¡°Los ricos tienen ahora m¨¢s sensibilidad social¡±
Juan Soto (Madrid, 1967) lleva en J. P. Morgan desde 1994. Licenciado en Derecho y Ciencias Empresariales por ICADE, dirige el departamento de banca privada de la entidad estadounidense. Entre sus clientes se encuentran algunas de las mayores fortunas espa?olas.
Pregunta. ?En qu¨¦ momento se encuentra el negocio de banca privada en Espa?a en general y el de J. P. Morgan en particular?
Respuesta. El negocio de banca privada atraviesa una fase positiva. Hay una serie de factores que contribuyen a que haya m¨¢s liquidez, lo que es bueno para la industria. Entre estos factores est¨¢ el mayor inter¨¦s de los inversores internacionales por entrar en Espa?a. Adem¨¢s, hay que tener en cuenta las inyecciones de liquidez del BCE para que fluya el cr¨¦dito, as¨ª como unos tipos de inter¨¦s en m¨ªnimos que abaratan el coste de financiaci¨®n. Por ¨²ltimo, las empresas espa?olas, tras un periodo de reestructuraci¨®n, son m¨¢s competitivas y eso les permite aumentar sus m¨¢rgenes operativos, a lo que hay que a?adir el impacto del tipo de cambio. Todos estos factores son buenos para nuestro negocio y notamos una mayor actividad.
P. ?C¨®mo est¨¢ afectando al sector los cambios en la regulaci¨®n?
R. Debemos ajustarnos a la nueva normativa que hay sobre la mesa. Con la denominada Mifid II [Directiva sobre Mercados de Instrumentos Financieros] desaparecer¨¢n en el medio plazo las retrocesiones [lo que recibe un asesor por recomendar un producto] para aquellos gestores que se califiquen de independientes. Eso estrecha m¨¢rgenes y har¨¢ que los clientes tengan que pagar por recibir asesoramiento. Ser¨¢ un cambio importante.
P. ?Cree que los clientes aceptar¨¢n pagar por un servicio que hasta ahora ten¨ªan gratis?
R. Los clientes est¨¢n dispuestos a pagar siempre que se demuestre que ese servicio aporta valor y se le explica bien que detr¨¢s de esa recomendaci¨®n hay detr¨¢s toda una maquinaria con grandes profesionales.
P. La crisis destap¨® malas pr¨¢cticas en diferentes firmas de banca privada en las que se primaba la colocaci¨®n de productos propios con independencia del perfil del cliente. ?Cree que el sector ha aprendido de sus errores?
R. Se ha mejorado mucho la protecci¨®n del minorista, se exige m¨¢s transparencia. Es un cambio significativo que me parece bien. En J. P. Morgan nos dedicamos al segmento m¨¢s alto de banca privada y siempre hemos sido muy sensibles al perfil de cada cliente para que estuviese c¨®modo con lo que ten¨ªa en cartera. Creo que, en general, s¨ª ha cambiado la conciencia en el sector. En un momento en el que los m¨¢rgenes se estrechan hay que hacer las cosas bien y ganarse la confianza del cliente. Hay que demostrar que no existe conflicto de inter¨¦s y que el que realmente gana es el cliente.
A d¨ªa de hoy no veo inquietud en mis clientes por el resultado de las pr¨®ximas elecciones generales
P. ?Les beneficia la llegada de grandes fortunas latinoamericana a Espa?a?
R. Nosotros hemos conocido casos de clientes nuestros procedente de Latinoam¨¦rica que han vendido a Espa?a a buscar oportunidades. Hemos trabajados con ellos en el an¨¢lisis de inversiones en empresas espa?olas en las que estaban interesados. Son grandes patrimonios atra¨ªdos m¨¢s por activos de la econom¨ªa real (inmuebles, empresas) que financieros.
P. ?Cree que los ricos latinoamericanos seguir¨¢n protagonizando operaciones?
R. S¨ª, quiz¨¢ no con tanta intensidad como en los ¨²ltimos meses, pero continuar¨¢n cerr¨¢ndose operaciones porque Espa?a es un pa¨ªs que est¨¢ en proceso de recuperaci¨®n y eso para un inversor es muy atractivo.
P. El cliente de banca privada busca fundamentalmente preservar su patrimonio. ?C¨®mo lograr este objetivo en un entorno de tipos de inter¨¦s tan bajos?
R. Hay que explicar al cliente que debe asumir m¨¢s riesgos. Es un cambio al que se est¨¢n adaptando siempre que sean conscientes y entiendan c¨®mo aumenta la volatilidad de su cartera a medida que tienen m¨¢s activos de riesgo en ella. En el caso de los asesores nos toca ser, por as¨ª decirlo, m¨¢s creativos, buscar alternativas a la renta fija. En le caso de la deuda las perspectivas no son positivos para los pr¨®ximos dos o tres a?os. Por eso estamos notando mucha demanda de inversiones de retorno absoluto. Estamos convencidos de que hay posibilidades de tener carteras de inversi¨®n din¨¢micas multiactivo que permiten batir a la inflaci¨®n en dos o tres puntos, objetivo que buscan los clientes.
P. ?No teme que la gran liquidez que hay en el mercado est¨¦ recalentando el precio de muchos activos?
R. Creo que no. Si miramos por ejemplo la renta variable europea con una perspectiva hist¨®rica, no creo que se pueda hablar de burbuja en funci¨®n de los m¨²ltiplos que se est¨¢n pagando.
P. ?Es buen momento para invertir en activos alternativos como el sector inmobiliario, el capital riesgo o las infraestructuras?
R. La mayor¨ªa de las carteras de nuestros clientes tiene activos alternativos. La diversificaci¨®n del patrimonio es fundamental. Una opci¨®n interesante para los clientes m¨¢s conservadores puede ser una cartera de los denominados ¡°alternativos l¨ªquidos¡±, que son los fondos UCITS, que siguen las estrategias de los hedge funds, pero con liquidez diaria o semanal y sin estar apalancados.
P. ?Perciben ustedes inquietud entre sus clientes ante el resultado de las pr¨®ximas elecciones generales?
Las sicavs no son la mejor opci¨®n para todos los altos patrimonios
R. A d¨ªa de hoy no percibo preocupaci¨®n entre los clientes. Los grandes patrimonios son conscientes de que vivimos en una democracia consolidada donde hay diferentes partidos pol¨ªticos y formas de pensar. En caso de que hubiese un cambio de Gobierno, lo cual es perfectamente aceptable en democracia, lo que se producir¨ªa es una diferente distribuci¨®n de los recursos, pero siempre partiendo de la base de que los n¨²meros tienen que cuadrar.
P. ?Ning¨²n cliente les ha pedido entonces que elaboren un plan B para su patrimonio en caso de un determinado resultado electoral?
R. Ninguno. La sociedad espa?ola es lo suficientemente madura. Adem¨¢s, son personas o familias que han creado su patrimonio aqu¨ª y que han contribuido a generar riqueza para Espa?a. Le dir¨ªa m¨¢s bien todo lo contrario, lo que estamos viendo ¨²ltimamente es una mayor sensibilidad social de los altos patrimonios. Est¨¢n creando fundaciones, desarrollado proyectos con la idea de contribuir y ayudar a la gente que menos tiene.
P. ?Y no cree que una manera m¨¢s justa de ayudar ser¨ªa pagando m¨¢s impuestos?
R. Ah¨ª entramos en el debate de si estas personas pagan o no pagan impuestos. Yo creo que s¨ª lo hacen. Son muy conscientes de que deben pagar sus impuestos y contribuir. Nunca han tenido problema en pagar impuestos. Ya se vio cuando el Gobierno actual subi¨® el IRPF.
P. ?A qu¨¦ atribuyen el importante aumento en el n¨²mero de Sicav de los ¨²ltimos a?os?
R. En parte son fondos que llegaron con la regularizaci¨®n fiscal. De todas formas, las Sicav no son la mejor opci¨®n para todos los clientes existiendo la posibilidad del traspaso entre fondos de inversi¨®n sin coste fiscal.
P. ?Fue una buena idea la amnist¨ªa fiscal?
R. Esta es una pregunta trampa [risas] No s¨¦ si fue o no una buena idea, pero se tom¨® esa decisi¨®n en un momento en el que el Estado necesitaba ingresos. Adem¨¢s, cuando el Gobierno tom¨® esa decisi¨®n, aparte del efecto recaudatorio, buscaba que todo ese dinero se incorporase a la econom¨ªa productiva y contribuyese a la recuperaci¨®n.
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