ lleno de turistas", sugiere una transe¨²nte. Frente al dedo indicador, la respuesta: un McDonald's. Debe ser que los visitantes a¨²n no han descubierto lo barato que es comer de tapas por Madrid.
Con informaci¨®n de Jaled Abdelrahim Aranda, Camilo Sixto Baquero, Pablo Ferri y Jos¨¦ Luis Pardo.
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