Las sicav en la campa?a electoral

La mayor¨ªa de los partidos pol¨ªticos hacen referencia en sus programas electorales a las sicavs, instituciones de inversi¨®n colectiva con un r¨¦gimen fiscal especial, al tributar al 1% de sus beneficios en el impuesto sobre sociedades, pero que deben cumplir una serie de requisitos para ello, como es la obligatoriedad de contar con un m¨ªnimo de 100 inversores. Mientras que algunas formaciones pol¨ªticas proponen la eliminaci¨®n de ese r¨¦gimen fiscal tan ventajoso para las sicavs y abogan por que tributen como cualquier otra sociedad, otros partidos proponen medidas concretas para evitar la utilizaci¨®n de los llamados mariachis, o testaferros.

Habr¨ªa que comenzar explicando que a lo largo de los ¨²ltimos 15 a?os se han realizado diversos planes de inspecci¨®n a estas entidades, al igual que se ha hecho con otros sectores de contribuyentes en los que, de una u otra forma, se han detectado fraudes de diferente tipo.

As¨ª, los planes de inspecci¨®n que se hicieron en los a?os 2002 y ejercicios siguientes demostraron que los socios de dichas entidades realizaban operaciones de compraventa en Bolsa con acciones de Sim Y Simcav (antecedentes de las actuales Sicavs), manipulando su valor para generarse importantes p¨¦rdidas ficticias que utilizaban para no pagar impuestos por otros beneficios. Durante las comprobaciones posteriores, desde 2006 y siguientes se detect¨® que un grupo elevado de estas sociedades incumpl¨ªan los requisitos para gozar del r¨¦gimen tributario especial, porque entre los 100 nombres de inversores figuraban como mariachis empleadas de hogar, empleados de bancos, porteros, o trabajadores de sus empresas, que prestaban su nombre. Es decir, se estaba usando esta figura de inversi¨®n colectiva para la inversi¨®n de un grupo familiar, en lugar de una pluralidad de inversores (100 o m¨¢s). Una cuesti¨®n muy importante es que ese requisito se contemplaba en la Ley del Impuesto sobre Sociedades para poder tributar al tipo del 1%. La Inspecci¨®n de Hacienda cumpli¨® con su obligaci¨®n y su trabajo de investigaci¨®n dio como resultado el descubrimiento de esos falsos inversores y, dado que no cumpl¨ªan los requisitos, se determin¨® que deb¨ªan tributar al tipo general del 35% que les correspond¨ªa.

A mitad de dicho plan de inspecci¨®n se aprob¨® una ley de amnist¨ªa, con el benepl¨¢cito de los partidos pol¨ªticos, con una ¨²nica excepci¨®n, y como consecuencia de ello quedaron anuladas todas las actuaciones, incluidas las liquidaciones que ya estaban en los tribunales, dado el car¨¢cter retroactivo de la norma. Pero ello no fue suficiente y se opt¨® por quitar a la Inspecci¨®n de Hacienda la facultad para poder comprobar a esas entidades en el futuro. Algo curioso porque no hay que olvidar que se trata de un r¨¦gimen fiscal.

Pero el hecho es que esa competencia fue arrebatada a la Inspecci¨®n y se le otorg¨® a la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (VNMV), cuyos fines no son comprobar los impuestos sino dar garant¨ªa y solvencia al sistema financiero. Por ello, a d¨ªa de hoy, si una Sicav presenta una lista de 100 nombres, aunque estos sean mariachis, para este organismo esa entidad cumplir¨ªa los requisitos. Adem¨¢s, con la normativa actual, si una Sicav no llega al centenar de socios tiene la posibilidad de corregir esa situaci¨®n durante un a?o.

Actualmente hay en Espa?a 3.300 Sicavs con 465.000 socios, pero de estos ?cu¨¢ntos ser¨¢n mariachis? Mejor no le pregunten a la CNMV porque lo desconoce y, en realidad, su cometido no es investigarlo. Pero tampoco pregunten a la Inspecci¨®n de Hacienda porque se les quit¨® la competencia para comprobarlas.

Esta situaci¨®n de apartar de mala manera a la Inspecci¨®n ha sido la causa principal de que la Asociaci¨®n de Inspectores de Hacienda incluya en todos sus documentos de propuestas de lucha contra el fraude la devoluci¨®n de la facultad de comprobar el r¨¦gimen fiscal de estas entidades. No es funci¨®n de la Inspecci¨®n de Hacienda opinar sobre si ese r¨¦gimen fiscal debe seguir vigente o no, pero s¨ª lo es comprobar que los requisitos legales para tributar de esa forma han de cumplirse, como ha de hacerse con cualquier otro contribuyente. La normativa atribuye a la Agencia Tributaria la aplicaci¨®n del sistema tributario y, de momento, es una excepci¨®n la comprobaci¨®n de las Sicavs.

No habr¨ªa que hacer caso de aquellos que esgrimen que un cambio como el que Inspectores de Hacienda solicitan provocar¨ªa que el dinero se vaya fuera. A estas entidades, con un patrimonio de 35.000 millones de euros, no se les ha obligado a invertir ni en Espa?a ni en valores de entidades espa?olas, por lo que ese argumento se cae por su propio peso. Uno de los principios que rige actualmente en Europa es el de libertad de circulaci¨®n de capitales, por lo que ni las Sicavs ni a nadie se le puede obligar a tener el dinero aqu¨ª.

Este empecinamiento de los Inspectores de Hacienda por recuperar la comprobaci¨®n del r¨¦gimen fiscal de las Sicavs, su insistencia en explicar a los cuatro vientos, incluyendo a partidos pol¨ªticos y a los grupos parlamentarios, la sinraz¨®n de esta situaci¨®n, y el af¨¢n de presentar nuestras propuestas ha tenido como consecuencia que buena parte de los partidos pol¨ªticos hayan incluido en sus programas electorales promesas de modificaciones para estos instrumentos de inversi¨®n. Bienvenidas sean las intenciones de rectificaci¨®n en campa?a electoral pero esperamos que despu¨¦s se lleve a la pr¨¢ctica lo que con tanto inter¨¦s se promete ahora.

Jos¨¦ Mar¨ªa Pelaez, en Inspector de Hacienda y miembro de la Asociaci¨®n Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado