El ladrillo acelera su ca¨ªda libre

Para levantar el macrocasino que Sheldon Adelson, el rey del juego, proyecta en Alcorc¨®n se crear¨¢n, en la fase inicial, 40.000 empleos directos y 80.000 indirectos, en principio, muchos dedicados a la construcci¨®n del complejo. Pero har¨ªan falta m¨¢s de 20 Eurovegas para que el ladrillo espa?ol pudiera volver a su apogeo. Desde comienzos de 2008, cuando estall¨® la crisis, se han destruido casi 2,5 millones de puestos de trabajo en la construcci¨®n y ramas de actividad afines, como ferralla, muebles, cemento, arquitectura y comercio inmobiliario.

Nunca la construcci¨®n hab¨ªa ca¨ªdo tan r¨¢pido y desde tan alto. Justo antes del desplome, el sector empleaba a 2,7 millones, un 13% de todos los ocupados. Cinco a?os despu¨¦s, con los datos de la ¨²ltima encuesta de poblaci¨®n activa (EPA), a finales del a?o pasado el ladrillo apenas daba trabajo a poco m¨¢s de un mill¨®n de personas, un 6,3% del total, un porcentaje que supera con mucho el m¨ªnimo marcado en las otras grandes crisis anteriores (el anterior, en 1985, v¨¦ase gr¨¢fico). El hundimiento sigue, aunque el profesor Josep Oliver comienza a ver su final: ¡°Creo que ya est¨¢ acabando. Es cierto que se ha sumado el ajuste de la obra p¨²blica, pero es la que usa mano de obra de forma menos intensiva¡±.

Antes del desplome, el sector daba trabajo a m¨¢s del 13%; ahora, al 6,3%

De la ca¨ªda de la inversi¨®n en infraestructuras hablan los datos de Seopan, que agrupa a las grandes empresas del sector. La licitaci¨®n p¨²blica ha pasado del pico de 46.690 millones de euros de 2006 a apenas 7.370 millones el a?o pasado. El primer a?o negro fue 2010. ¡°Desde el inicio de la crisis en la inversi¨®n p¨²blica espa?ola, en enero de 2010, el a?o pasado fue el ejercicio de mayor ajuste con una reducci¨®n anual de la inversi¨®n p¨²blica del 36%¡±, explica Juli¨¢n N¨²?ez, presidente de Seopan. ¡°En teor¨ªa, los ajustes anuales de inversi¨®n programados para 2013 y 2014 son inferiores (del -6% y el -12%, respectivamente), y nuevamente en teor¨ªa se podr¨ªa afirmar que lo peor ha pasado¡±, considera N¨²?ez, que advierte sin embargo de que el inicio presupuestario en 2013 ¡°anticipa unas cifras de ejecuci¨®n de inversi¨®n significativamente inferiores a lo previsto¡±.

Apoyado en esto, Juan Carlos Barrero, responsable del sector en MCA-UGT, tiene una visi¨®n muy pesimista: ¡°No le veo un final. No hay obra, el Ministerio de Fomento est¨¢ desaparecido. Sobre todo desde 2010¡±. La afirmaci¨®n de Barrero se aprecia en los detalles de la EPA, en la que se ve c¨®mo los trabajadores dedicados a la construcci¨®n de edificios, sobre todo de viviendas, sufrieron la mayor parte de la sangr¨ªa hasta 2010 (750.000 empleos perdidos de un total de un mill¨®n), mientras que en la obra p¨²blica el golpe m¨¢s duro lleg¨® despu¨¦s (260.000 de medio mill¨®n).

No solo se ha hundido la inversi¨®n en nuevas infraestructuras. El n¨²mero de viviendas iniciadas ha pasado de las m¨¢s de 600.000 anuales de los buenos a?os (2004, 2005, 2006¡­) a las poco m¨¢s de 50.000 de 2011 o las menos de 20.000 que se empezaron a construir hasta junio de 2012, seg¨²n el Ministerio de Fomento.

La licitaci¨®n p¨²blica se ha reducido de 46.690 a 7.370 millones desde 2006

Pero de aquellos bosques de gr¨²as emergieron muchas viviendas que todav¨ªa no se han vendido (676.000 pisos nuevos) y que, junto con la falta de cr¨¦dito, frenan las nuevas promociones. El catedr¨¢tico Oliver reconoce que de forma agregada s¨ª que existe ese sobrante, pero matiza: ¡°Hay stock en el Mediterr¨¢neo¡±. Seg¨²n los c¨¢lculos de MCA-UGT, m¨¢s del 50% se sit¨²a en esta costa. La lectura de estos apuntes ser¨ªa que la demanda en otras zonas y en grandes ciudades existe y emerger¨¢ en cuanto los bancos vuelvan a conceder pr¨¦stamos.

A esta tesis se apunta la patronal mayoritaria del sector, la CNC: ¡°El stock est¨¢ en zonas malas y ser¨¢ dif¨ªcil venderlo en mucho tiempo. Pero hay demanda. En el norte existe. Lo que pasa es que est¨¢ dormida, porque no hay financiaci¨®n. Hay promociones construidas que no se venden porque no se conceden las subrogaciones de hipotecas¡±.

A pesar de estos an¨¢lisis, que buscan huir de la desolaci¨®n, si se presta atenci¨®n al or¨¢culo del sector ¡ªel cemento, considerado un indicador adelantado de la actividad econ¨®mica¡ª la crisis va para largo. El a?o pasado el consumo de este material registr¨® la mayor ca¨ªda desde 1936 por la crisis, un 34%, hasta los 13,5 millones de toneladas, frente a los 55 millones que se llegaron a consumir en un ejercicio a mediados de la d¨¦cada pasada. ¡°A fecha de hoy solo un 40% de la capacidad instalada est¨¢ operativa y, a la vista de la demanda esperable en la construcci¨®n p¨²blica y privada, es dif¨ªcil que pueda mantenerse la capacidad instalada de la industria en nuestro pa¨ªs¡±, afirma Aniceto Zaragoza, director general de la patronal Oficemen.

Las viviendas iniciadas han pasado de 600.000 a 50.000 al a?o

Desde que estall¨® la crisis, el sector ha perdido m¨¢s de 2.000 puestos de trabajo (de 7.700 trabajadores en 2007 a los 5.000 actuales). Las regulaciones de empleo han llegado a firmas como Holcim o Portland.

Los constructores piden m¨¢s inversi¨®n p¨²blica para frenar la sangr¨ªa de parados. ¡°En las actuales circunstancias el empleo no lo puede crear el sector privado y tiene que ser la Administraci¨®n p¨²blica quien lo haga¡±, asegura Jaime Lamo de Espinosa, presidente de ANCI, que agrupa a las constructoras de tama?o mediano. Esta asociaci¨®n propone que se apruebe un cr¨¦dito extraordinario de 6.000 o 7.000 millones de euros para que el impacto sobre el empleo se note en el cuarto trimestre del a?o. Un 20% del dinero deber¨ªa ir a reactivar obras paralizadas. ¡°Seg¨²n nuestros c¨¢lculos, si se invierte en infraestructuras, de transporte o hidr¨¢ulicas, un mill¨®n de euros implica la creaci¨®n de entre 18 y 32 puestos de trabajo con un retorno fiscal (menos subsidios, m¨¢s cotizaciones a la Seguridad Social, m¨¢s consumo y m¨¢s IVA) del 50%-60% de lo invertido, es decir, reducci¨®n de parados¡±, a?ade Lamo de Espinosa.

Para Seopan, hay dos elementos clave. Primero que se cumplan las previsiones presupuestarias y, segundo, los plazos de pago por parte de las Administraciones p¨²blicas. ¡°Resuelto lo anterior, la obligaci¨®n m¨¢s inmediata y f¨¢cil para impulsar el sector de la obra civil ser¨ªa contraer presupuesto en lugar de detraerlo sistem¨¢ticamente¡±, se?ala Juli¨¢n N¨²?ez. ¡°A modo de ejemplo, la cartera oficial de inversi¨®n plurianual pendiente de ejecutar supera con creces los 30.000 millones de euros; si se anticipase la ejecuci¨®n de un tercio de la cartera en un ejercicio se crear¨ªan 180.000 puestos de trabajo, con un retorno fiscal para la hacienda p¨²blica de 6.200 millones¡±, remata.

El consumo de cemento registr¨® en 2012 la mayor ca¨ªda desde 1936

¡°El presidente del Gobierno tiene que coger el toro por los cuernos. Todo el mundo se queja del Plan E, pero fren¨® algo la ca¨ªda. Ahora nada. Si se compara con el esfuerzo que se hace en otros sectores, para salvar 2.000 o 3.000 empleos¡±, lamentan en la CNC. Dejando al lado el sector p¨²blico, esta patronal, en primer lugar, tira de manual cuando apunta hacia el futuro, ¡°reforma y rehabilitaci¨®n¡±, pero tambi¨¦n exige luchar contra la econom¨ªa sumergida para garantizar la supervivencia del sector.

Tambi¨¦n los sindicatos ven futuro en la reforma. Y en esa direcci¨®n apunta el plan de vivienda que se ultima en el Ministerio de Fomento, que hablar¨¢ mucho de rehabilitaci¨®n y poco de construcci¨®n. Pero es el ¨²nico guante que parece estar dispuesto a recoger el Gobierno, que parece querer m¨¢s recortes de inversiones y no adelantarlas. Estas intenciones se ven en el futuro plan de infraestructuras, el llamado PITVI, que supone una ca¨ªda muy importante de las inversiones. En total, el nuevo plan, que estar¨¢ en vigor hasta 2024, prev¨¦ una inversi¨®n de 136.627 millones, un 0,8% del PIB. En los mejores a?os del boom (2006-2008), la inversi¨®n lleg¨® al 4% del PIB, seg¨²n fuentes del sector. En la d¨¦cada previa a la crisis la media rond¨® el 2%.