Hacia la protecci¨®n de Guadarrama
Avance en la ordenaci¨®n de la sierra que separa Madrid de Castilla y Le¨®n, siete a?os despu¨¦s de que ambas autonom¨ªas se comprometiesen a convertirla en parque nacional
La Comunidad de Madrid est¨¢ apunto, por fin, de cerrar la protecci¨®n de la sierra de Guadarrama, un enclave indispensable de solaz para los madrile?os y fuente principal de sus recursos h¨ªdricos.
Las Administraciones regionales de ambas vertientes han avanzado y retrocedido en los tr¨¢mites para definir sus niveles de protecci¨®n. La de Castilla y Le¨®n ha rebajado la categor¨ªa de protecci¨®n mientras la Comunidad de Madrid ha recortado la superficie a proteger. En 2002 sus parlamentos decidieron iniciar la ordenaci¨®n de este espacio con el objetivo de convertirlo en parque nacional.
En Castilla y Le¨®n, el Plan de Ordenaci¨®n de los Recursos Naturales (PORN) sigue su curso, mientras que el de Madrid recibi¨®, hasta el pasado 26 de febrero, casi 18.000 alegaciones tras ser sometido a informaci¨®n p¨²blica.
Las 34.500 hect¨¢reas que en 2006 figuraban para formar el parque nacional se reducen a menos de 20.000
Las asociaciones ecologistas y algunos partidos de la oposici¨®n entienden que este plan resulta menos restrictivo que el de 2006 porque retira la m¨¢xima protecci¨®n (parque nacional) a 14.750 hect¨¢reas y ampl¨ªa la permisividad de usos a ciertos espacios de la mayor¨ªa de 37 municipios afectados. La mayor¨ªa de ellos mantienen bloqueada la tramitaci¨®n de planes parciales, cuyos informes sectoriales est¨¢n paralizados en la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenaci¨®n del Territorio a la espera de la aprobaci¨®n del PORN.
El Gobierno regional intenta alcanzar el mayor grado de consenso posible entre los proteccionistas y los deseos de crecimiento de los municipios. No obstante, su presidenta, Esperanza Aguirre, ya dej¨® ver sus intenciones hace un a?o cuando present¨® la segunda versi¨®n del plan. El primero fue aprobado por la Asamblea de Madrid pero no lleg¨® a ser refrendado por el Consejo de Gobierno para adaptarlo a la Ley estatal de Parques Nacionales y de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. Seg¨²n Aguirre, de acuerdo con los alcaldes, se hab¨ªa optado por reducir el espacio de m¨¢xima protecci¨®n para mantener los usos tradicionales (ganader¨ªa, monta?ismo o explotaciones madereras), porque son esos usos los que han preservado a lo largo de estos siglos estos parajes tal y como est¨¢n.
Las 34.500 hect¨¢reas que en 2006 gozaban de la m¨¢xima protecci¨®n para convertirse en parque nacional quedaban reducidas a menos de 20.000. El plan de ordenaci¨®n fue llevado al Consejo de Gobierno de la semana pasada por la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenaci¨®n del Territorio, Ana Isabel Mario, que aplaza su aprobaci¨®n unas semanas. "Aunque nunca va a llover a gusto de todos, creo que es un
buen plan. Los ayuntamientos est¨¢n contentos con ¨¦l", se?alaba la consejera. "Hay que pulirlo para introducir las alegaciones, algunas puntuales y otras de mayor calado", confirmaba Ignacio Gonz¨¢lez, vicepresidente y portavoz regional, en relaci¨®n con las 17.771 alegaciones estudiadas. A lo largo de este mes [quedan dos Consejos de Gobierno, el 19 y el 26 de noviembre] se aprobar¨¢ casi con total seguridad, han asegurado fuentes de la Consejer¨ªa.
Entre las novedades de este documento se encuentra una rectificaci¨®n de envergadura. Se trata de 7.625 hect¨¢reas de la Cerca Hist¨®rica de Felipe II que se hab¨ªan dejado fuera del ¨¢mbito del PORN en octubre de 2008 y que ahora se incluyen, tras una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid del pasado mes de marzo, tras desestimar el recurso interpuesto por la promotora Gesti¨®n y Desarrollo del Noroeste, confirmaba la declaraci¨®n como Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC) que de este sitio hist¨®rico hab¨ªa realizado la Comunidad en 2006. El Decreto del BIC recog¨ªa que la totalidad de la cerca deber¨ªa ser incluida en el plan.
Los ecologistas se congratulan de la inclusi¨®n total de la cerca dentro del plan -las restantes hect¨¢reas, hasta las 12.000 que forman el sitio hist¨®rico m¨¢s su entorno de protecci¨®n, ya estaban incluidas-, pero desconf¨ªan del corto recorrido de la medida. Al no acogerse a ninguna de protecci¨®n, a estos terrenos no se podr¨¢ aplicar ninguna normativa espec¨ªfica, asegura Mar¨ªa ?ngeles Nieto, portavoz de Ecologistas en Acci¨®n.
Est¨¢ por ver qu¨¦ va a pasar con el desarrollo del SAU II, un ¨¢mbito situado dentro de la cerca donde el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial tiene muy adelantada -falta por aprobar el proyecto de urbanizaci¨®n- la tramitaci¨®n para ejecutar un pol¨ªgono industrial- terciario. El alcalde de San Lorenzo, el popular Jos¨¦ Luis Fern¨¢ndez-Quejo, tiene claro que el SAU II seguir¨¢ adelante. "Este sector est¨¢ aprobado desde hace a?os y a m¨ª nadie me ha dicho que se vaya a paralizar", asegura. "No estoy en contra de que me tutelen, porque siempre cuatro ojos ven m¨¢s que dos, pero no me parece justo que se condene a dos municipios, como San Lorenzo y El Escorial. No tiene sentido que una tapia determine qu¨¦ queda o no protegido, cuando al otro lado existen parajes que tambi¨¦n deber¨ªan serlo y no lo son".
Los m¨¢s de 109.000 metros cuadrados ordenados ahora por el nuevo plan se distribuyen entre 37 municipios (14 de ellos en su integridad) en los que residen ya cerca de 140.000 personas de manera permanente y un n¨²mero similar en periodos vacacionales. De esa superficie, m¨¢s de 3.000 hect¨¢reas se reparten entre los suelos urbanos de 25 de las 37 localidades afectadas en los que existe margen para edificar m¨¢s de 2.000 viviendas. Otras 500 hect¨¢reas se encuentran clasificadas como urbanizables, con edificabilidad suficiente para otras 4.500 viviendas. Y habr¨¢ que ver en qu¨¦ quedan los avances de planeamiento presentados en los ¨²ltimos dos a?os.
Menos restricciones
Ecologistas en Acci¨®n ya ha anunciado que recurrir¨¢ en cuanto la Comunidad apruebe el PORN. Creen que no se ajusta a la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. Falta, por ejemplo, un inventario de fauna y flora, dice Mar¨ªa ?ngeles Nieto, portavoz de la asociaci¨®n.
Adem¨¢s, la normativa que se aplica reduce el actual grado de protecci¨®n que ya existe con los parques regionales de la Cuenca Alta del Manzanares y de Pe?alara, comenta. Seg¨²n Nieto, los espacios protegidos donde no se puede construir absolutamente nada se incluyen ahora como zonas de aprovechamiento ordenado de los recursos naturales. Casi 32.300 hect¨¢reas en las que, por "motivos de desarrollo socioecon¨®mico", se permitir¨¢ la construcci¨®n de un hotel, casa rural o lo que sea en zonas de El Boalo o Becerril de la Sierra. Incluso, hasta viviendas unifamiliares aisladas sin v¨ªnculo alguno a explotaciones agropecuarias, argumenta Nieto.
Aunque deja la puerta abierta a la declaraci¨®n de parque nacional para la cara norte de Guadarrama, el Gobierno de Castilla y Le¨®n ha preferido ordenar su ¨¢mbito geogr¨¢fico bajo una figura de protecci¨®n menor, la de parque natural con una superficie de 83.260 hect¨¢reas. Su PORN ha superado la fase de audiencia a entidades locales. El documento resultante deber ser informado por el Consejo de Urbanismo de Castilla y Le¨®n, primero, y por el Consejo Regional de Espacios Naturales.
El 84% del futuro parque natural (70.000 hect¨¢reas) quedar¨¢ como zona de uso limitado, con ¨¢reas de notable riqueza, ecol¨®gica y paisaj¨ªstica, usos forestales, ganaderos y cineg¨¦ticos y, para su gesti¨®n, puede requerir de cierta intervenci¨®n humana. Una zona de uso compatible (13.000 hect¨¢reas), con predominio de pastos y cultivos agr¨ªcolas. M¨¢sde 500 hect¨¢reas son de uso general, las ocupadas por los n¨²cleos urbanos o urbanizables, y otras 66 hect¨¢reas como zona de ordenaci¨®n especial
en torno a la estaci¨®n de esqu¨ª de Navacerrada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.