Cerco a los hostales 'clandestinos' en Madrid

No pagan impuestos, no tienen licencia y escapan a los controles sanitarios y de seguridad: son los hostales 'clandestinos', que seg¨²n los hosteleros de Madrid ofrecen al menos 8.000 plazas a los turistas y suponen un grave da?o a un sector que ha perdido un 15 por ciento de establecimientos legales en dos a?os.

El presidente la Asociaci¨®n de Empresarios de Hospedaje de la Comunidad de Madrid, Jes¨²s Mart¨ªn, calcula que de entre las 70.000 plazas del gremio de hospedaje de la Comunidad de Madrid, m¨¢s de 8.000 son ilegales y pertenecen a estos pisos que, a modo de apartahoteles u hostales, hacen su agosto en la econom¨ªa sumergida porque resultan muy atractivos para los extranjeros.

Los visitantes for¨¢neos optan por ellos porque muchos est¨¢n en pleno centro de Madrid -calle Atocha, calle de la Cruz, N¨²?ez de Arce... incluso en edificios pintorescos o hist¨®ricos- y porque, en contra de lo que pudiera parecer, se anuncian con impunidad en las grandes centrales de reservas de internet, explica Mart¨ªn.

"El cliente cree que est¨¢ reservando un alojamiento legal que cumple con la normativa porque se anuncian por estos canales legales", lamenta el portavoz hostelero.

Evidentemente, el reclamo de los 'clandestinos' es tambi¨¦n su precio, siempre a la baja porque ni pagan licencias, ni emiten facturas -legales- ni afrontan, por ejemplo, cotizaciones a la Seguridad Social.

Mart¨ªn cuenta que no son pocos los turistas que estos 'negocios' han dejado "tirados" y han recalado en hospedajes reglados, ni pocas las denuncias que llegan a la asociaci¨®n documentadas con falsas facturas de estos establecimientos.

Como no figuran en ning¨²n listado oficial, a?ade, "escapan al control de la polic¨ªa o de las inspecciones", lo que cierra el c¨ªrculo vicioso.

El empresario Alberto di Stefano, que regenta desde hace 13 a?os hostales como el Adriano o el Adri¨¤ Santa Ana, cree que si el sector ingresa ahora un 30 por ciento menos, la mitad de la rebaja se debe a los "clandestinos".

Di Stefano culpa a la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento de la "dejadez" en el control de este fen¨®meno, que data de hace cuatro o cinco a?os, y da?a a unos 600 hostales con unos 10.000 empleados.

Antes, explica, "a nadie se le ocurr¨ªa inventar un hotel", pero ahora "el intrusismo es brutal", incluso tras un goteo infructuoso de unas 300 denuncias. Este fen¨®meno ya ocurri¨® en Nueva York y all¨ª "lo borraron", apostilla.

El empresario lamenta que este es un caso similar al de un restaurante ilegal: "Hasta que no se te muera ninguno comiendo...". "Estamos esperando un Madrid Arena para los apartamentos", a?ade con tono de resignaci¨®n.

Desde el hostal Barrera, Nieves Mollo cuenta que le acaban de cancelar una reserva que ten¨ªa para mayo: "Prefieren alojarse en un apartamento".

Mollo se declara "enfadad¨ªsima y muy mosqueada" con las centrales de reserva hotelera y con la administraci¨®n por esta "competencia desleal": "Soy aut¨®noma, tengo trabajadores a mi cargo, tengo que pagar un mont¨®n...", a?ade.

Enfrente a su negocio, en un edificio alquilan apartamentos "a diestro y siniestro"; en el barrio, se encuentra a turistas que aguardan durante horas en la calle, pertrechados con maletas, ante edificios sin carteles ni identificativos.

?Es ilegal alquilar un apartamento? "No", cuenta, pero los apartamentos tur¨ªsticos, seg¨²n la normativa vigente, solo pueden estar en un edificio destinado al completo para ese uso.

Sea por el desgaste que la ca¨ªda del consumo est¨¢ provocando en los alojamientos legales, por su proliferaci¨®n a la sombra de internet -ah¨ª no es f¨¢cil distinguir el grano de la paja-, o por ambos motivos, las quejas sobre los 'clandestinos' los han elevado a la agenda pol¨ªtica y medi¨¢tica.

La Consejer¨ªa de Turismo de la Comunidad de Madrid ha anunciado que est¨¢ ultimando un decreto con el que pretende resolver "una parte importante" de los problemas del sector, pero insiste en que es "bastante imposible" que pueda "entrar en una casa que dicen que es particular y que no tiene esa actividad".

"Me consta que el Ayuntamiento de Madrid est¨¢ preocupado por esta realidad, como lo estoy yo", se?alaba esta semana la consejera Ana Isabel Mari?o.

A este respecto, Mart¨ªn pide una legislaci¨®n que evite que el ilegal pueda "participar" en el mercado y avanza que las grandes centrales de reservas de internet se han comprometido a tomar las "medidas oportunas" y van a cruzar datos para dar de baja a los intrusos.

Y, sobre todo, recomienda a los consumidores que exijan las licencias correspondientes a la hora de hacer su reserva y lanza un aviso: cualquier apartamento que se alquile de forma individual estar¨¢ en un 99 por ciento de posibilidades fuera de la ley.

Por Evaristo Amado