La llama que decora los pisos
Las chimeneas de bioetanol y las el¨¦ctricas no precisan salida de humos ni generan olores
La chimenea ha dejado de ser un privilegio de chal¨¦s, casas de pueblo y viviendas con varios cientos de metros cuadrados. El mercado parece haber escuchado las s¨²plicas de muchos propietarios, cuyo sue?o es tener este elemento en su piso o apartamento sin tener que hacer obras y necesitar salida de humos. La democratizaci¨®n ha llegado con las chimeneas el¨¦ctricas y con las de bioetanol.
No generan humos, olores ni residuos. Tampoco precisan el mantenimiento de las chimeneas de le?a. Lo que las diferencia es la llama: en las biochimeneas la llama es real, mientras que en las el¨¦ctricas el fuego es simulado, aunque extremadamente realista.
¡°Las de bioetanol empezaron hace ya algunos a?os a emerger en nuestro mercado como un elemento decorativo para poder disfrutar de la calidez del fuego en cualquier rinc¨®n del hogar; con el tiempo han conseguido mayor protagonismo dado que son, adem¨¢s, una interesante fuente de calor¡±, cuenta Toni De La Asunci¨®n, gerente de la empresa Eban-Foc, especializada en chimeneas de bioetanol.
En la mayor¨ªa de los casos se usan para decorar o como apoyo al sistema de calefacci¨®n del piso para ahorrar algo de energ¨ªa. Y, aunque calienta, no se puede considerar un sistema de calefacci¨®n por s¨ª solo. ¡°En las el¨¦ctricas pueden llevar un peque?o convector el¨¦ctrico, pero de pocos kilovatios, y en el caso de las de bioetanol el poder calor¨ªfico es peque?o¡±, dicen en la empresa Lumbre, que desde 1988 dise?a y fabrica todo tipo de chimeneas.
Conseguir m¨¢s o menos temperatura va a depender de la calidad del bioetanol, el tama?o del aparato y el lugar donde se coloque. ¡°Esto va a repercutir directamente en el rendimiento calor¨ªfico de nuestra chimenea o estufa¡±, explica De La Asunci¨®n.
En el mercado se venden muchos tipos de bioalcohol o bioetanol. ¡°Los que se aconsejan son los de origen 100% agr¨ªcola y con garant¨ªa de fabricaci¨®n nacional¡±, se?alan en Eban-Foc. Se trata de un producto que no es t¨®xico ni nocivo para las personas y el medio ambiente y su fabricaci¨®n est¨¢ garantizada con certificados de calidad ISO. ¡°Las emisiones que desprende la combusti¨®n de nuestro biocombustible son comparables a un par de velas encendidas y el vapor de agua que emite est¨¢ por debajo del que genera un humidificador dom¨¦stico¡±, afirman en la compa?¨ªa. Ahora bien, hay factores, como la superficie de la sala o posibles residuos en el quemador, que pueden provocar cierto olor en su encendido o apagado. Adem¨¢s, est¨¢n surgiendo en el mercado bioetanoles que est¨¢n fuera de normativa, hacen humo y desprenden olores. ¡°Deberemos ser cuidadosos a la hora de seleccionar estos productos¡±, avisa De La Asunci¨®n.
Si por algo destacan es por sus dise?os decorativos y su f¨¢cil instalaci¨®n. Las formas y tama?os son infinitas e, incluso, se hacen a medida. Se realizan proyectos panelados con revestimientos de acero y cuero, en los que se empotran suntuosas chimeneas. En viviendas, donde la chimenea tradicional de le?a no se usa, existe la opci¨®n de colocar en su interior un quemador de bioetanol sin hacer ning¨²n tipo de obra. Las hay de pared (se cuelgan como un cuadro, pesan entre 10 y 20 kilos y algunas permiten regular la altura de la llama), de sobremesa (se trata de estufas peque?as), y de suelo (al ser port¨¢tiles son f¨¢ciles de transportar). Adem¨¢s, incorporan accesorios de cer¨¢mica para adornar, como piedras, hojas o le?os.
Su consumo es m¨ªnimo. ¡°De media consumen entre 0,2 y 0,6 litros de alcohol por hora, lo que supone un gasto de entre 0,8 y 2,4 euros¡±, indican en Leroy Merlin. El litro de bioetanol cuesta desde 3 hasta 6,25 euros, en funci¨®n de la marca y la calidad. ¡°Dependiendo de la capacidad y el n¨²mero de dep¨®sitos donde se almacene el bioalcohol, la llama puede durar entre cuatro y ocho horas¡±, prosiguen en la firma de bricolaje. Los quemadores disponen de medidas retenedoras para desacelerar la combusti¨®n.
La puesta en funcionamiento no lleva m¨¢s de dos minutos: desembalar y encender. Se componen de una c¨¢mara de combusti¨®n y una estructura decorativa y se pueden colocar en cualquier habitaci¨®n, aunque hay que tener en cuenta que el bioalcohol es inflamable, as¨ª que el recipiente debe estar bien cerrado y alejado de fuentes de ignici¨®n, avisan en Leroy Merlin. Aunque produce bajas emisiones de di¨®xido de carbono, es aconsejable ¡°que la estancia est¨¦ ventilada¡±, dicen en Lumbre. Los precios parten de 30 euros para los modelos m¨¢s sencillos, pero pueden superar los 1.000 euros para los m¨¢s sofisticados. Los hay con encendido electr¨®nico y sistema de seguridad.
Las el¨¦ctricas son m¨¢s sencillas si cabe, porque basta con conectarlas a la red. La tecnolog¨ªa ha evolucionado tanto que se ha conseguido una llama muy realista. Hay modelos con efecto humo generado por vapor de agua, iluminaci¨®n de bajo consumo y posibilidad de emisi¨®n de calor con calefactor y mando a distancia. El precio es algo m¨¢s elevado: las hay por 600 euros y por 4.700.
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