El tr¨¢fico de datos fiscales fuerza a los evasores alemanes a entregarse
Los defraudadores buscan un trato de favor ante el temor de aparecer en listas negras
La evasi¨®n fiscal en Alemania sigue estando considerada en los c¨ªrculos de los millonarios como un delito de caballeros,amparado durante d¨¦cadas por el inexpugnable secreto bancario de Suiza y la complicidad del ducado de Lichtenstein. Pero este para¨ªso de impunidad lleg¨® a su fin cuando naci¨® un exclusivo mercado negro de CD y DVD llenos de datos de evasores fiscales. Unos dispositivos que alimentan altos funcionarios de la banca suiza y del ducado, y cuyos compradores son los ¨¢vidos responsables de Finanzas de los Estados federados germanos, a la caza de infractores, que, ante el temor de aparecer en una de esas listas negras, se entregan y buscan un trato m¨¢s favorable.
El presidente de la Deutsche Post, Klaus Zumwinkel recibi¨® el 14 de febrero de 2008 la visita, casi de madrugada, de agentes de la fiscal¨ªa de Bochum, que ten¨ªan entre sus manos una denuncia de evasi¨®n fiscal. El empresario fue condenado, un a?o despu¨¦s, a pagar una multa de un mill¨®n de euros. El Ministerio de Finanzas del Estado alem¨¢n de Renania del Norte Westfalia hab¨ªa comprado un CD que conten¨ªa los nombres de cientos de evasores fiscales alemanes, entre ellos, el del ahora expresidente de la Deutsche Post.
El Julius Baer reconoce que le han vuelto a robar datos de clientes germanos?
Y en los ¨²ltimos cuatro a?os la venta de CD copiados en los ordenadores de la banca suiza ha florecido con una rapidez que tiene en estado de alerta a varios miles de millonarios germanos, y en un estado de euforia casi permanente a los funcionarios que se encargan de gestionar el dinero que llega a las arcas oficiales. Hace algunas semanas, el Gobierno de Renania del Norte Westfalia pag¨® nueve millones de euros por otros cuatro CD confeccionados en Suiza. Despu¨¦s de analizar el contenido, los compradores calificaron los datos como ¡°altamente interesantes¡±, aunque de momento no han dado m¨¢s detalles. La compra, sin embargo, convenci¨® a varias decenas de evasores fiscales a acudir a las autoridades de Hacienda para obtener un trato favorable que hace posible la autoinculpaci¨®n, que se salda con multas m¨¢s bajas.
El mercado negro del CD podr¨ªa arruinar el acuerdo fiscal alem¨¢n con Suiza
Ayer mismo, el consejero delegado del banco privado helv¨¦tico Julius Baer, Boris Collardi, confirm¨® al diario de Z¨²rich SonntagsZeitungque le han vuelto a robar datos de clientes alemanes. "En el marco de un control profundo y despu¨¦s de una investigaci¨®n interna hemos descubierto recientemente un caso de uso abusivo de datos y hemos podido identificar al presunto autor de ese robo", afirm¨® Collardi. Seg¨²n el rotativo, los datos robados han sido adquiridos por el estado federado de Renania del Norte-Westfalia y el responsable del robo habr¨ªa cobrado una suma no especificada tras entregarlos.
En las dos primeras semanas de agosto se autodenunciaron 117 evasores fiscales en el Estado de Baden-W¨¹rtemberg; otros 61 hicieron lo mismo en Berl¨ªn; y entre los d¨ªas 5 de julio y 2 de agosto, 93 millonarios pidieron el perd¨®n oficial en Renania del Norte Westfalia, Seg¨²n datos recopilados por el peri¨®dico Financial Times Deutschland. Seg¨²n el ministro de Finanzas de Renania del Norte Westfalia, Norbert Walter-Borjans, solo en su Estado se han recaudado, gracias el interesado mea culpa de los evasores fiscales, unos 2.000 millones de euros. Y ese land tambi¨¦n obtuvo entre 300 y 500 millones de euros gracias a las informaciones proporcionadas por los famosos CD.
Sin embargo, el mercado negro de datos tiene un riesgo: est¨¢ a punto de arruinar la ardua tarea del ministro federal de Finanzas alem¨¢n, Wolfgang Sch?uble, que trata de luchar contra el fraude fiscal por v¨ªas m¨¢s convencionales. Logr¨® firmar un acuerdo con Suiza, destinado a impedir el fraude a trav¨¦s de cuentas secretas. Mediante el acuerdo, cada banco suizo que tenga cuentas de ciudadanos alemanes pagar¨¢ al fisco alem¨¢n impuestos por los capitales, tanto nuevos como antiguos, con tasas de entre el 21% y el 41%.
Sin embargo, los partidos de oposici¨®n denunciaron que el acuerdo era una pantalla que ofrec¨ªa impunidad a los evasores fiscales y anunciaron que no ratificar¨¢n la medida en el seno del Consejo Federal, donde tienen mayor¨ªa. Adem¨¢s, la jefa de Gobierno de Renania del Norte Westfalia, Hannelore Kraft y su ministro de Finanzas, Norbert-Walter Borjans, desafiaron al Gobierno federal y anunciaron que seguir¨¢n adquiriendo los famosos CD, sin importarles que la medida termine de enterrar el acuerdo entre Suiza y Alemania.
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