UE: cuestionario de (in)satisfacci¨®n
Si el sondeo fuera sobre Europa como soluci¨®n a la crisis, los resultados ser¨ªan decepcionantes
Como usuarios de distintos servicios, se nos insta a rellenar cuestionarios de satisfacci¨®n sobre los mismos, contrastando las expectativas con la realidad. Si el sondeo fuera sobre el papel de Europa como soluci¨®n a los problemas de Espa?a durante la crisis, los resultados ser¨ªan decepcionantes. No pongo en cuesti¨®n la necesidad de la integraci¨®n europea y los beneficios que reporta pero, en el contexto de la crisis y tras los sacrificios realizados no se puede se?alar a un prop¨®sito com¨²n europeo como la soluci¨®n para remontar el vuelo. Europa se antoja un todo extra?o, en el que las pol¨ªticas monetarias y fiscales est¨¢n hoy m¨¢s condicionadas que nunca por un prop¨®sito de estabilidad pero no se sabe con certeza cu¨¢l es el proyecto m¨¢s all¨¢ de esa supuesta situaci¨®n de calma.
El BCE debe actuar si quiere evitar que la deflaci¨®n golpee a la UE
Al marcar las opciones de respuesta, la valoraci¨®n no ser¨ªa muy positiva a preguntas como: ?est¨¢ satisfecho con los objetivos y la cuant¨ªa del presupuesto europeo? ?Ha acompa?ado el tipo de cambio del euro los esfuerzos por ganar competitividad? ?Existe una pol¨ªtica comercial satisfactoria entre los estados miembros y con el exterior (enti¨¦ndase por ejemplo, Rusia)? ?Se est¨¢ haciendo todo lo posible por evitar que la deflaci¨®n se convierta en un riesgo considerable? Cierto es que la competencia en estas materias se reparte entre diversos actores pero la lentitud y el unilateralismo siguen siendo la nota dominante. Y los resultados son patentes.
Los ¨²ltimos d¨ªas han dejado un reguero de malos datos de crecimiento en pa¨ªses como Alemania, Francia o Italia. No sirve ya la socorrida ¡°excusa de los dos trimestres¡± que, aludiendo a la estacionalidad y a eventos imprevistos sugiere que hay que considerar al menos seis meses seguidos de evoluci¨®n del PIB para comprobar la verdadera situaci¨®n de coyuntura. Si se hace la media de los dos ¨²ltimos datos trimestrales, la conclusi¨®n sigue siendo la misma: Europa se para. Ser¨ªa absurdo pensar que esto no afectar¨¢ a una Espa?a que precisamente ahora muestra mayor capacidad de crecimiento. Desgraciadamente, se trata de un alumno aparentemente aplicado pero con dos grandes problemas de entrada. El m¨¢s importante, un abrumador desempleo. El m¨¢s triste, unos compa?eros de promoci¨®n que andan cada uno a la suya, algunos, utilizando un s¨ªmil, como pollo sin cabeza.
Lo que podemos aprender de Europa es que los que menos sufren son los que la lideran
La ca¨ªda del PIB en las econom¨ªas con mayor peso de la UE terminar¨¢ afectando al sector exterior espa?ol. Adem¨¢s, los ¨²ltimos datos (como el de producci¨®n industrial de junio) han sido peores de lo esperado. El turno sigue siendo para el de siempre, el Banco Central Europeo. Desde Fr¨¢ncfort se ha repetido una y otra vez que el BCE no puede sustituir a los gobiernos y que, si no hay reformas, los problemas volver¨¢n, aunque haya est¨ªmulos monetarios. Lo desgraciado es que, a¨²n siendo as¨ª, el BCE debe actuar si quiere evitar que la deflaci¨®n sea el s¨ªntoma de una Europa herida de muerte.
Para pa¨ªses como Espa?a, el riesgo es errar en las opciones. Completado el cuestionario y manifestada la insatisfacci¨®n, alternativas como abandonar la consolidaci¨®n fiscal ser¨ªan suicidas. Lo que podemos aprender de Europa es que los que menos sufren son los que la lideran. Para alcanzarles hay que reducir el paro, mejorar la educaci¨®n y formaci¨®n profesional, los incentivos al trabajo, a la inversi¨®n y a la investigaci¨®n. Tambi¨¦n hay que reconfigurar la administraci¨®n p¨²blica, o clarificar la pol¨ªtica energ¨¦tica. Son s¨®lo algunas de las (notables) tareas pendientes. Hacen falta a?os, constancia y responsabilidad. Emulando as¨ª a los que, como Alemania, tuvieron el coraje de reformar cuando podr¨ªan haberse detenido a presumir de que les iba mejor.
Santiago Carb¨® es catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Bangor Business School (Reino Unido) y de la Universidad de Granada, e investigador de Funcas.
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