Decorar la casa, un proyecto de vida
La paleta de colores anticipa el final de la crisis sustituyendo los grises, beiges, blancos y tierra por tonos atrevidos y dorados
Agosto puede ser el momento para dar el primer paso: elegir el decorador con el que se sintonice por gusto, necesidades y presupuesto. Levantar un espl¨¦ndido spa en plena selva de Guinea Ecuatorial supone una factura al alcance de pocos, pero Isabel Avenda?o, gerente de GMproyecto, la empresa que lo hizo, mantiene que "el interiorismo no puede ser solo para un p¨²blico espec¨ªficamente alto. Que el cliente no tenga miedo y pida sin compromiso una propuesta".
Avenda?o que, adem¨¢s de decorar es fabricante, no es la ¨²nica que derriba barreras: "Si te arruinas echas primero al ch¨®fer y luego al decorador", ironiza Guille Garc¨ªa-Hoz, "pero no es cierto que el interiorista dispare el presupuesto. No siempre hacemos reformas integrales con m¨¢ximas calidades. Tambi¨¦n damos asesoramiento puntual por horas o nos ce?imos a una cocina. No hay proyecto peque?o".
Diego Rodr¨ªguez detecta un cambio en el perfil de quien se acerca al arquitecto de interiores. "Se ha conseguido que se entienda culturalmente una profesi¨®n que abarca desde el mundo del arte a la obra pura y dura. Requiere un estudio profundo de la forma de vida de la familia y una investigaci¨®n continuada ante tal diversidad de materiales. Cada obra es un reto distinto y requiere ajustarse al presupuesto. Puede lograrse el mismo efecto con telas que cuestan de 20 a 200 euros el metro cuadrado", explica.
Diego Rodr¨ªguez, Garc¨ªa-Hoz y Avenda?o han sido premiados en Casa Decor, un encuentro anual que marca tendencia y sigue la t¨®nica de lo que se denomina showroom: tiendas que exponen ambientes que Garc¨ªa-Hoz parte de que "un espacio est¨¢ bien hecho cuando en todos los sitios hacia los que mires sucede algo, al igual que en los jardines durante todo el a?o". Y opta por divertirse y ser rompedor: poner un jard¨ªn en el techo o quitarlo. Trabaja tambi¨¦n para empresas: un concepto, resumido en tres palabras que definen lo que tiene que comunicar cada local.
Manuel Espejo sorprendi¨® a sus colegas y al propio jurado de Casa Decor. Le dieron dos de los tres premios en 2015. Logr¨® crear atm¨®sfera de hogar en un espacio con nueve puertas, sin paredes. Gracias a eso le han salido proyectos como el After Polo, decorar toda la zona de copas del Santa Mar¨ªa Polo Club Sotogrande (C¨¢diz).
Define su profesi¨®n, el interiorismo, como asesoramiento profesional para decidir el ambiente de la casa. Anota que su primer acercamiento es a la arquitectura y al entorno "y cuando se trata de una rehabilitaci¨®n, hay que recuperar la esencia hist¨®rica del inmueble". Es el ¨²nico que cede y da una cantidad: 800 euros el metro cuadro la reforma integral en buenas calidades y a partir de 600 euros el metro cuadrado la decoraci¨®n. Le gusta dise?ar todo, incluidos los pomos de las puertas.
La interiorista Beatriz Silveira, tambi¨¦n premiada en una edici¨®n de Casa Decor, destaca que el cliente suele acercarse porque comparte su sensibilidad y "busca un estilo con glamour y que perdure. La empat¨ªa es una parte muy importante. No somos una empresa que quiere sacar rentabilidad. Hay una ilusi¨®n o proyecto de vida".
Silveira parte de que hay un decorador para cada estilo. La ventaja es que se definen como un gremio bien avenido. Un gremio que respalda y potencia los oficios artesanales: Garc¨ªa-Hoz experimenta en el Centro Cer¨¢mico de Talavera de la Reina (Toledo) y Rodr¨ªguez investiga conjuntamente con un ebanista desde hacer 35 a?os, por poner dos ejemplos. Ferias, revistas especializadas o generalistas, showrooms o sus p¨¢ginas web permiten elegir al interiorista m¨¢s af¨ªn y tambi¨¦n detectar los cambios de tendencias.
Espejo apunta a los verdes y turquesas para puertas, paredes, textiles, y elementos que pueden cambiarse cada dos a?os con una decoraci¨®n hecha para perdurar. Colores que definen sus colegas como ¨¢cidos e impactantes. "A la vista de un posible brote verde, vienen a sustituir los colores de la crisis que han sido los beiges, grises, tierra y blancos", explica Avenda?o.
Coinciden en la vuelta de los dorados, sin ostentaci¨®n, y destacan el bronce y el cobre. Silveira lo mezcla con materiales nobles: piedras naturales, m¨¢rmoles blancos y maderas naturales. Avenda?o destaca que se da una gran importancia a una cocina muy vanguardista.
En toda Europa, explica, manda el estilo italiano y las pautas las marcan Par¨ªs y Mil¨¢n. Dos o tres a?os despu¨¦s, lo adapta la industria y llega al gran p¨²blico. Salvo piezas de gran calidad, rechazan el abuso del estilo vintage, el mueble desvencijado y cada vez m¨¢s caro.
Para todos, lo que est¨¢ de moda es solo una referencia m¨¢s. Diego Rodr¨ªguez identifica las tendencias con pautas comerciales de los fabricantes. "El interiorista tiene que saber c¨®mo vive la familia, al margen de las modas". Alerta de que "si se sigue la tendencia pueden hacerse casas parecidas". Su receta: "trabajar de forma conjunta en el proyecto, ser muy sutil, respetuoso y bastante humilde. Es tan importante el que hace el yeso como el que pone la ¨²ltima obra de arte. Casi siempre se empieza con un proyecto y se termina con una gran amistad", dice.
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