Linde atar¨¢ en corto a los consejos

Tras la sequ¨ªa, inundaci¨®n. El Banco de Espa?a ha decidido incrementar los controles en la gobernanza de los bancos hasta l¨ªmites casi intervencionistas. Tras el descontrol vivido en buena parte de las cajas de ahorros, el supervisor no quiere que se vuelvan a repetir casos tan lamentables como que el presidente de la cuarta caja, la CAM, fuera el propietario de un concesionario de coches en cuya comisi¨®n de control se sentaba una profesora de ballet.

El supervisor quiere que su capacidad de fiscalizar la vida de los consejos de administraci¨®n llegue muy lejos. Seg¨²n el documento de ¡°An¨¢lisis de los procedimientos supervisores del Banco de Espa?a¡±, conocido el martes tras las acusaciones de arbitrariedad de la Asociaci¨®n de Inspectores, el organismo dirigido por Luis Linde ha decidido establecer un procedimiento espec¨ªfico para la revisi¨®n de la gobernanza de las entidades con una amplia bater¨ªa de medidas. Este informe, realizado por el consejero ?ngel Luis L¨®pez Roa, ha sido respaldado por la Comisi¨®n Ejecutiva en su totalidad.

Entre las medidas se incluye que se puedan ¡°mantener reuniones peri¨®dicas con los consejeros y miembros clave de las comisiones delegadas; comprobar que los escritos de recomendaciones y requerimientos del Banco de Espa?a llegan a los consejeros¡±, as¨ª como ¡°instar a que en las actas del consejo figuren las opiniones discrepantes¡±. El supervisor adem¨¢s tendr¨¢ acceso a ¡°la informaci¨®n que se facilita a los consejeros y miembros de las comisiones delegadas del consejo¡±.

Pero el control va m¨¢s lejos. El informe dice que entre las tareas de la instituci¨®n estar¨¢ ¡°se?alar ubicaciones inadecuadas en el organigrama¡±, lo que sugiere una capacidad de opinar sobre la adecuaci¨®n profesional de los altos cargos de la entidad o componentes de comisiones. Linde pretende tambi¨¦n vigilar el cumplimiento de las recomendaciones de gobierno corporativo, ¡°revisar las actuaciones de la auditor¨ªa interna¡± y ¡°conocer trimestralmente las deficiencias puestas de manifiesto por la auditor¨ªa interna¡±.

Adem¨¢s de este conjunto de medidas, el Banco de Espa?a ha establecido que las carteras de todas las entidades ser¨¢n revisadas al menos cada tres a?os. Por otro lado, las 16 entidades ¡°m¨¢s significativas¡± tendr¨¢n inspectores empotrados para conocer las cuentas de primera mano. Este trabajo tiene el riesgo del secuestro del inspector, es decir, que los funcionarios terminen por identificarse demasiado con la entidad que supervisan y bajen la guardia. Para evitarlo, el Banco de Espa?a ha establecido ¡°un procedimiento de rotaci¨®n de la plantilla, incluida la jefatura¡±, con ¡°un l¨ªmite m¨¢ximo de seis a?os en la misma entidad y de diez a?os en el mismo departamento, con un periodo posterior de separaci¨®n obligatoria de cuatro a?os¡±.

Todas estas labores exigir¨¢n m¨¢s personal. Actualmente la plantilla de inspectores se sit¨²a cerca de los 400 empleados. El documento admite que deber¨¢ ¡°realizar un estudio de las necesidades de plantilla en la Direcci¨®n General de Supervisi¨®n, en funci¨®n de los previsibles trabajos a realizar en el futuro y de los objetivos que se pretendan cubrir¡±.

El supervisor quiere aplicar todos los cambios a lo largo de este ejercicio

El papel de los auditores tambi¨¦n ha sido pol¨¦mico en esta crisis, cuestionados por sus informes sin salvedades en entidades que poco despu¨¦s tuvieron grandes problemas. El informe del Banco de Espa?a se muestra a favor de la rotaci¨®n peri¨®dica de la firma auditora, ¡°para fomentar su independencia, haciendo frente a los potenciales riesgos de familiaridad y captura por la entidad auditada¡±. La normativa europea en tramitaci¨®n recoge esa rotaci¨®n, pero si se modificase o dilatase, el supervisor podr¨ªa plantearla por su cuenta, lo que ser¨ªa un duro golpe para Deloitte, hegem¨®nico en el sector.

No obstante, todas estas reformas deber¨¢n enmarcarse en el cambio que vive Europa de la supervisi¨®n de las entidades, en la que el protagonista ser¨¢ del BCE. Los procedimientos del Banco de Espa?a tendr¨¢n que adaptarse en el futuro a esta nueva situaci¨®n, advierte el documento.

Linde pretende implantar ¡°cuanto antes y de forma paulatina¡± todos estos cambios, incluido destinar los inspectores empotrados, seg¨²n fuentes financieras. Los documentos de los funcionarios ser¨¢n entregados a las entidades inspeccionadas y recoger¨¢n las discrepancias que pueda haber entre el equipo de inspectores. Esta era una de las reivindicaciones de los inspectores, que se han recogido en el informe.