La abundancia de caza dispara las reclamaciones por da?os en la agricultura

La actual abundancia de caza menor (liebres y conejos) y de caza mayor ha disparado las reclamaciones por da?os en la agricultura, cuya responsabilidad recae hoy exclusivamente en el propietario del coto de caza, aunque carezca de un control real de las especies y ha hecho lo que est¨¢ en su mano por evitarlo.

En una entrevista con Efe el abogado Santiago Ballesteros y autor de "Responsabilidades en materia de caza" -que acaba de editar la Federaci¨®n Espa?ola de Caza- opina que existe adem¨¢s una situaci¨®n de "inseguridad jur¨ªdica" por la ausencia de un pronunciamiento del Tribunal Supremo sobre este tema y, en consecuencia, "cada una de las 50 audiencias provinciales dice una cosa".

"Esto hace cada d¨ªa m¨¢s dif¨ªcil asumir la gesti¨®n de un coto", ha a?adido Ballesteros, en cuya opini¨®n su titular solo debe responder de los da?os de aquellas piezas de caza sobre las que tiene una posibilidad real de control y de limitaci¨®n de sus poblaciones.

Se impone, por tanto, una regulaci¨®n estatal y nueva sobre el tema que ataje "la disparidad" de criterios en los tribunales y en las comunidades aut¨®nomas.

La comunidad aut¨®noma m¨¢s afectada por siniestros en los cultivos, en la ganader¨ªa y las reforestaciones son las de Castilla y Le¨®n y Castilla-La Mancha, y en cuanto a n¨²mero de da?os es Arag¨®n.

La regi¨®n menos afectada es Galicia, al haber menos cultivos asegurados y tambi¨¦n porque la Administraci¨®n tiene establecida una l¨ªnea de ayudas dirigida a los agricultores que sufren da?os de jabal¨ª y lobo.

Hace un a?o, las reclamaciones por da?os causados por la fauna cineg¨¦tica rozaron las 5.000, pero es una cifra parcial ya que incluye solo a agricultores con p¨®liza en la compa?¨ªa Agroseguro.

"Se trata -seg¨²n el abogado- de un n¨²mero dif¨ªcil de cuantificar, pero incluso hay cotos que han amenazado con dejar de gestionarse" y han invitado a cazar a los agricultores.

El autor de "Responsabilidades en materia de caza", una gu¨ªa pr¨¢ctica alejada de los libros de derecho al uso, el mayor n¨²mero de da?os en la agricultura (sobre todo cultivos le?osos como la vid y el olivo) se debe tanto a un aumento de la poblaci¨®n de conejos y liebres como al hecho de que se est¨¦ viviendo "la edad dorada" de la caza mayor en Espa?a.

"Nunca antes ha habido tantas reses como ahora; se capturan cada a?o 350.000 ciervos, jabal¨ªes, corzas etc¨¦tera, entre otras razones por el abandono de los cultivos, el aumento de la superficie forestal y una presi¨®n cineg¨¦tica que deber¨ªa ser mayor".

A su juicio, habr¨ªa que evolucionar del actual sistema de responsabilidad objetiva -siempre corresponde al propietario del coto- "a un sistema de responsabilidad por culpa".

Por otro lado, la inclusi¨®n de los da?os provocados por la fauna silvestre como un riesgo m¨¢s en los seguros agrarios -hasta el 2008 solo cubr¨ªan da?os por heladas, pedrisco, sequ¨ªa etc, ha tenido como consecuencia el aumento del n¨²mero de reclamaciones y la sistematizaci¨®n y automatizaci¨®n de las mismas, seg¨²n Ballesteros.

En cuanto a la responsabilidad en los accidentes de caza, el libro alude a su incremento en los ¨²ltimos a?os, entre otras razones por "la explosi¨®n" de la caza mayor, lo que ha implicado un mayor n¨²mero de aficionados y a personas con poca experiencia.

Entre los a?os 2000 y 2011, han muerto en Espa?a setenta personas y casi 5.000 han sufrido lesiones de distinta consideraci¨®n.