La psicolog¨ªa positiva entra en el aula

?Sab¨ªa que las ¨¦lites ricas de los pa¨ªses desarrollados donde hay igualdad socioecon¨®mica viven entre cuatro y diez a?os m¨¢s de media que el resto de sus conciudadanos? Lo dice Juan Humberto Young, socio de Positive Organizational Design Ag (Podag) y uno de los pioneros en aplicar la psicolog¨ªa positiva a la estrategia organizativa. A su juicio, las emociones positivas tienen un efecto terap¨¦utico, pues al mantener el ritmo cardiaco, la salud de la persona no se resiente. ?Y qu¨¦ emoci¨®n es m¨¢s positiva que la felicidad?

"Todo el mundo cree que la felicidad es innata. Y no es as¨ª. Es una competencia y, por tanto, se puede aprender", sentencia Young, tambi¨¦n director acad¨¦mico del programa Executive Master in Positive Leadership and Strategy de IE Business School. ?C¨®mo? A su juicio, sencillamente realizando actividades repetitivas que eleven el grado de felicidad, algunas muy simples, como el agradecimiento a los dem¨¢s o como el repaso consciente a las cosas buenas que cada uno tiene en su vida. T¨¦cnicas f¨¢ciles que tambi¨¦n son aplicables al mundo de la empresa, pues, como dice este consultor estrat¨¦gico, la din¨¢mica del negocio se basa en las relaciones humanas. "La psicolog¨ªa positiva quiere llevar las emociones positivas a la empresa. Pues el gran descubrimiento cient¨ªfico es que estas emociones se convierten en un nutriente, en el abono a partir del cual se genera creatividad, que es lo que todas las compa?¨ªas quieren".

"Esta disciplina trata de descubrir la serie innata de fortalezas que tiene cada persona y que est¨¢n dormidas", explica Young. "Al sacarlas a la luz, los empleados aumentan su productividad, trabajan de forma m¨¢s aut¨®noma, y ello genera confianza en las organizaciones", contin¨²a el director del m¨¢ster de IE, quien pone como ejemplo de organizaciones que han puesto en pr¨¢ctica estas teor¨ªas a Google, Nestl¨¦ y Facebook, entre otras.

Las estad¨ªsticas dan la raz¨®n a este experto y a los responsables de IE Business School, que decidieron lanzar este programa innovador para ejecutivos con experiencia y mediante el que se pretende cambiar la mentalidad y los h¨¢bitos de los dirigentes para crear las compa?¨ªas del futuro, en palabras del decano de la escuela de negocios, Santiago ??iguez. De hecho, seg¨²n la Universidad de Wisconsin, una mente positiva es un 31% m¨¢s productiva que una negativa o estresada, y tambi¨¦n que una neutral. Hay m¨¢s, Harvard ha demostrado que los empleados satisfechos elevan un 37% sus ventas sobre el resto de la plantilla. Y cuando est¨¢n contentos con su trabajo, los d¨ªas de baja por enfermedad descienden m¨¢s de la mitad.

Y tambi¨¦n los alumnos directivos que han cursado el m¨¢ster de liderazgo positivo, por el nada desde?able precio de 46.200 euros, avalan su utilidad. "Se trata del ¨²nico programa de este tipo que existe hasta ahora. Pues en otras escuelas de negocios la psicolog¨ªa positiva se toca en algunos m¨®dulos, pero en ninguna se ofrece un programa espec¨ªfico de 13 meses de duraci¨®n como este", indica Naira P¨¦rez-Alonso, responsable de admisiones de dicho m¨¢ster.

Roberto Zurdo, manager de servicios avanzados de la Regi¨®n Mediterr¨¢nea de Cisco, es uno de estos alumnos. Como la mayor¨ªa de los 22 que conforman la clase, "buscaba una formaci¨®n diferente porque la mayor¨ªa de las empresas siguen los mismos patrones y, por tanto, llegan a los mismos resultados. Como el mundo est¨¢ cambiando, creo que es necesario que nos adaptemos a esos cambios".

Tras realizar el m¨¢ster de liderazgo positivo de IE, se est¨¢ replanteando muchas cosas, reconoce. Su mayor aprendizaje: "Ver el mundo de forma neutral. Sin prejuzgar. Ha sido como una revelaci¨®n tras la cual estoy revisando las relaciones con mi equipo", asegura Zurdo. Artur Aguirre, presidente y consejero delegado de la consultor¨ªa portuguesa Fairmont, apoya sus conclusiones: "El programa me ha aportado una experiencia de autoconocimiento extraordinaria. Me he quedado sorprendido de lo poco que me conoc¨ªa. Y he aprendido a elegir los procesos mentales que quiero usar en cada situaci¨®n. Si empezamos a liderar nuestra forma de pensar, cometeremos muchos menos errores, y si esto lo trasladamos a las organizaciones, el cambio ser¨¢ autom¨¢tico".

Y uno de los grandes errores de los que se ha dado cuenta Aguirre a trav¨¦s de este curso es que hab¨ªa "perdido durante mucho tiempo la capacidad de absorber el enorme talento" de sus empleados "por la l¨®gica del ego". O de que las negociaciones con sus nuevos socios de Mozambique se hab¨ªan bloqueado por defender el punto de vista portugu¨¦s y olvidar el africano. "Querer hacer las cosas a nuestra manera genera ineficacias. Ahora vemos que hay una realidad diferente, la comprendemos, y se ha desbloqueado la negociaci¨®n", explica el presidente de Fairmont.

"Llevo trabajando 10 a?os en Unicef y no sab¨ªa qu¨¦ hacer con mi carrera profesional ni con mi vida personal, estresada por la falta de tiempo como madre de tres ni?os y por mi af¨¢n de controlarlo todo", cuenta Amal Obeid, responsable del Programa para la Adolescencia en Unicef L¨ªbano, que, tras cursar el programa de liderazgo positivo, se reconoce m¨¢s calmada, sin miedo y capaz de aceptar unas cr¨ªticas que antes minaban su car¨¢cter. Ha aprendido, dice, que no tiene por qu¨¦ controlarlo todo y ya sabe qu¨¦ va a hacer con su porvenir. Para empezar, no es ella la ¨²nica que practica la meditaci¨®n aprendida; sus tres peque?os v¨¢stagos ya est¨¢n aprendiendo.?