Los sindicatos imponen sus reglas en la privatizaci¨®n de TAP
El Gobierno portugu¨¦s aprueba la venta de la compa?¨ªa a¨¦rea, a la que opta la espa?ola Globalia
El Gobierno de Portugal ha aprobado, por segunda vez, privatizar la l¨ªnea a¨¦rea de bandera TAP, aunque en esta ocasi¨®n el propietario no podr¨¢ plantear despidos colectivos ni externalizar servicios de mantenimiento.
En 2012, el Gobierno intent¨® privatizar el 100% de la compa?¨ªa, pero solo se present¨® una candidatura, la del colombiano G¨¦rman Efromovich, que fue rechazada. Seg¨²n el secretario de Transportes, S¨¦rgio Monteiro, ahora las circunstancias son mejores que entonces. ¡°El sector a¨¦reo est¨¢ mejor; el pa¨ªs, tambi¨¦n, con cifras r¨¦cord de turistas y pasajeros, y tambi¨¦n la misma compa?¨ªa ha presentado un buen ejercicio¡±.
Aunque no quiso dar nombres, al menos hay cuatro ofertas, propagadas por los mismos interesados: el consorcio liderado por Miguel Pais do Amaral -presidente de Mediacapital, propiedad de PRISA-, el grupo espa?ol Globalia, la compa?¨ªa a¨¦rea de Brasil Azul y Efromovich, due?o de Avianca, entre otros negocios. ¡°Los interesados son heterog¨¦neos¡±, dijo Monteiro, ¡°tanto por los sectores que representan como los proyectos que tienen para el futuro de TAP, lo que indica la riqueza de ideas para mejorar la compa?¨ªa¡±.
El Gobierno, seg¨²n Monteiro, no aspira a hacer caja con la venta, que de momento solo ser¨¢ del 66% de la compa?¨ªa -el resto se privatizar¨¢ en un m¨¢ximo de dos a?os. ¡°La intenci¨®n es asegurar el futuro de TAP, por lo que la inyecci¨®n de capital o de activos ser¨¢ un elemento fundamental a la hora de adjudicaci¨®n¡±.
Monteiro se neg¨® a dar una cifra aproximadad de venta, a la espera de la evaluaci¨®n de las auditoras de Deloitte y PwH, "que acabar¨¢n en estas semanas, pero que no se har¨¢n p¨²blicas".
Los candidatos a la compra se van a encontrar con un pacto firmado por el Gobierno y nueve sindicatos -aprobado en Consejo de Ministros- por el que se impide al adjudicatario que haga despidos colectivos mientras haya capital p¨²blico en la empresa, y le obliga a respetar los actuales derechos laborales, seguros y pensiones. Tampoco podr¨¢n externalizar servicios de aviaci¨®n y mantenimiento. Monteiro no cree que este acuerdo perjudique la venta o desvalorice la empresa, ¡°pues se garantiza la paz social¡±. Durante la Navidad, los sindicatos convocaron cinco d¨ªas de huelga, que solo desconvocaron una vez conseguido el acuerdo, que ahora se ha hecho p¨²blico. Este acuerdo solo se aplica a los asociados a esos sindicatos, el 30% del total de TAP.
Todos los partidos de la oposici¨®n se han mostrado contrarios a la privatizaci¨®n, al igual que los trabajadores de la compa?¨ªa, que han firmado una carta dirigida a los parlamentarios. El Partido Socialista critica que el proceso implique al futuro Gobierno, que saldr¨¢ de las urnas en el pr¨®ximo mes de noviembre.
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