La filial de Abertis y Aena pide "definiciones" sobre su concesi¨®n en Bolivia

La filial boliviana de las firmas espa?olas Abertis y Aena, Sabsa, pidi¨® hoy al Gobierno de Evo Morales "definiciones" sobre la continuidad o no de su concesi¨®n para administrar los tres principales aeropuertos del pa¨ªs, a la vez que sindicatos y sectores afines al Ejecutivo piden su expropiaci¨®n.

En una entrevista con Efe, el gerente de la compa?¨ªa Servicios de Aeropuertos Bolivianos S.A. (Sabsa), Anthony Alicastro, dijo que lo que quieren "son definiciones".

"Si la definici¨®n es la permanencia, queremos r¨¢pidamente terminar el trabajo que se ha empezado para negociar una adenda al contrato y establecer las nuevas reglas del juego para los siguientes nueve a?os", se?al¨®.

Sostuvo que si, por el contrario, la empresa va a ser nacionalizada o la concesi¨®n revocada, lo que piden "es que se haga dentro de un marco de legalidad, de justa compensaci¨®n".

Sabsa gestiona desde 1997 los aeropuertos m¨¢s grandes de Bolivia, situados en las ciudades de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.

Esta compa?¨ªa perteneci¨® desde 1997 a 1999 a la estadounidense Airport Group International, hasta que pas¨® a la brit¨¢nica TBI.

En 2004, la empresa de infraestructuras Abertis y el ente p¨²blico aeroportuario espa?ol Aena adquirieron TBI con todo el paquete de aeropuertos que administraba, incluidos los tres de Bolivia.

Seg¨²n Alicastro, los aeropuertos fueron entregados en concesi¨®n por 25 a?os a la empresa privada porque eran deficitarios.

Desde entonces y hasta la fecha, hay "tres grandes cifras" que el gerente menciona para respaldar que el d¨¦ficit ha sido revertido.

La primera es la inversi¨®n de Sabsa en Bolivia, que desde 1997 a la fecha asciende a 33,6 millones de d¨®lares y la segunda son los 73 millones de d¨®lares que la compa?¨ªa ha abonado al Estado en el mismo periodo por los derechos de operaci¨®n de los aeropuertos.

La tercera cifra es el cr¨¦dito solicitado por Bolivia en 1997 al Gobierno italiano para la Fase II de la construcci¨®n del aeropuerto Jorge Wilstermann, en Cochabamba, que fue asumido y pagado enteramente por Sabsa.

En una carta enviada a finales de enero al ministro boliviano de Obras P¨²blicas, Vladimir S¨¢nchez, Alicastro le inform¨® de que la empresa termin¨® de pagar ese mes la deuda, que ascendi¨® a 11,9 millones de euros "entre capital e intereses".

El ejecutivo sostuvo que las inversiones de Sabsa habr¨ªan sido mayores si las tarifas aeroportuarias no estuvieran congeladas desde 2001, pese a que el contrato de concesi¨®n prev¨¦ realizar ajustes consensuados en funci¨®n de la inflaci¨®n.

"Se necesita reencaminar econ¨®micamente la concesi¨®n, no se pueden realizar las obras que necesitan los aeropuertos con tarifas que datan del 2001, les hemos dicho que es imposible", manifest¨®.

A?adi¨® que "no solamente las tarifas han perdido valor por el pasar de los a?os y la inflaci¨®n", sino que tambi¨¦n "los costos operativos de Sabsa han subido much¨ªsimo", sobre todo en recursos humanos, a causa de los incrementos salariales obligatorios decretados por el Gobierno cada a?o.

Seg¨²n Alicastro, esa es la principal dificultad que afronta la empresa y ha sido motivo de varias reuniones con las autoridades bolivianas durante el 2012.

En esos encuentros se plantearon soluciones para que Sabsa contin¨²e gestionando los aeropuertos durante los nueve a?os de concesi¨®n que le quedan, periodo en el que la firma propone invertir 36 millones de d¨®lares sin pedir dinero al Estado.

"Hemos avanzado en un entendimiento tentativo sobre inversiones y tarifas, quedando unos temas menores y la redacci¨®n de una adenda, pero lastimosamente hace m¨¢s de tres meses que no hay contacto con el Gobierno no obstante de numerosos pedidos nuestros para seguir adelante", asegur¨®.

Alicastro remarc¨® que el Gobierno boliviano "siempre ha sido claro" en se?alar que la nacionalizaci¨®n es una de las opciones que analiza, pero defendi¨® que la mejor opci¨®n ser¨ªa mantener la concesi¨®n a Sabsa, "siempre y cuando se pueda restablecer el equilibrio econ¨®mico" de la misma.