Passos Coelho habla hoy a Portugal tras el amago de crisis de Gobierno
La declaraci¨®n al pa¨ªs que hace hoy el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, mantiene expectante a un pa¨ªs que ayer se vio metido por sorpresa en un amago de crisis de Gobierno, cuando se cumpl¨ªan dos a?os de su rescate financiero.
Nada ha trascendido sobre el contenido del anuncio que el l¨ªder conservador quiere hacer, como han destacado varios medios lusos, despu¨¦s de que el presidente, An¨ªbal Cavaco Silva, de su mismo partido, le diera ayer un espaldarazo al anunciar que tiene condiciones para concluir la legislatura.
Aunque cuenta con una c¨®moda mayor¨ªa absoluta que le permiti¨® superar esta semana una moci¨®n de censura de toda la oposici¨®n, el veto del Tribunal Constitucional a varias de sus medidas de austeridad hizo que Passos Coelho pidiera el s¨¢bado una audiencia urgente con Cavaco.
Fuentes gubernamentales filtraron poco despu¨¦s a los medios que el primer ministro no ten¨ªa intenci¨®n de renunciar sino de plantear al jefe del Estado la situaci¨®n creada por la sentencia, que abre un agujero de m¨¢s de mil millones de euros en los presupuestos lusos y har¨¢ m¨¢s dif¨ªcil cumplir los objetivos de su rescate.
Una declaraci¨®n oficial se?al¨®, en ese sentido, que el prop¨®sito de Passos Coelho era obtener "una r¨¢pida clarificaci¨®n del Estado sobre relevantes aspectos puestos en cuesti¨®n por la sentencia".
Pero tras la reuni¨®n entre los dos l¨ªderes conservadores, el presidente de la Rep¨²blica emiti¨® un lac¨®nico comunicado que ven¨ªa a confirmar al Gobierno en sus funciones sin que nadie aclarara si su dimisi¨®n hab¨ªa estado o no encima de la mesa.
Cavaco, conocido por sus pocas y medidas palabras, afirm¨® que el Ejecutivo, que a¨²n no ha cumplido dos de los cuatro a?os de legislatura, "dispone de condiciones para cumplir su mandato".
Tambi¨¦n subray¨® la determinaci¨®n a que Portugal "honre los compromisos internacionales" y "sean alcanzados y preservados los consensos necesarios para salvaguarda el inter¨¦s nacional".
Su declaraci¨®n se produjo en medio de las peticiones de toda la oposici¨®n para que Passos Coelho, pese al blindaje de su mayor¨ªa absoluta, presentara la renuncia tras la dimisi¨®n de uno de sus ministros y en medio de un esc¨¢ndalo acad¨¦mico y el varapalo del m¨¢ximo tribunal luso, que emiti¨® otra sentencia similar en 2012.
El Gobierno conservador celebr¨® el s¨¢bado, 24 horas despu¨¦s del fallo del Constitucional, un consejo extraordinario de ministros para analizar la sentencia y su portavoz expres¨® despu¨¦s el desacuerdo del Ejecutivo con su dictamen.
Adem¨¢s advirti¨® del riesgo que esa decisi¨®n supone para Portugal, y las consecuencias para su credibilidad ante los acreedores y en las negociaciones para ampliar los plazos de devoluci¨®n del rescate.
Los comentaristas de la prensa lusa dan hoy diversas explicaciones al amago de crisis de Gobierno y apuntan desde una "dramatizaci¨®n" del Ejecutivo, desairado por el fallo judicial, hasta un gesto de Passos Coelho para comprometer al jefe del Estado en la soluci¨®n del nuevo agujero presupuestario.
Lu¨ªs Marques Mendes, expresidente del PSD y miembro del Consejo de Estado que asesora a Cavaco, sostiene que la dimisi¨®n s¨ª fue tratada en la reuni¨®n.
Cavaco, l¨ªder hist¨®rico del Partido Social Dem¨®crata (PSD, centroderecha) a sus 73 a?os, fue quien envi¨® -entre otras instituciones y partidos- los presupuestos al Constitucional por dudar de su legalidad.
El pol¨ªtico, primer ministro durante una d¨¦cada y ahora en su segundo mandato presidencial de seis a?os, ha insistido mucho en el ¨²ltimo a?o en la gravedad de los problemas sociales de Portugal y se ha distanciado de la dura pol¨ªtica de austeridad de Passos Coelho.
El actual jefe de Gobierno, de 48 a?os y ajeno al c¨ªrculo del PSD pr¨®ximo a Cavaco, destron¨® de la presidencia del partido, s¨®lo un a?o antes de ganar las elecciones anticipadas que siguieron al rescate financiero, a una exministra de Finanzas y asesora del jefe de Estado, muy cr¨ªtica tambi¨¦n con la actual pol¨ªtica econ¨®mica.
Pero al margen de los entresijos de la amagada crisis de Gobierno, muchos portugueses parecen preocupados hoy por la posibilidad de que Passos Coelho anuncie al pa¨ªs nuevos sacrificios para compensar los que ha prohibido el Constitucional.
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