La mayor parte de los oligarcas rusos sacaron su dinero hace tiempo
La crisis de la isla cuestiona el modelo pol¨ªtico y econ¨®mico de Putin
Adem¨¢s de mermar el capital ruso, la crisis financiera en Chipre evidencia los problemas que aquejan la gesti¨®n de Vlad¨ªmir Putin, atrapado entre la dependencia econ¨®mica de Occidente, sus promesas populistas y sus dificultades para una verdadera modernizaci¨®n de Rusia que implique control independiente del gasto p¨²blico y pluralismo democr¨¢tico.
¡°El bandido ruso que depositaba su maleta repleta de billetes en un banco de Chipre es un personaje del siglo pasado¡±, seg¨²n afirman expertos financieros en Mosc¨². No obstante, este estereotipo ¡ªrara vez identificado como un ser actual¡ª, sigue vivo en los comentarios europeos sobre los lazos entre Rusia y el que ha sido su para¨ªso fiscal favorito.
Las relaciones financieras Rusia-Chipre tienen diversas componentes y funciones, que adem¨¢s han cambiado con el tiempo, entre ellas operaciones de pago internacionales ¨¢giles y baratas. Sobre el lavado de dinero, los analistas ni dan cifras ni se?alan con el dedo, pero subrayan que no es hoy la funci¨®n principal de la isla. Rusia y Chipre tienen un convenio para evitar la doble imposici¨®n y las estimaciones sobre el capital ruso pillado en los bancos chipriotas var¨ªan, siendo la cifra de 20.000 millones de euros la m¨¢s reiterada.
La presencia de Mosc¨² en las finanzas chipriotas comenz¨® ya en ¨¦poca de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, cuando aquel pa¨ªs de econom¨ªa planificada necesitaba sedes exteriores para realizar operaciones financieras para las que su sistema estaba mal equipado. Al desaparecer la URSS en 1991, Chipre se convirti¨® en un buen destino para los que se llevaban el dinero de Rusia a sacos.
Pero, ¡°cuando Chipre ingres¨® en la Uni¨®n Europea, los bandidos del saco eran menos y dejaron de ir a Chipre, porque para entonces ten¨ªan ya cuentas legales en Suiza o Luxemburgo¡±, dice Sergu¨¦i Afontsev, jefe del departamento de Econom¨ªa del Instituto de Econom¨ªa Mundial y Relaciones Internacionales (IMEMO).
Luego, ¡°al producirse la crisis griega, las grandes empresas rusas con cuentas en Chipre comenzaron a llevarse su dinero de all¨ª¡±, se?alan medios bancarios. En la fuga, matizan, ¡°las empresas privadas fueron m¨¢s r¨¢pidas que las p¨²blicas, que por ser m¨¢s burocr¨¢ticas han reaccionado con m¨¢s lentitud¡±. En lo que a Rusia se refiere, en Chipre quedan dep¨®sitos de ahorradores medios y ¡°megamafiosos incorregibles¡±, que no supieron reciclarse en oligarcas, como los que hoy son ¡°respetados¡± en Occidente, se?alan.
Las empresas p¨²blicas y privadas rusas con sede en Chipre han realizado sus transaciones a partir de cuentas en la isla. Esa pr¨¢ctica ha servido al capital ruso para invertir en su propio pa¨ªs convertido en ¡°extranjero¡±, una condici¨®n jur¨ªdica que incrementa su seguridad.
¡°En Mosc¨², un grupo de agentes del orden puede asaltar tu oficina, pedir a tus empleados que se echen al suelo y llevarse lo que quieran. Esa no es una forma de dirigir un pa¨ªs moderno¡±, escribe el economista Anders Aslund, refiri¨¦ndose a los peligros que acechan a las empresas rusas.
El porcentaje del capital procedente de Chipre en la inversi¨®n extranjera total en Rusia es bastante estable y en 2012 supuso un 21,2% en 2012 y con valor absoluto de m¨¢s de 76.700 millones de d¨®lares.
La crisis de Chipre ocurre cuando Vlad¨ªmir Putin trata de afianzar su base de poder mediante f¨®rmulas populistas basadas en la idea tradicional de ¡°Rusia como fortaleza asediada y rodeada de p¨¦rfidos enemigos¡±. Putin llam¨® ¡°incompetentes¡± a los responsables de la zona euro, pero, m¨¢s all¨¢ de algunos airados comentarios del presidente y del jefe de Gobierno, Dmitri Medv¨¦dev, la propaganda para consumo interior no ha podido ¡°encajar¡± el tema de Chipre en el esquema ¡°todos contra nosotros¡± con el que bombardea desde la televisi¨®n.
Los responsables de uno los programas m¨¢s ideol¨®gicos de la televisi¨®n estatal renunciaron por ese motivo a tratar a fondo el tema de Chipre. Uno de sus analistas reconoc¨ªa: ¡°Surgen demasiadas preguntas a las que no se quiere responder. Si hablamos de Chipre habr¨ªa que explicar por qu¨¦ Rusia no renuncia a los para¨ªsos fiscales, tal como proclama Putin, explicar qu¨¦ sucede con el lavado de dinero y si el Estado utiliza a Chipre para operaciones opacas¡±.
En el discurso sobre el Estado de la naci¨®n en 2012, Putin pidi¨® al gobierno que se preparara a renunciar a los para¨ªsos fiscales. Pero ahora, Medv¨¦dev ha propuesto estudiar la posibilidad de crear para¨ªsos fiscales en los territorios del Lejano Oriente necesitados de inversi¨®n, como Sajal¨ªn y las Islas Kuriles. Volver a crear para¨ªsos fiscales en Rusia supondr¨ªa reconocer de hecho que el pa¨ªs no logra modernizar su sistema financiero.
Una de las discusiones provocadas por la crisis de Chipre versa sobre el retorno o no retorno del dinero ruso en aquel para¨ªso fiscal. Prevalecen los que opinan que el dinero no volver¨¢, sino que se ir¨¢ a otros para¨ªsos fiscales y, a ser posible, en d¨®lares. El viceministro de Desarrollo Econ¨®mico, Andr¨¦i Klepach, pronostica incluso que la salida de capital de Rusia ser¨¢ mayor de lo previsto y en la Escuela Superior de Econom¨ªa, augura un descenso de las inversiones directas desde el extranjero
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