Fiesta busca otra oportunidad
El administrador concursal inicia la venta de la popular empresa de caramelos
Volver a los pupitres de EGB; a los tiempos de COU; a elegir entre Ciencias o Letras. ?Mecano o Spandau Ballet? Viajar a los a?os ochenta. Volver a ser (casi) un ni?o. Para una generaci¨®n de espa?oles ese es el sabor de un chupa-chups Kojak (aquel popular detective televisivo) o de las inacabables piruletas Fiesta en forma de coraz¨®n.
Pero la memoria, a veces, hiere y Caramelos Fiesta, la empresa fabricante de los famosos Kojak y los dulzones Lolipop, que este a?o celebra su 50? aniversario, ha estado contra las cuerdas. En 2014 presentaba su proceso de liquidaci¨®n tras solicitar el concurso de acreedores. Los n¨²meros no sal¨ªan. La crisis se llev¨® por delante la compra de chuches, un acto, en principio, de impulso, y la pol¨ªtica de exportaciones patin¨®. Hab¨ªa mercados, como Reino Unido o Estados Unidos, duros y competitivos, donde incluso se vend¨ªa por debajo de coste. Para colmo, el lastre de una deuda excesiva. Los bancos (Fortis Bank, Sabadell, Popular y Catalunya Bank) se inquietaban.
La consecuencia de esta tormenta perfecta es que la administraci¨®n concursal de Fiesta ha abierto un proceso de venta de la empresa cuya estructura parece sacada de uno de esos manuales de finanzas que se estudian en una escuela de negocios. Quiz¨¢ algo tenga que ver que Francisco Vera, socio director de Data Legal y administrador concursal, haya estudiado en la London Business School (LBS). Por eso la enajenaci¨®n de Fiesta se divide en dos. De un lado se vende el negocio principal, la unidad de caramelos (marca y red de ventas), que est¨¢ valorada en 12 millones de euros. Y, por otro, se desprenden del activo inmobiliario. O sea, las instalaciones (ocupan una parcela de 26.800 metros cuadrados) que tienen en Alcal¨¢ de Henares (Madrid). Estas se tasan en 6,7 millones. La separaci¨®n y venta de ambos activos tiene una condici¨®n. Un contrato de alquiler del terreno por cinco a?os prorrogables hasta diez y un precio b¨¢sico de 35.000 euros mensuales.
El precio m¨ªnimo de la oferta del futuro comprador del negocio de caramelos ser¨¢ de cinco veces el EBITDA
Estas son las cartas con las que se abre la partida. El precio m¨ªnimo de la oferta del futuro comprador para el negocio de caramelos ser¨¢ de cinco veces la previsi¨®n del resultado bruto de explotaci¨®n (Ebitda) de 2015 (durante 2014 fue de 1,2 millones). Aunque otra cosa es el valor final de venta. "Espero que est¨¦ entre seis y nueve veces Ebitda", augura Vera.
Este abogado, experto en finanzas, ha repetido incesantemente que "la venta no ser¨¢ a precio de ganga" y que se abstengan todos los "subasteros profesionales". Es decir, empresas especializadas en adquirir compa?¨ªas en dificultades y darles el pase en un abrir y cerrar de ojos a otro comprador. Pura especulaci¨®n. Esas que no llamen a la puerta. Por ahora m¨¢s de 50 firmas han mostrado un inter¨¦s serio por Fiesta. Desde fondos de capital riesgo for¨¢neos, respaldados por algunas de las big four (KPMG, PwC, Deloitte o Ernst &Young), hasta compa?¨ªas nacionales e internacionales del sector de los dulces. Al fin y al cabo casi todos se conocen, pues es un mundo muy concentrado con pocos grandes jugadores.
Como se ve hay inter¨¦s en Fiesta, porque no todo es amargo. La marca tiene una penetraci¨®n intensa en Espa?a, con m¨¢s de 40.000 puntos de venta y, sobre todo, un dividendo sentimental y afectivo que llega a la infancia de bastantes de quienes fueron ni?os en los setenta y ochenta. "Los inversores saben que la compa?¨ªa posee mucho recorrido", apunta Vera. Alguien, quiz¨¢, deber¨ªa explicarles a los candidatos for¨¢neos qu¨¦ representan Kojak, Fresquito, Lolipop, Piruleta o Megatorcida en la memoria dulce espa?ola. O aquellas gominolas en forma de roedor y lombrices lanzadas al rebufo de la serie de extraterrestres V. Fiesta las vend¨ªa como "comida para visitantes".
Pero la topograf¨ªa afectiva casa mal con la realidad de los n¨²meros. Para buscar la viabilidad de la empresa se acometi¨® un plan de reestructuraci¨®n, el cual incluy¨® un expediente de regulaci¨®n de empleo (ERE) que prescindi¨® de 16 trabajadores (la mayor¨ªa del ¨¢rea internacional) y rebaj¨® la plantilla a 124 personas. Todas aceptaron una bajada del 9% del complemento salarial y la p¨¦rdida del transporte colectivo. "Con estos sacrificios la compa?¨ªa sigue viva, operando con normalidad y no hay ning¨²n riesgo de cierre", refrenda el administrador concursal, quien regatea algunos rumores en sentido contrario. "Fiesta tiene otros cincuenta a?os, y m¨¢s, de futuro", sostiene.
Sin embargo, lograrlo tendr¨¢ un poco de hom¨¦rico. El administrador concursal ha trazado una hoja de ruta hacia la viabilidad de Caramelos Fiesta distinta a lo com¨²n. La venta se concretar¨¢ a trav¨¦s de una aplicaci¨®n en la web de Data Legal. All¨ª deber¨¢n presentar los compradores sus ofertas. "Es un sistema novedoso, nunca se hab¨ªa usado en un proceso concursal de este tipo, y ning¨²n candidato sale favorecido porque ni siquiera nosotros podemos conocer los n¨²meros que suben a la Red", detalla Vera. "De esta forma aumenta la transparencia y la concurrencia, que es el camino para obtener el mejor precio".
En junio un notario identificar¨¢ las cinco propuestas m¨¢s altas, y de entre ellos la administraci¨®n decidir¨¢ un comprador
Esa ruta pasar¨¢ por varios estadios. El plan de liquidaci¨®n se cerrar¨¢ a principios de marzo, en mayo deber¨ªan estar formalizadas las ofertas de los inversores que quieran comprar y en junio un notario identificar¨¢ las cinco propuestas m¨¢s altas, y sobre esos finalistas la administraci¨®n concursal decidir¨¢ un comprador. Algo que comunicar¨¢ al Juzgado de lo Mercantil n¨²mero 4 de Madrid, quien se encarga de la liquidaci¨®n. En julio, Fiesta tendr¨¢ nuevo due?o.
En ese momento, la empresa que fundara en Espa?a en 1965 Jos¨¦ ?ngel Mayoral Ortiz, junto al director de Ponce Candy Industries, una compa?¨ªa puertorrique?a cuyo origen nos lleva a los a?os cuarenta del siglo pasado, sentir¨¢ una vida nueva. Sin embargo, para que sea larga y pr¨®spera la administraci¨®n concursal est¨¢ obligada a escoger bien a qui¨¦n vende Caramelos Fiesta. "Debe ser alguien", reflexiona Francisco Vera, "solvente desde un punto de vista financiero y que respete las principales obligaciones de la firma (contratos de la plantilla, acuerdos comerciales y de licencias y pactos financieros)".
Un encaje de bolillos que piensan conseguir ya que ¡ªasegura la administraci¨®n concursal¡ª los "n¨²meros est¨¢n respondiendo". El a?o pasado factur¨® 18,8 millones de euros. Un 4,7% menos que en 2013. Esta ca¨ªda se justifica porque Fiesta decidi¨® marcharse de algunos mercados internacionales donde perd¨ªa dinero. Pero como contrapartida mejor¨® su rentabilidad, esto es, su margen bruto, un 6%. Y si durante 2013 se registraron p¨¦rdidas (262.000 euros), en 2014 se transformaron en ganancias (1,2 millones de euros). Con esta contabilidad, los administradores esperan que pronto la empresa, como el Par¨ªs de Hemingway, sea, de verdad, una fiesta.
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