La reforma fiscal

La propuesta de reforma fiscal coordinada por Manuel Lagares ha tenido numerosas cr¨ªticas hasta del Gobierno que se la encarg¨®. La principal es que ser¨ªa la reforma m¨¢s regresiva de la democracia ya que bajar¨ªa los impuestos al 1% de la poblaci¨®n m¨¢s rica y nos lo subir¨ªa al resto, especialmente a los m¨¢s pobres con la subida del IVA en alimentos del 10% al 21%.

Siendo grave en pa¨ªs con pobreza extrema es muy preocupante tambi¨¦n verla desde el enfoque de la estabilidad macroecon¨®mica, condici¨®n necesaria del crecimiento econ¨®mico. La propuesta parte del principio de neutralidad fiscal. Pero es un dogma de fe ya que, a diferencia de lo habitual en pa¨ªses desarrollados, no hace una estimaci¨®n en euros propuesta por propuesta.

El tr¨ªo Rajoy, Montoro y Lagares ya estaba en la reforma de 1997. La herencia recibida en 1995 era una econom¨ªa que crec¨ªa un 4%, que creaba 300.000 empleos anuales, con crecimientos de exportaciones del 10%, con equilibrio en la balanza exterior, sin apenas deuda externa, con crecimiento de ingresos fiscales del 7% y una presi¨®n fiscal del 38% del PIB, superior a la actual. El d¨¦ficit primario estaba pr¨®ximo al equilibrio y la deuda p¨²blica era casi la mitad que la que Rajoy dejar¨¢ al final de la legislatura.

La bajada de impuestos de 1997 fue uno de los mayores errores de nuestra pol¨ªtica econ¨®mica en las ¨²ltimas d¨¦cadas ya que coincidi¨® con la entrada en el euro y fue muy inflacionista. Ah¨ª estuvo el origen de nuestra p¨¦rdida de competitividad y la burbuja inmobiliaria que nos ha provocado 6 millones de parados. Por eso es tan preocupante que el mismo tr¨ªo haga la reforma fiscal en 2014. Ahora el PIB nominal est¨¢ estancado, hay deflaci¨®n en los salarios y en la mayor parte de bienes de la cesta de la compra, la deuda externa es del 170% del PIB y la deuda externa neta ament¨® en 2013 hasta el 95%. La deuda p¨²blica est¨¢ en el 100% y falta a¨²n reflejar saneamiento bancario que est¨¢ inacabado y el d¨¦ficit el¨¦ctrico. El d¨¦ficit p¨²blico real debe estar pr¨®ximo al 8% del PIB viendo el aumento de la deuda p¨²blica el pasado a?o y especialmente tras asistir imp¨¢vidos al inexplicable aumento de 16.000 millones de deuda p¨²blica en enero.

El Gobierno empieza 2014 con unos 10.000 millones menos de ingresos previstos por sus errores de previsi¨®n en el presupuesto de 2013. Y a¨²n tiene que hacer un ajuste fiscal de al menos 40.000 millones para erradicar el d¨¦ficit primario, algo que Grecia, Portugal e Italia ya han logrado. Estos pa¨ªses han optado por la ruta del Canal de Panam¨¢, mientras nuestro presidente ha metido a los 46 millones de espa?oles en el Cabo de Hornos.

La ruta del Canal de Panam¨¢ para Espa?a es la que nos recomend¨® el Consejo Europeo por escrito con luz y taqu¨ªgrafos el pasado verano. Hay que eliminar las desgravaciones del IRPF y del impuesto de sociedades. Nuestros tipos impositivos son los m¨¢s altos de Europa pero se aplican sobre las bases m¨¢s bajas de la OCDE. Las desgravaciones son un lujo que Espa?a tras una depresi¨®n no se puede permitir. Adem¨¢s son extremadamente regresivas ya que benefician principalmente a las rentas altas y a las grandes empresas.

Si el Gobierno no aprovecha uno de los pocos cartuchos de pol¨ªtica econ¨®mica que le quedan, en cualquier momento nuestros socios europeos nos forzar¨¢n a reducir el d¨¦ficit precipitadamente. El velo de la ignorancia de los mercados se romper¨¢, volveremos a entrar en recesi¨®n y la crisis de deuda acabar¨¢ con arreglos, como siempre hab¨ªa sucedido antes de llegar la democracia.