Zapatero se somete al examen del poder financiero de Wall Street
El presidente traslada a los grandes inversores su "firme determinaci¨®n" de completar los ajustes y reformas estructurales
"Para el Gobierno de Espa?a esta ha sido una etapa de adoptar decisiones dif¨ªciles y complicadas para que los mercados valoren la firme determinaci¨®n de hacer que la econom¨ªa espa?ola sea competitiva y vuelva a permitir crear empleo". Como en un examen, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero se present¨® ayer en Nueva York ante los ejecutivos de los principales bancos de negocios y fondos de inversi¨®n de EE UU, responsables de algunos de los ataques especulativos que en mayo y junio pasados llevaron a la deuda espa?ola al borde del abismo y le obligaron a dar un giro radical a su pol¨ªtica econ¨®mica. Pocas horas despu¨¦s cambi¨® de escenario y acudi¨® a la Universidad de Columbia, de larga tradici¨®n progresista, donde defendi¨® la imposici¨®n de una tasa sobre las transacciones financieras internacionales y la regulaci¨®n de los mercados porque, aleg¨®, "abandonados a su suerte pueden representar una seria amenaza para los intereses generales".
Por la ma?ana, en la residencia del embajador espa?ol ante la ONU, Zapatero comparti¨® desayuno con algunos de los m¨¢s reputados tiburones financieros de Wall Street: George Soros; John Paulson; David Solomon, de Goldman Sachs; John Havens, consejero delegado de Citigroup; Laurence Fink, de Blackrock; Charles Lowrey, de Prudential; Edward Pick, de Morgan Stanley; Ray Dalio, de Bridgewater; Mike Zarkone, de Metlife; Alex Navab, de KKR; Sanjeev Handa, de TIAA Cref, y James Valone, de Wellington Management. La convocatoria fue un ¨¦xito: solo falt¨® el vicepresidente de Travelers, sustituido por un miembro de su equipo.
Este selecto grupo fue escogido por el Tesoro espa?ol para escuchar de labios del presidente su prop¨®sito de enmienda de una pol¨ªtica expansiva que todav¨ªa defiende la Administraci¨®n Obama. Zapatero solo desliz¨® un velado reproche a sus invitados cuando les record¨® que el endeudamiento de su Gobierno lo caus¨® la necesidad de contrarrestar los efectos de la crisis financiera originada en 2008 en EE UU.
"Ese proceso de est¨ªmulos fiscales se ha terminado y hemos emprendido un ambicioso plan de reducci¨®n del d¨¦ficit", les dijo Zapatero al arranque de una reuni¨®n que se desarroll¨® durante dos horas a puerta cerrada y en la que estuvo acompa?ado por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos; el secretario general de la Presidencia, Bernardino Le¨®n, y el director de la Oficina Econ¨®mica de Moncloa, Javier Vall¨¦s.
El presidente desgran¨® las medidas de ajuste y las reformas estructurales adoptadas por el Gobierno: la reducci¨®n del 5% en los salarios p¨²blicos, "que no ha sido f¨¢cil", la reforma laboral, el recorte de las inversiones, la congelaci¨®n de las pensiones y, a medio plazo, la reforma del sistema de pensiones para prolongar la edad de jubilaci¨®n y garantizar la sostenibilidad del sistema.
Zapatero subray¨® que la deuda espa?ola (parte de ella en manos de fondos gestionados por algunos de los asistentes) est¨¢ 20 puntos por debajo de la media de la UE, pero reconoci¨® que el d¨¦ficit p¨²blico alcanz¨® en 2009 "una cifra muy alta", m¨¢s del 11% del PIB, que se comprometi¨® a reducir al 3% en 2013. Un cambio que solo se lograr¨¢, subray¨®, con una "mayor disciplina" y abordando los desequilibrios acumulados durante los ¨²ltimos 15 a?os.
En el turno de preguntas, seg¨²n fuentes de Moncloa, sus invitados le preguntaron por el plan de infraestructuras, basado en la colaboraci¨®n p¨²blico-privada, y por el proyecto de privatizaci¨®n de aeropuertos. El alcance de la reforma laboral, la compra de deuda por parte de China o la penetraci¨®n de las empresas espa?olas en Latinoam¨¦rica tambi¨¦n salieron en el coloquio. Las mayores cr¨ªticas se dirigieron a la decisi¨®n del Gobierno de revisar las ayudas al sector de la energ¨ªa solar fotovoltaica, donde tienen intereses firmas estadounidenses. Zapatero replic¨® que se trata de racionalizar las primas para "evitar excesos" y que el proceso, a punto de cerrarse, se ha hecho "en di¨¢logo con las empresas".
"El presidente ha hecho los deberes, ha sido exhaustivo en sus explicaciones y no ha dejado ninguna pregunta sin contestar", resum¨ªan satisfechas fuentes de Moncloa, que calificaron el debate de "vivo", aunque hubo que recurrir a la traducci¨®n simult¨¢nea. "Una agradable charla", coment¨® a la salida Soros mientras algunos inversores se quedaban departiendo con Zapatero.
M¨¢s incisivos fueron los estudiantes de Columbia, que le recordaron su antigua afirmaci¨®n de que bajar impuestos es progresista. "El debate sobre la imposici¨®n fiscal no tiene color ideol¨®gico, la veo como un instrumento para un fin. Subir la presi¨®n fiscal puede ser progresista; bajarla, tambi¨¦n. No tengo una visi¨®n dogm¨¢tica. Si algo ense?a la crisis es que las posiciones fundamentalistas normalmente conducen al fracaso", respondi¨® antes de completar su jornada en Nueva York con una reuni¨®n con Paul Volcker, asesor de Obama, y un encuentro con el consejo editorial del Wall Street Journal, uno de los diarios m¨¢s cr¨ªticos con su gesti¨®n.
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