La p¨¦rdida de poder adquisitivo obstaculiza el pacto de pensiones
Sindicatos y oposici¨®n denuncian que la reforma erosiona las jubilaciones
¡°La reforma de las pensiones es el debate social m¨¢s importante que tiene planteado la sociedad espa?ola¡±, ha declarado con solemnidad la ministra de Empleo, F¨¢tima B¨¢?ez, ¡°estamos trabajando para lograr el mayor consenso posible¡±. Pero este objetivo corre un serio riesgo. La propuesta que B¨¢?ez present¨® el lunes a sindicatos y empresarios, sin otras medidas, acarrea p¨¦rdidas de poder adquisitivo para todos los pensionistas ¡ªpresentes y futuros¡ª al menos en los primeros a?os de vigencia, salvo que las previsiones econ¨®micas no acierten o crezcan mucho los ingresos de la Seguridad Social. ¡°No era necesario poner sobre la mesa la f¨®rmula de revalorizaci¨®n anual, dificulta mucho el acuerdo¡±, analiza Carlos Bravo, responsable de pensiones de CC OO.
Este sindicalista se refiere a la primera parte de la propuesta de reforma del Gobierno: los cambios en la forma en que se actualizar¨¢n las pensiones, que dejar¨¢n de estar ligadas ¡ªal menos legalmente¡ª a los precios ya desde 2014 y, en consecuencia, afectar¨¢ tanto a pensionistas presentes como futuros. Su opini¨®n es compartida por su hom¨®loga de UGT, Carmen L¨®pez, y por la mayor parte de grupos pol¨ªticos: llegar a un pacto con un calendario apretado es muy dif¨ªcil si hay que redefinir la f¨®rmula de actualizaci¨®n anual de las pensiones. ¡°La Constituci¨®n obliga a mirar siempre al poder adquisitivo. El modelo actual es v¨¢lido¡±, defiende Valeriano G¨®mez, del PSOE, pese a que en 2011 y 2012 se suspendi¨® y las pensiones se devaluaron. ¡°Solo dos veces en 20 a?os¡±, justifica.
Quien no ve ninguna posibilidad para el pacto es Joan Coscubiera, portavoz de Izquierda Plural. ¡°Impugnamos que sea necesaria esta reforma. Los problemas tienen que ver con el mercado laboral. La propuesta de actualizaci¨®n anual es un fraude¡±.
Un formato de negociaci¨®n diferente
Las conversaciones entre Gobierno y sindicatos para pactar esta reforma de pensiones van a correr de forma paralela a su tramitaci¨®n parlamentaria, algo muy diferente de lo que sucedi¨® en 2011, cuando se acord¨® el retraso de la edad legal de jubilaci¨®n a los 67 a?os. ¡°Esta vez no se va a hablar de una reforma integral de la Ley General de Seguridad Social, como entonces¡±, justifica el secretario de Estado, Tom¨¢s Burgos, ¡°esta vez es un desarrollo de la reforma de 2011, nos parece un mecanismo adecuado, incluso podr¨ªamos entender que con el pacto de entonces ten¨ªamos cobertura¡±.
El Gobierno quiere que la reforma est¨¦ lista ya en 2014 y eso implica que antes de que acabe este mes debe estar listo el primer borrador para enviarlo al Consejo Econ¨®mico y Social, y poco despu¨¦s el proyecto de ley. A tenor del calado de los cambios previstos, estos plazos se antojan insuficientes para alcanzar cualquier tipo de pacto con sindicatos y oposici¨®n y, por tanto, las negociaciones tendr¨¢n que continuar durante la tramitaci¨®n parlamentaria si, como ratifica Burgos, el Ejecutivo quiere una reforma pactada.
Para cambiar la f¨®rmula vigente, B¨¢?ez ha planteado una ecuaci¨®n que se basa en la salud de las cuentas de la Seguridad Social. Parte del informe que una docena de expertos elaboraron en primavera, que tambi¨¦n ligaba la pensi¨®n inicial del jubilado a la esperanza de vida en el momento del retiro, pero le pone l¨ªmites: el incremento nunca podr¨¢ ser menor del 0,25% ni mayor del 0,25% m¨¢s el IPC. ¡°Es evidente que el sistema actual crea desajustes. Proponemos un modelo a largo plazo, y ah¨ª s¨ª que se garantiza el poder adquisitivo¡±, defiende el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tom¨¢s Burgos.
Pero estudiosos del sistema de pensiones, oposici¨®n y sindicatos discrepan de las palabras de Burgos. ¡°Claro que con esa f¨®rmula se pierde poder adquisitivo¡±, defiende Javier D¨ªaz-Gim¨¦nez, profesor del IESE y partidario de una reforma sustancial del sistema. Como ¨¦l piensan todos de expertos consultados para este art¨ªculo, incluso entre los que integraron la comisi¨®n de expertos a los que el Gobierno encarg¨® la redacci¨®n del informe. Los hay que incluso, teniendo presentes las perspectivas econ¨®micas para Espa?a, apuntan que en los pr¨®ximos siete u ocho a?os, la subida de pensiones quedar¨¢ siempre en el 0,25% y, en cambio, los precios subir¨¢n bastante m¨¢s.
¡°S¨ª, claro que hay p¨¦rdida de poder adquisitivo. Y la subida en a?os buenos del 0,25%, no es suficiente para compensar los a?os malos¡±, analiza L¨®pez, de UGT, quien define la propuesta oficial como desequilibrada.
¡°Esta propuesta nos genera rechazo y preocupaci¨®n¡±, explica el portavoz de UPyD, ?lvaro Anchuelo, ¡°esta actualizaci¨®n anual genera injusticia a largo plazo¡±. Tambi¨¦n CiU sit¨²a el list¨®n en este punto. ¡°Se tiene que garantizar el poder adquisitivo. Hay que buscar opciones alternativas en los ingresos¡±, demanda Carles Campuzano, que apunta a cambios en viudedad.
Para evitar la devaluaci¨®n de las pensiones, las dos centrales mayoritarias preparan estos d¨ªas alternativas que aumenten los ingresos de la Seguridad Social. Quieren equilibrar la ecuaci¨®n basada en la salud de las cuentas del instituto p¨²blico, ahora en n¨²meros rojos y que no cambiar¨¢ de no mediar un giro radical ¡ªe inesperado¡ª en el mercado laboral, y prolongar la vida del Fondo de Reserva, cuyos recursos se est¨¢n gastando ahora para pagar las pensiones actuales. El objetivo lo define Bravo: ¡°Podemos discutir si medimos el poder adquisitivo con el IPC, los salarios o el PIB. Pero lo que est¨¢ claro es que cuando un pensionista muera no puede tener un poder de compra menor que cuando se retir¨®¡±.
¡°El problema est¨¢ en que hacen falta ingresos y todo lo que no sea reconocer eso, es no querer afrontar el problema¡±, explica Felipe Serrano, de la Universidad del Pa¨ªs Vasco. Algo similar ven¨ªa a decir aquel informe primaveral, que abr¨ªa la puerta a la aportaci¨®n de recursos adicionales al sistema de pensiones y que conten¨ªa una f¨®rmula de actualizaci¨®n anual de las pensiones a la que Empleo ha puesto suelo y techo porque daba ¡°lugar a grandes oscilaciones¡±, explica Burgos y corroboran varios expertos que han realizado simulaciones con a?os pasados (se dan incrementos cercanos al 6% en a?os buenos y ca¨ªdas en torno al 5% en los malos).
¡°Estamos dispuestos a escuchar propuestas en esa direcci¨®n¡±, explica Burgos, que se?ala que podr¨ªan aumentar las bases m¨¢ximas de cotizaci¨®n. En cambio, cierra la puerta a cambios en la otra parte de la propuesta, la que liga la prestaci¨®n inicial a la esperanza de vida. El PSOE, en cambio, pide cambios en este punto: ¡°La esperanza de vida no tiene por qu¨¦ afectar solo a la pensi¨®n, tambi¨¦n puede afectar a la edad o el n¨²mero de a?os necesarios para calcular la pensi¨®n¡±.
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