La hosteler¨ªa espa?ola sube su apuesta por Cuba
La docena de cadenas espa?olas en la isla controlan el 40% de las plazas hoteleras Otras compa?¨ªas tur¨ªsticas preparan el desembarco
El ¨²ltimo para¨ªso perdido por Espa?a en 1898 se niega a dejar de ser importante para la piel de toro. El anuncio del levantamiento del embargo de Estados Unidos a Cuba est¨¢ provocando un sinf¨ªn de movimientos entre los empresarios tur¨ªsticos nacionales que, mientras el desbloqueo se hace efectivo legalmente, quieren tomar posiciones en un mercado en el que son l¨ªderes para consolidar ese papel antes de que la competencia norteamericana despliegue su poder¨ªo.
A los empresarios espa?oles que invirtieron en la isla y permanecieron en ella pese a las amenazas de sanciones del Gobierno estadounidense se les ha anunciado un trato preferente por parte de las autoridades cubanas que no quieren desaprovechar. Son fundamentalmente cadenas hoteleras, 12 ense?as espa?olas que controlan el 40% de las 61.500 plazas hoteleras del pa¨ªs y el 90% de las de cuatro y cinco estrellas, es decir, son mayoritarias. Junto a ellas, otras compa?¨ªas tur¨ªsticas nacionales que no est¨¢n presentes todav¨ªa, quieren ser las primeras en llegar.
¡°El inicio del final del bloqueo estadounidense abre grand¨ªsimas oportunidades para el desarrollo de la econom¨ªa de Cuba y para las empresas espa?olas, que est¨¢n muy bien posicionadas. Nosotros queremos ser los primeros en enlazar Estados Unidos y Cuba por v¨ªa mar¨ªtima. Tenemos un barco preparado y hemos pedido licencia de transporte a Estados Unidos y a Cuba. Queremos empezar cuanto antes¡±, afirma Aldolfo Utor, presidente de Bale¨¤ria. Su compa?¨ªa, dice, est¨¢ preparada para transportar desde ahora mismo a unos 900 pasajeros diarios, ¡°asumiendo que en los momentos iniciales los viajes sean deficitarios¡±, entre otras cosas porque el transporte de viajeros a¨²n est¨¢ sometido a restricciones.
La declaraci¨®n de principios de la naviera alicantina, que ya trabaja en EE UU y el Caribe, es un claro reflejo del inter¨¦s que existe por invertir en Cuba, donde se prev¨¦ que m¨¢s de un mill¨®n de visitantes lleguen desde la primera potencia mundial cuando el desbloqueo sea realidad. Un mill¨®n de turistas no son moco de pavo en un archipi¨¦lago que recibi¨® el a?o pasado a tres millones, su cifra r¨¦cord.
El pa¨ªs no est¨¢ preparado para hacerse cargo de esta ingente cantidad de visitantes y ah¨ª es donde las cadenas hoteleras espa?olas juegan una gran baza. Sobre todo la compa?¨ªa dominante, Meli¨¢ Hotels International, todav¨ªa Sol Meli¨¢ en Cuba, donde lleva 25 a?os y cuenta con 27 establecimientos y 13.000 habitaciones, el 21% del total. La compa?¨ªa de la familia Escarrer proyecta desarrollar tres hoteles con 2.000 habitaciones nuevas en Cuba, sujetas al cat¨¢logo de inversiones fijado por el Ejecutivo de la isla, que prev¨¦ 24.000 plazas m¨¢s hasta el a?o 2020, seg¨²n explica el subdirector general de Sol Meli¨¢ en Cuba, Francisco Camps. Pero el anuncio del deshielo de las relaciones comerciales con Estados Unidos ha provocado que el gran inter¨¦s de los Escarrer por el pa¨ªs gane enteros. Meli¨¢ quiere llevar a La Habana, donde cuenta con tres establecimientos, sus marcas m¨¢s lujosas: Gran Meli¨¢, ME e Inside. Y ya ha encontrado los emplazamientos para ello y ha realizado la correspondiente solicitud al Gobierno de Ra¨²l Castro. Nuestra ventaja es que llevamos 25 a?os en el pa¨ªs y que tenemos firmados contratos para llegar a 30 hoteles en 2018¡±, asegura Camps.
Meli¨¢ es la cadena espa?ola m¨¢s potente de Cuba, pero no la ¨²nica. Iberostar cuenta con 10 hoteles y varios en proyecto, Blau Hotels con cuatro, Roc Hotels con tres, H10 con dos, los mismos de que disponen Globalia, Barcel¨® y Blue Bay, en tanto que NH, Husa, Hotusa y Valent¨ª tienen uno. ¡°Pr¨¢cticamente todas las cadenas espa?olas est¨¢n licitando proyectos actualmente¡±, se?ala Guillermo Kessler, consejero comercial de la Embajada de Espa?a en Cuba. Menos Riu y Occidental, que se han retirado recientemente del pa¨ªs.
Justo al contrario que Iberia, que ha vuelto a volar desde Madrid a La Habana, haciendo la competencia a Air Europa, que tiene claro que el deshielo de las relaciones con Estados Unidos va a ser un acicate importante para el crecimiento de la inversi¨®n espa?ola en Cuba. ¡°Es una noticia important¨ªsima¡±, afirma Juan Jos¨¦ Hidalgo, presidente de Globalia, quien prev¨¦ un aumento de los viajes superior a los 100.000 pasajeros del que se beneficiar¨¢ su l¨ªnea a¨¦rea (hoy transporta a unos 300.000 turistas al a?o, indica). Adem¨¢s, Globalia se acaba de adjudicar otro hotel en Varadero hace apenas unos d¨ªas, que supondr¨¢ una ampliaci¨®n de los dos actuales. Pero Hidalgo tiene claro que el pa¨ªs necesita m¨¢s habitaciones, especialmente en la capital, y que su empresa va a participar en su ampliaci¨®n y remodelaci¨®n. ¡°Hay que trabajar al cliente americano. Aunque todav¨ªa es pronto. Esperaremos a que el acuerdo est¨¦ cerrado y sepamos qu¨¦ se va a hacer con los suelos y la reconstrucci¨®n de La Habana¡±, mantiene el presidente de Globalia, para quien habr¨ªa que conseguir que se puedan hacer inversiones privadas tambi¨¦n en las viviendas cubanas.
Unas casas que Barcel¨® Viajes podr¨ªa alquilar para que sus clientes pernoctasen, si estos se lo pidiesen (al estilo de la americana Airbnb, que est¨¢ presente en la isla desde el pasado abril y ha duplicado desde entonces la oferta de casas particulares destinadas a estadounidenses, hasta 2.000). Lo que s¨ª tiene claro el grupo de la familia Barcel¨® es que su proyecto hotelero en Santa Luc¨ªa arrancar¨¢ el a?o pr¨®ximo. Ser¨¢ un complejo de 1.600 habitaciones y que requerir¨¢ una inversi¨®n de en torno a 150 millones de d¨®lares, estima el director de Barcel¨® Hoteles en Cuba, Juan Antonio Montes, quien se?ala que la cadena busca adem¨¢s nuevos emplazamientos en La Habana, ¡°que va a tener un desarrollo tremendo¡±, tras el acuerdo de EE UU y Cuba, as¨ª como en Varadero, donde est¨¢n sus otros dos establecimientos.
Juan Jos¨¦ Hidalgo espera que nuevas cadenas hoteleras espa?olas desembarquen en la isla. Lo mismo que Jos¨¦ Luis Zoreda, director general de la alianza tur¨ªstica Exceltur, ¡°se va abrir un mercado importante para las empresas nacionales, que est¨¢n esperando a que se fijen las reglas del juego¡±.
Una vieja historia
Una larga relaci¨®n. Esa es la que tienen las cadenas hoteleras espa?olas (12 de las 16 extranjeras presentes en la isla) con las estatales Cubanac¨¢n, Gran Caribe y Gaviota desde 1988, cuando se crearon las primeras asociaciones econ¨®micas internacionales en Cuba, inauguradas por el sector tur¨ªstico. Estas conexiones se estructuraron en torno a empresas mixtas, pero posteriormente se han limitado a acuerdos de gesti¨®n sobre los hoteles propiedad de las caribe?as, que es la opci¨®n que tambi¨¦n han preferido las nacionales en su expansi¨®n territorial en los ¨²ltimos a?os, explica el consejero comercial de Espa?a en Cuba, Guillermo Kessler.
De los 27 hoteles de Meli¨¢, solo cuatro pertenecen a empresas mixtas. Todos los de Globalia est¨¢n sujetos a contratos de gesti¨®n y Barcel¨® estrenar¨¢ con su nuevo proyecto el sistema de asociaci¨®n al 50% con Gran Caribe, indica su responsable en Cuba, Juan Antonio Montes, quien a?ade que el 90% de las 24.000 habitaciones nuevas previstas por el Gobierno las administrar¨¢ Gaviota, que trabaja solo con contratos de gesti¨®n, al contrario que las otras dos, que usan ambas f¨®rmulas.
¡°Lo normal es que las autoridades cubanas prefieran las empresas mixtas cuando se trata de desarrollar una zona nueva, como hicieron en su d¨ªa Varadero con Meli¨¢, Iberostar y Blau¡±, contin¨²a Montes.
La ventaja de las sociedades compartidas es la mayor estabilidad (se firman por 50 a?os), aunque requieren inversi¨®n, no como los contratos. Eso s¨ª, desde la nueva ley de inversi¨®n extranjera se permite a los gestores de los hoteles participar econ¨®micamente en su rehabilitaci¨®n, como est¨¢ haciendo la cadena suiza Kempinski en La Habana.
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