Obras chinas, cerebros espa?oles
El n¨²mero de emigrantes al pa¨ªs asi¨¢tico casi se duplica desde 2008 Decenas de j¨®venes arquitectos acuden a la llamada del impulso del urbanismo
La imagen del sue?o americano, ese mundo lleno de nuevas oportunidades, dinero y el trabajo perfecto, se ha trasladado a China, al menos para muchos arquitectos j¨®venes como ??igo S¨¢nchez Arr¨®tegui.
Este madrile?o de 28 a?os, que lleva trece meses en China, lleg¨® a Pek¨ªn un viernes, hizo entrevistas durante una semana, el viernes siguiente firmaba un contrato y el lunes ya trabajaba en Anyscale, un despacho austr¨ªaco-alem¨¢n con 10 trabajadores. S¨¢nchez se hab¨ªa hecho una lista de despachos que le interesaban y se hab¨ªa ido de puerta en puerta con el portafolio. ¡°Tuve mucha suerte, y estoy contento¡±, explica, satisfecho con su trabajo, feliz con la casa en la que vive en un barrio tradicional y encantado de poder estudiar chino. A pesar de lo afortunado que se siente, advierte que la realidad no es tan ideal como puede parecer. ¡°Yo vine pensando que esto era mejor de lo que es¡±.
"Se construye mucho y r¨¢pido, con conceptos simples¡±, explica un emigrado
¡°Es un pa¨ªs en v¨ªas de desarrollo, lo cual conlleva consecuencias, buenas y malas¡±, dice el madrile?o. La arquitectura que se hace en China es muy b¨¢sica, explica. ¡°El pa¨ªs est¨¢ creciendo de forma acelerada y no hay una cultura art¨ªstica muy desarrollada, eso hace que se construya mucho, r¨¢pido y que los conceptos de los proyectos sean muy simples. Simplifica el trabajo pero lo hace menos interesante. Hay cosas por hacer, lo cual significa que hay trabajo, pero no es el trabajo de tus sue?os¡±, aclara. La experiencia vital, a?ade, es la mejor de sus recompensas.
Atra¨ªdos por esta idea de tierra prometida, S¨¢nchez es uno de los muchos j¨®venes arquitectos espa?oles que debido a la debacle inmobiliaria han emigrado a China, la segunda econom¨ªa mundial, donde el urbanismo y las infraestructuras han sido impulsores del crecimiento en los ¨²ltimos a?os.
China en corto
- Tasa de desempleo: 4,1%
- Crecimiento del PIB en 2013: 8%
- N¨²mero de espa?oles: 3.197 (censo, julio 2013)
- Entre 2008 y 2013, el n¨²mero de espa?oles censados en China aument¨® un 89,5%
- Para poder trabajar hay que tener al menos 18 a?os, no padecer enfermedades, tener experiencia en el puesto de trabajo antes de ser contratado, no tener antecedentes penales, tener "buena posici¨®n econ¨®mica" y un pasaporte v¨¢lido.
- Para poder trabajar en empresas extranjeras hay que tener visado de trabajo antes de entrar en China y obtener un certificado de trabajo para extranjeros. Los contratos no pueden ser de m¨¢s de 5 a?os.
¡°Las mayores dificultades no est¨¢n en lo obvio, como el idioma o el m¨¦todo de trabajo, sino en que la calidad que se demanda no es la misma y las reglas del juego son diferentes; lo m¨¢s dif¨ªcil es la adaptaci¨®n cultural¡±, dice Luis Aguirre Manso, un arquitecto que lleva en China desde el 2008 y estableci¨® su despacho, Aqso, a mediados de 2009 con oficinas en China y Espa?a. ¡°Hay que repensar lo que uno entiende por sentido com¨²n cuando trabajas en un entorno que no es el tuyo¡±, a?ade este zamorano, que en su despacho de ocho miembros puede llegar a trabajar simult¨¢neamente en proyectos de interiorismo, arquitectura, desarrollo de casas privadas, edificios gubernamentales y planeamiento urban¨ªstico.
¡°China es un lugar agresivo¡±, dice S¨¢nchez. ¡°Te puede agotar. Hay que recordar constantemente que es un camino, en el que hay que tener una actitud muy abierta, intentar entender cosas que parecen il¨®gicas; si no, te vuelves loco¡±.
Seg¨²n datos consulares, el n¨²mero total de espa?oles registrados en la China continental casi se ha duplicado desde 2008. El 36,5% son j¨®venes de entre 18 y 35 a?os. ¡°Al consulado cada vez acuden m¨¢s j¨®venes que vienen a China con la intenci¨®n de buscar trabajo, o vienen ya con trabajo o de estudios desde Espa?a¡±, explica Alberto Zafra, del consulado de Espa?a en Shanghai, por correo electr¨®nico.
Estas velocidad y escala de transformaci¨®n chinas dejan boquiabiertos a profesionales como Aguirre. Alrededor de 53% de la poblaci¨®n de China, o m¨¢s de 711 millones de personas, vive en las ciudades y la consultora Mckinsey estima que unos 350 millones de personas migrar¨¢n de los pueblos a las ciudades de aqu¨ª a 2025, con la consecuente proyecci¨®n de construcci¨®n de vivienda, infraestructuras, servicios p¨²blicos y comercio. Seg¨²n Lu Ting, economista de Bank of America, el gasto chino en infraestructuras en 2012 fue de alrededor de siete billones de yuanes (885.000 millones de euros), y la inversi¨®n total en infraestructuras podr¨ªa llegar a 115 billones de yuanes (14,7 billones de euros) durante los pr¨®ximos 10 a?os.
350 millones de chinos pasar¨¢n del pueblo a la ciudad en una d¨¦cada
Aunque la mayor¨ªa de proyectos arquitect¨®nicos chinos se caracterizan por su velocidad y escala, Igor Bragado Fern¨¢ndez, arquitecto de 28 a?os, trabaja en Tao, un despacho chino de 10 personas que este a?o tiene dos proyectos, en los que han invertido alrededor de a?o y medio enfocado en la investigaci¨®n, la t¨¦cnica, la cultura local y con atenci¨®n en el detalle. ¡°Es hora de empezar a cambiar la imagen que se tiene de la arquitectura que sea hace en China, de supervelocidad y poca calidad¡±, dice Bragado, originario de Gernika, que se mud¨® a Pek¨ªn en oto?o de 2011.
¡°Aqu¨ª hay mucho por desarrollar y hace falta de todo, las ciudades se est¨¢n transformando, pero m¨¢s all¨¢ del boom de la construcci¨®n, China da una oportunidad de reflexi¨®n y pensamiento como sistema¡±, dice Aguirre, de 33 a?os. ¡°Nada conocido en Espa?a es comparable con lo que se hace aqu¨ª¡±, a?ade el zamorano, que ha estado trabajando durante m¨¢s de dos a?os en Hutopolis, un proyecto de investigaci¨®n de la evoluci¨®n urbana en China y el mundo con estudiantes de universidades de Valladolid, Valencia, G¨¦nova, Mil¨¢n, Mosc¨² y Pek¨ªn. ¡°Desde hace unos a?os, tanto acad¨¦micos como investigadores est¨¢n observando con mucha atenci¨®n los fen¨®menos urbanos y arquitect¨®nicos derivados del crecimiento masivo¡±, dice Bragado, que la semana del 23 al 28 de junio fue ponente y cr¨ªtico invitado en un taller de verano de la Universidad de Columbia en Pek¨ªn.
¡°A pesar de todas las tragedias detr¨¢s de la situaci¨®n econ¨®mica de Espa?a, est¨¢ trayendo muchas cosas positivas, entre ellas que la gente est¨¦ forzada a internacionalizarse y ver un mundo un poco m¨¢s all¨¢¡±, dice Bragado, que en China ha tenido la oportunidad de compaginar el trabajo de su oficina con su pr¨¢ctica independiente desde verano de 2012.
S¨¢nchez est¨¢ de acuerdo. Una vez fuera de Espa?a ¡°te deslocalizas, ves tu pa¨ªs y tambi¨¦n las dem¨¢s cosas¡±, dice el joven arquitecto al que le gustar¨ªa quedarse en Pek¨ªn uno o dos a?os m¨¢s y piensa en irse a Hong Kong, Shanghai o Tokio una vez termine su cap¨ªtulo pekin¨¦s. ¡°Volver a Espa?a es limitarse a uno mismo, especialmente viendo c¨®mo ser internacional se est¨¢ convirtiendo en algo generalizado¡±, a?ade. ¡°Antes, ser expatriado te daba un gran valor por ser muy distinto, pero ahora es de lo m¨¢s corriente, es una necesidad¡±.
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