Crece la brecha entre el norte y el sur

La Espa?a del norte se aleja de la del sur. La recesi¨®n y, esencialmente, los estragos del derrumbe inmobiliario han dilapidado parte de los logros de convergencia entre comunidades aut¨®nomas en materia de renta que se hab¨ªan alcanzado desde 2000. Vuelve a crecer la vieja brecha entre las regiones ricas y pobres, otro legado t¨®xico de esta interminable crisis que alcanz¨® en 2012 su punto m¨¢s agudo. La Europa de las dos velocidades tiene un reflejo muy claro cuando se acerca el foco a Espa?a: Pa¨ªs Vasco, Madrid, Navarra y Catalu?a han mejorado su posici¨®n con respecto a la media en PIB por habitante entre 2008 y 2012, mientras que, en el otro polo, Extremadura, Andaluc¨ªa, Castilla-La Mancha y Murcia han perdido posiciones.

Apenas hay comparaci¨®n que no resulte odiosa: entre la Espa?a que exporta y la que no, entre la que pierde poblaci¨®n y la que la gana, entre la que se confi¨® al ladrillo como motor de crecimiento y la que contaba con sostenes alternativos. Tambi¨¦n el paro parte al pa¨ªs en dos, con tasas que van desde el 16% de la poblaci¨®n activa para los vascos a casi el 36% para los andaluces, si bien el nivel del total nacional, superior al 26%, ya resulta dram¨¢tico.

Pero antes de aflorar en las estad¨ªsticas, muchas tendencias econ¨®micas se abren paso en la cesta de la compra, en los restaurantes, en los centros comerciales. El director financiero del grupo Carrefour, Pierre-Jean Sivignon, puso de manifiesto c¨®mo los resultados de su grupo en Espa?a ¡ªun buen bar¨®metro de lo que ocurre con la econom¨ªa¡ª radiografiaban un pa¨ªs m¨¢s desigual en poder de compra. La ca¨ªda del consumo impact¨® en la empresa. ¡°Esto es especialmente cierto en la parte sur del pa¨ªs, donde la ca¨ªda en el poder de compra ha sido especialmente marcada¡±, explic¨® en la conferencia con analistas del grupo. ¡°Un pa¨ªs de dos niveles¡±, recalc¨®. La Europa de dos niveles, entre los pa¨ªses del norte y los del sur, tambi¨¦n se ve¨ªa reflejada en ese balance.

Aumenta la diferencia entre el PIB por habitante de las regiones

Los ¨²ltimos datos del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) han confirmado esas se?ales. El mayor nivel de PIB por habitante de Espa?a, el del Pa¨ªs Vasco, se situaba 29,7 puntos por encima de la media nacional (129,7 sobre 100) en 2008, mientras que la peor situada, Extremadura, quedaba 31 puntos por debajo de esa media (68,4 sobre 100), con lo que la brecha alcanza los 61 puntos porcentuales. Cuatro a?os despu¨¦s, al cierre de 2012, el PIB por habitante de los vascos (30.828 euros anuales; 35,4 puntos sobre la media) duplica el de los extreme?os (15.394; 32,4 puntos por debajo). La brecha se ha agrandado hasta los 67,8 puntos.

El segundo y tercer nivel de estos dos extremos siguen la misma t¨®nica. Andaluc¨ªa, la segunda m¨¢s desfavorecida en esta variable, ha ca¨ªdo de un nivel de PIB por habitante de 77 sobre 100 en 2008 a 74 en 2012; y Castilla-La Mancha, la tercera, ha pasado del 81,7 al 77,7. Se trata de la mayor ca¨ªda. Sin embargo, Madrid, en segundo lugar entre los m¨¢s fuertes, ha mantenido su ventaja respecto a la media ¡ª29 puntos (129 sobre 100)¡ª y Navarra la ha mejorado en dos puntos su posici¨®n relativa, de 125,4 a 127,7. Destaca la mejora de Catalu?a, que ha ganado casi cuatro puntos sobre la media espa?ola y ha pasado de 115,8 a 119.

¡°Entre 2000 y 2008 las mejoras en convergencia fueron posibles porque el crecimiento se bas¨® en sectores m¨¢s tradicionales como la construcci¨®n y el turismo, adem¨¢s de ciertos servicios relacionados con la dependencia y la atenci¨®n a las personas, que convirtieron en asalariado mucho trabajo dom¨¦stico¡±, explica Francisco P¨¦rez, catedr¨¢tico de Fundamentos del An¨¢lisis Econ¨®mico y director de investigaci¨®n del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (IVIE).

Hoy vuelve la desigualdad. ¡°No hay una ¨²nica respuesta para esto: el empleo p¨²blico y la capitalidad mantienen a Madrid m¨¢s resistente a la crisis, Catalu?a cuenta con un relativamente m¨¢s importante consumo exterior (turismo y comercio exterior) y, en el caso del Pa¨ªs Vasco, el colch¨®n del ahorro en el mantenimiento de consumo ha pesado, as¨ª como algo de la orientaci¨®n exportadora de su industria¡±, explica el catedr¨¢tico de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) Guillem L¨®pez-Casasnovas. Sin embargo, ¡°el sur y la meseta no cuentan en general con otros resortes de demanda que la interna, que est¨¢ hoy en encefalograma plano¡±.

La especial dureza de los ajustes en algunas comunidades ha castigado la marcha econ¨®mica. Las cuentas regionales de 2012 reflejan c¨®mo la recesi¨®n se ha agudizado precisamente en las comunidades que m¨¢s han corregido su desequilibrio presupuestario. Castilla-La Mancha, Asturias y Extremadura, las que m¨¢s redujeron el d¨¦ficit, experimentaron las mayores ca¨ªdas de la actividad, con descensos del 3%, del 2,5% y del 2,2%, respectivamente.

Pa¨ªs Vasco, Madrid y Navarran mejoran su posici¨®n relativa, y Extremadura baja

El Gobierno castellano-manchego recort¨® m¨¢s de seis puntos de d¨¦ficit en un a?o, del 7,9% al 1,5%, a costa de reducir en casi 2.000 millones el gasto. Fuentes del Gobierno aut¨®nomo admiten que el ajuste del sector p¨²blico explica en buena parte la contracci¨®n del PIB, ya que ¡°ven¨ªamos de un ritmo de crecimiento del gasto del 4,5% que no se pod¨ªa sostener en una econom¨ªa en la que el sector p¨²blico representa alrededor del 20% del PIB¡±, en cr¨ªtica al anterior Gobierno socialista.

Este a?o vuelven a pintar bastos. Los nuevos presupuestos rebajan el gasto otro 10%. ¡°Somos conscientes de que aqu¨ª va a costar m¨¢s la recuperaci¨®n. Apenas hay actividad industrial, pero ahora tendremos que empezar a orientar esta econom¨ªa a sectores alternativos¡±, a?aden fuentes del Ejecutivo.

P¨¦rez recalca en este sentido que ¡°Espa?a debe ir migrando hacia un nuevo modelo productivo, y este salto no puede ser abordado por igual en todas las comunidades aut¨®nomas¡±.

Un informe reciente de Consejo Econ¨®mico y Social (CES) sobre la distribuci¨®n de la renta tambi¨¦n destaca el aumento de las disparidades regionales y aborda el impacto que ha tenido en ello la innovaci¨®n. ¡°Madrid, Catalu?a, Pa¨ªs Vasco y Navarra son las comunidades aut¨®nomas que tradicionalmente han realizado un mayor esfuerzo en gasto en I+D, al tiempo que su tejido empresarial muestra una alta representaci¨®n de empresas tecnol¨®gicamente innovadoras¡±, apunta.

Con todo, Espa?a se mantiene como un pa¨ªs de cohesi¨®n territorial notable, seg¨²n muestran las estad¨ªsticas de la OCDE. Los datos del coeficiente Gini (un bar¨®metro habitual para medir la desigualdad) aplicado a las regiones dentro de los pa¨ªses colocan a Espa?a entre las mejores posiciones, superada por Francia pero por delante de otros socios europeos como Alemania o Italia. En este sentido, el catedr¨¢tico de la UPF apunta que ¡°la cohesi¨®n la da la menor polarizaci¨®n (las densidades de concentraci¨®n de la poblaci¨®n en los extremos) m¨¢s que la desigualdad en s¨ª misma, y la parte superior en Espa?a no concentra de momento proporcionalmente tanto como la inferior¡±.

Los resultados de Carrefour evidencian un buen bar¨®metro de lo que ocurre con la econom¨ªa al radiografiar un pa¨ªs m¨¢s desigual en poder de compra

Hay otros elementos propios del ciclo que favorecen la disparidad entre comunidades. ¡°En la crisis se produce un efecto de aglomeraci¨®n l¨®gico: las empresas reducen inversiones y actividad y tienden a concentrarse en las zonas m¨¢s din¨¢micas en s¨ª, mientras que en las ¨¦pocas de expansi¨®n se benefician zonas como Andaluc¨ªa por su crecimiento potencial¡±, explica Gaspar Llanes, secretario de Econom¨ªa de la Junta de Andaluc¨ªa.

Esa comunidad ha perdido en esta crisis buena parte del esfuerzo de convergencia realizado en el pasado. Su PIB por habitante se situaba en el 74% de la media en 1995, logr¨® escalar al 77% en 2004 y ha vuelto ahora al punto en que se encontraba hace m¨¢s de 15 a?os. Llanes explica que buena parte de la convergencia lograda se apoy¨® en la inversi¨®n p¨²blica y privada, que explican aproximadamente un tercio de su econom¨ªa y es lo primero que se contrae en una crisis. ¡°Ah¨ª est¨¢ la explicaci¨®n de nuestra expansi¨®n, pero tambi¨¦n ahora de nuestra debilidad¡±, lamenta. Adem¨¢s, las exportaciones no permiten compensar la ca¨ªda de la demanda interna. ¡°Nuestras ventas fuera de la comunidad se concentran sobre todo en el resto de Espa?a, aunque haya crecido mucho las exportaciones, y nuestro turismo tambi¨¦n es nacional, y esto es importante¡±, a?ade.

El ¨²ltimo informe de situaci¨®n del BBVA, correspondiente al primer trimestre de 2013, analiza las divergencias regionales y se?ala dos elementos b¨¢sicos para explicarlas: el ajuste fiscal y ese mencionado sector exterior. Las exportaciones espa?olas batieron su r¨¦cord en 2012 y permitieron parar el golpe de un consumo interno deprimido, pero no todas las regiones se han beneficiado de ello. El estudio recalca que aquellas zonas con un comercio exterior m¨¢s incipiente han crecido m¨¢s que las exportadoras consolidadas, como Catalu?a o Pa¨ªs Vasco, pero ¡°este mayor crecimiento no ser¨¢ suficiente para compensar el menor peso¡±.

Llanes, del PSOE, critica la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Rajoy, a la que acusa de ¡°buscar una devaluaci¨®n por v¨ªa del despido masivo y la rebaja salarial, y eso ha sido un error porque ha supuesto la destrucci¨®n de 820.000 empleos en 2012¡±.

Andaluc¨ªa sufre la mayor tasa de paro, de casi el 36%. El desempleo seguir¨¢ creciendo en el conjunto nacional, seg¨²n la mayor parte de servicios de estudios, hasta el 27%, seg¨²n los ¨²ltimos c¨¢lculos del Banco de Espa?a. ¡°Estamos extraordinariamente preocupados¡±, admite el secretario, quien no obstante defiende que ¡°las competencias auton¨®micas tiene muy poco margen de actuaci¨®n en pol¨ªticas macroecon¨®micas a corto plazo¡±.

La especial dureza de los ajustes en algunas comunidades ha castigado la marcha econ¨®mica

Las comunidades afrontan una carrera de fondo. En 2012 se dio el caso de que el Pa¨ªs Vasco fue la segunda comunidad que m¨¢s vio disminuir el n¨²mero de ocupados en t¨¦rminos relativos (7,12%), mientras que no destac¨® por su ca¨ªda econ¨®mica, en l¨ªnea con la media. Esto tiene que ver con el tipo de empleo que se destruye, si se evaporan aquellos puestos de trabajo que menos valor a?adido el efecto en la renta. En Espa?a se suele hablar de hace falta un crecimiento de entre el 1,5% y el 2% para crear empleo. Para L¨®pez-Casasnovas, ¡°no est¨¢ este crecimiento en el horizonte¡±. ¡°S¨¦ que no gusta y, seg¨²n c¨®mo se diga, incluso suena mal. Pero no toca otra que bajar poblaci¨®n activa y/o incrementar la productividad de quienes se mantengan en sus puestos de trabajo¡±.

Uno de los elementos m¨¢s negativos de la desigualdad ¡ªya sea entre territorios o entre capas sociales¡ª es que tardan mucho m¨¢s en reducirse que en aumentar. L¨®pez-Casasnovas ve dif¨ªcil que la brecha se reduzca en cuanto la econom¨ªa vuelva al crecimiento. ¡°No creo se corrija. La vuelta al crecimiento, cuando suceda, es probable que mejore relativamente m¨¢s a las decilas [porciones de diez] de renta alta, mientras que las bajas, con la reforma del mercado de trabajo, el doloroso aprendizaje del paro y si llega el caso de los minisalarios, mantendr¨¢n retribuciones deprimidas¡±. En otras palabras, ¡°sus mejoras ser¨¢n relativamente menores, que es lo que explica la desigualdad¡±, a?ade, ¡°pero reaparecer¨¢, esperemos, la clase media, que es la que evita el estallido social asociable a una polarizaci¨®n extrema¡±.

¡°Las diferencias en los flujos demogr¨¢ficos entre Comunidades (emigraciones, natalidad, repatriaci¨®n de inmigrantes...) y la falta de proyecto e iniciativa empresarial de algunas zonas marcar¨¢n las nuevas disparidades. Quienes lo fiaban todo a la acci¨®n p¨²blica tienen hoy un problema grave. Los costes de haberse instalado en el subsidio p¨²blico-dormidera afloran hoy sin soluci¨®n f¨¢cil¡±, remacha el catedr¨¢tico.