?Abarrotecapitalismo!
Tres emprendedores con sello de Harvard impulsan tienditas de barrio en M¨¦xico Son clave en la econom¨ªa, pero poco competitivas
En un barrio de M¨¦xico DF como este, donde abundan los ¡°deshuesaderos¡± de coches, donde te dicen camina por esta calle ¡°pero nunca por la paralela¡±, lo primero que deben hacer dos franceses es ganarse la confianza de la gente, y la confianza no viene sin chanza. ¡°Aaaaaay, ?te vas a echar a los dos g¨¹eros [rubios] o nom¨¢s s¨®lo a uno?¡±, se escucha cuando la tendera Lourdes R¨ªos posa para la foto con Thomas Ricolfi y Nicolas Carayon. El autor de la groser¨ªa, el carnicero del puesto de enfrente, tras su mostrador con patas de cerdo frescas, chicharrones prensados e h¨ªgados de res, sonr¨ªe con toda la boca, llenando el espacio con el brillo de su corona de empastes met¨¢licos.
A ella le da la risa; aguda, ruidosa, expandida.
Es una de los 20 due?os de tiendas de barrio (abarrotes, les llaman en M¨¦xico), a los que los franceses Ricolfi y Carayon, y el mexicano Rodrigo S¨¢nchez, j¨®venes socios del proyecto Tenoli, dan asesor¨ªa para manejar sus negocios e incluso sus necesidades familiares. La se?ora R¨ªos, 48 a?os, tres hijos, viuda hace siete meses, dice: ¡°A m¨ª me tienen que ayudar a c¨®mo hacerle para dar de baja las tarjetas de mi marido: ten¨ªa cinco con cinco bancos diferentes¡±.
Los tres empresarios consideran que las tiendas tradicionales, que dan un servicio de cercan¨ªa valioso y son aglutinadoras de vida social, no tienen ¡°herramientas de productividad¡± y est¨¢n desapareciendo por la competencia de las grandes superficies y las cadenas 24 horas. ¡°Por cada Oxxo que abre en una esquina, cierran cinco tienditas¡±, afirma Ricolfi, serio, ojos claros, cuya visi¨®n empresarial comenz¨® lejos de aqu¨ª, en un lugar m¨¢s verde, menos seco, sin chicharrones prensados, donde puedes caminar por esta calle y tambi¨¦n por la paralela. En Boston, en la universidad de Harvard.
¡°Por cada Oxxo que abre en una esquina, cierran cinco tienditas¡±, afirma Thomas Ricolfi
S¨¢nchez y ¨¦l son los impulsores originales. Eran compa?eros de piso, becados de una maestr¨ªa de Administraci¨®n de dos a?os cuya matr¨ªcula anual cuesta 50.000 d¨®lares. Es chocante compararlo con los 65 d¨®lares de renta mensual que les cuesta el centro de atenci¨®n que tienen en el mercado F¨¦lix Cuevas de Iztapalapa: con dos a?os de matr¨ªcula Ivy League podr¨ªan alquilar el modesto espacio abierto desde el que opera Tenoli ¨Csituado entre los puestos Reparadora de zapatitos, Frutas y verduras y Papeler¨ªa y novedades¨C hasta el a?o 2143.
El d¨²o universitario desembarc¨® en Iztapalapa para establecer su plan en el verano del a?o pasado, y poco despu¨¦s se les uni¨® Carayon, un amigo de infancia de Ricolfi que estaba trabajando en Alemania para una marca de t¨¦.
Actualmente est¨¢n desarrollando su plan piloto con 20 tiendas pero aspiran a llegar, a¨²n en 2015, a estar colaborando con 300. ?Y cu¨¢l es el negocio de ayudarlas? La parte comercial que proyecta Tenoli es dar consultor¨ªa a grandes firmas de alimentos para distribuir con m¨¢s eficacia sus productos en la laber¨ªntica dimensi¨®n de los negocios de barrio, cuyo control se les escapa y que, sin embargo, suponen su gran n¨²cleo de mercado. Ricolfi afirma que el 60% de las ventas de Coca-Cola en M¨¦xico se hacen en tienditas como la de Lourdes R¨ªos. Tenoli le propone a las firmas ser su toma de tierra directa en los barrios. ¡°Los m¨¢nager de Danone no est¨¢n aqu¨ª¡±, ejemplifica el franc¨¦s. ¡°Nosotros s¨ª¡±.
En el puesto de Tenoli en el mercado, ocupado antes por una barbacoa de tacos, tienen mapas ampliados de Google donde van poniendo chinchetas en los abarrotes con los que van colaborando. La expansi¨®n de este ensayo embrionario de ¡®abarrotecapitalismo¡¯ con conciencia social ha comenzado. ¡°Pero nosotros necesitamos r¨¢pido m¨¢s gente en las tiendas¡±, dice el pollero Carlos Hern¨¢ndez, ¡°porque estamos ya medio muertones¡±.
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