Rosell tiende la mano a Garamendi
El reelegido presidente de la CEOE ofrecer¨¢ el consenso a su contrincante en las elecciones y nombrar¨¢ vicepresidente primero al l¨ªder madrile?o, Juan Pablo L¨¢zaro
Dec¨ªa un destacado dirigente empresarial el pasado mi¨¦rcoles tras las elecciones a la presidencia de la CEOE que ¡°aqu¨ª se est¨¢ de presidente, no se es presidente¡±. En la casa de los empresarios ha llegado la hora de la reflexi¨®n tras los dos meses de campa?a electoral y esa frase es un buen punto de partida ante la expectaci¨®n, dentro y fuera, por la deriva que decida el ganador de la contienda, Juan Rosell, para su segundo y ¨²ltimo mandato.
Ser¨¢n clave para descubrirlo los movimientos que haga. No tendr¨¢ que hacer ning¨²n gesto nombrando a Antonio Garamendi vicepresidente como hizo en las paasadas elecciones con Santiago Herrero , ya que el dirigente vasco ya ocupa una como presidnete de Cepyme. Pero s¨ª ser¨¢n claves los nombramientos de hasta cuatro vicepresidentes que le acompa?en, el de los responsables de las comisiones y la formaci¨®n de la comisi¨®n permanente en la que piensa incorporar expertos.
Se da por descontado que dos de las vicepresidencias las ocupar¨¢n los presidentes de las patronales madrile?a y catalana, Juan Pablo L¨¢zaro y Joaquim Gay de Montell¨¤, por el peso de ambas organizaciones. L¨¢zaro asumi¨® la presidencia de la madrile?a CEIM el d¨ªa siguiente de las elecciones de CEOE, despu¨¦s de que Arturo Fern¨¢ndez cumpliera su compromiso de dimitir. Seg¨²n fuentes del entorno opositor, L¨¢zaro, que estuvo presente en la cena en la que se fragu¨® la candidatura de Garamendi en el Club Financiero G¨¦nova que preside, habr¨ªa pactado con Rosell mantener la vicepresidencia primera que ten¨ªa Fern¨¢ndez a cambio de inclinar el voto de los 45 representantes de CEIM para ¨¦l. El dirigente de la catalana Foment, por su parte, es un cercano colaborador de Rosell, al que sustituy¨® cuando decidi¨® saltar a Madrid.
Sobre las otras dos posibles vicepresidencias caben dudas e, incluso, pueden quedar sin cubrir. Es posible la continuidad de Pilar Gonz¨¢lez de Frutos, presidenta de la patronal de seguros, Unespa, y que fue contactada por el grupo contestatario para enfrentarse a Rosell. Pese a ello, este est¨¢ contento con la labor que ha hecho como presidenta de la coimisi¨®n fiscal y cuenta con el apoyo de grandes grupos.
Lo que est¨¢ claro es que no estar¨¢n ni Javier Ferrer (Confemetal) ni Juan Lazcano (Construcci¨®n), a los que Rosell les adelant¨® que no seguir¨ªan si ganaba y que fueron los impulsores de la candidatura alternativa. A ellos se atribuye el informe al que se refiri¨® Rosell en su duro discurso de investidura. Un discurso, por cierto, que llevaba bien meditado y del que no cambi¨® ni una coma.
A Garamendi los resultados del mi¨¦rcoles le han dejado en muy buen lugar y como una opci¨®n clara de futuro. El dirigente bilba¨ªno acept¨® ser el ariete del grupo que quiso descabalgar a Rosell, descontento por la posici¨®n adoptada por este en materias como la formaci¨®n, las c¨¢maras de comercio y las mutuas, que a su juicio quitan poder a la patronal, y las medidas de control interno. Ese enfado se reflej¨® en un respaldo de m¨¢s del 47% de los votos emitidos, que ofreci¨® la imagen de una patronal partida en dos.
Ese es el primer reto con que se encuentra Rosell: recobrar la unidad de acci¨®n. El l¨ªder patronal se propone consensuar con Garamendi, al que no incluye en ese ataque, y L¨¢zaro la estrategia. Esta pasa, adem¨¢s, por culminar la reforma interna que ha ido con cuentagotas y transmitir al resto de las organziaciones las actuaciones realizadas como el C¨®digo ?tico, la limitaci¨®n de mandatos y las auditor¨ªas internas; incorporar empresarios a los cargos directivos y no dejarlo ¨²nicamente en profesionales que act¨²an m¨¢s como funcionarios en defensa de sus puestos de trabajo que de las empresas; reducir la dependencia de subvenciones p¨²blicas, que ya ha iniciado con la formaci¨®n, y participar en las reformas.
Garamendi tiene elementos suficientes para poner exigencias sobre la mesa y satisfacer a sus impulsores; pero se encuentra ante un arma de doble filo dif¨ªcil de gestionar. Sabe que el grupo que le respald¨® defiende otras posturas que devuelven al pasado; pero ¨¦l tiene la oportunidad de que las promesas de Rosell de hacer una patronal moderna y que act¨²e como lobby no queden en saco roto. Seg¨²n fuentes patronales, tiene m¨¢s puntos en com¨²n que lo contrario. Se junta, adem¨¢s del esp¨ªritu constructivo y que el momento institucional es el apropiado para abordar ese cambio. El pacto salarial, pr¨®xima estaci¨®n
Tras el acuerdo firmado con el Gobierno y los sindicatos la pasada semana sobre la reinserci¨®n laboral de los parados de larga duraci¨®n sin prestaci¨®n, en el que Juan Rosell y Antonio Garamendi, como presidentes de CEOE y Cepyme, mostraron una perfecta sinton¨ªa, a los dirigentes patronales se les presenta ahora la oportunidad de firmar otro acuerdo importante, el salarial. Y ya desde otra dimensi¨®n, aunque los cargos sean los mismos. Uno de los objetivos inmediatos que deben abordar es la negociaci¨®n salarial, en la que los sindictaos piden recuperar poder adquisitivo perdido. El acuerdo est¨¢ muy avanzado, seg¨²n las partes. La intenci¨®n es hacerlo, incluso, en enero.
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