¡°Las normas laborales son clave en el libre comercio¡±
¡°La idea de que la soluci¨®n pasa por la flexibilizaci¨®n total del trabajo es un error¡±
Nacido en Liverpool en 1956, Guy Ryder estudi¨® Ciencias Sociales y Pol¨ªticas en la Universidad de Cambridge y Estudios sobre Latinoam¨¦rica en la Universidad de Liverpool. Domina el franc¨¦s y espa?ol. Ryder comenz¨® a trabajar en la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) en 1998 y, tras varios puestos directivos dentro del organismo de Naciones Unidas, lleg¨® al puesto de director general en octubre de 2012. Durante su reciente paso por Buenos Aires, donde se reuni¨® con el flamante gobierno del presidente Mauricio Macri, y con empresarios y sindicalistas argentinos para analizar la situaci¨®n laboral de toda Am¨¦rica Latina y el resto del mundo.
Pregunta. La semana pasada la OIT advirti¨® sobre una subida del paro en Latinoam¨¦rica¡
Respuesta. El desempleo sube despu¨¦s de un periodo de bajas importantes y la explicaci¨®n no es dif¨ªcil. Es el resultado de la desaceleraci¨®n de la econom¨ªa regional.
P. ?Cu¨¢l es la soluci¨®n?
R. Necesitamos volver a tasas de crecimiento econ¨®mico m¨¢s alto. A escala mundial la gente habla mucho de que el crecimiento no genera empleo, pero no es as¨ª.
P. ?C¨®mo puede crecer Latinoam¨¦rica en una ¨¦poca de materias primas baratas, una financiaci¨®n costosa y la desaceleraci¨®n de la econom¨ªa china?
R. Hay que trabajar sobre los dos lados del mercado de trabajo: oferta y demanda. La OIT siempre dice que hay un problema cr¨®nico de falta de demanda internacional. Eso no quiere decir que no haya que trabajar la oferta. Hay que mejorar la forma de empleabilidad, que pasa por cuestiones de formaci¨®n y educaci¨®n. Hay que buscar c¨®mo hacer las reformas para activar la mano de obra, pero hay que trabajar la demanda y eso pasa por los salarios, pol¨ªticas de salario m¨ªnimo y de negociaci¨®n colectiva en el mundo del trabajo.
P. Hay organismos como la Comisi¨®n Europea que insisten en la flexibilizaci¨®n laboral¡
R. A veces la gente tiene la memoria muy corta. En la crisis de 2008 tuvimos en muchos pa¨ªses situaciones de gran flexibilizaci¨®n y eso ha sido en parte la causa de la p¨¦rdida de empleo tan dram¨¢tica en 2009 y 2010. La idea de que la soluci¨®n pasa por la flexibilizaci¨®n a ultranza del mercado de trabajo es un error. No niego que hay reformas que tienen sentido. Hay que reconciliar las necesidades de adaptaci¨®n en un mundo del trabajo que cambia radicalmente con la seguridad en el empleo, la identificaci¨®n del trabajador con la empresa y el desarrollo de sus capacidades.
P. Organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) critican las pol¨ªticas de salario m¨ªnimo.
R. Las pol¨ªticas de salario m¨ªnimo han vuelto a la actualidad en muchas regiones del mundo. En Asia: en Camboya, Bangladesh, Indonesia. En Am¨¦rica Latina han tenido efectos muy positivos en la reducci¨®n de la inequidad y la pobreza. Es normal que haya este debate sobre c¨®mo reconciliar las necesidades sociales con la competitividad y la rentabilidad de la empresa. En Europa hubo un ejemplo que hizo mucho ruido: Alemania por primera vez tiene un salario m¨ªnimo nacional. Alguna gente pensaba que eso iba a tener efectos muy negativos en la generaci¨®n de empleo, y hasta ahora no ha sido as¨ª.
P. ?Qu¨¦ sectores econ¨®micos pueden crear empleo en Latinoam¨¦rica?
R. Los pa¨ªses deben interesarse por la diversificaci¨®n de sus econom¨ªas para evitar una dependencia exagerada de algunas materias primas. Tambi¨¦n se trata de aumentar el valor a?adido. Eso puede pasar por pol¨ªticas industriales y de servicios.
P. Argentina se suma ahora a los pa¨ªses latinoamericanos que deval¨²an sus monedas y se plantea el dilema de abaratar la mano de obra para crear empleo.
R. Es un dilema. Cuando se mira la experiencia espa?ola y otras de la zona euro, es evidente que la opci¨®n de la devaluaci¨®n no existe y por eso han tenido que pasar por un proceso de devaluaci¨®n interna de los costes de trabajo. En Argentina hay una necesidad de di¨¢logo sobre las consecuencias sociales y laborales que van a resultar de una devaluaci¨®n.
P. En Argentina y el resto de Latinoam¨¦rica tambi¨¦n hay una tensi¨®n entre tendencias al libre comercio y al proteccionismo para crear o conservar el empleo. ?Cu¨¢l es el mejor modelo?
R. Es interesante que en la reciente cumbre de la OMC [Organizaci¨®n Mundial de Comercio] en Kenia nadie habl¨® del tema. La raz¨®n es que el mundo ya no ve como autom¨¢ticos los beneficios de la liberalizaci¨®n del comercio. Hay procesos regionales e interregionales, como el TPP [siglas en ingl¨¦s del Tratado Transpac¨ªfico de Libre Comercio]. Desde la OIT puedo decir que hay ventajas en econom¨ªas abiertas, pero el gran debate es c¨®mo asegurarse que el libre comercio d¨¦ resultados positivos en t¨¦rminos de empleo y protecci¨®n de los trabajadores en contra de una carrera hacia abajo en materia de salarios y derechos humanos. Las disposiciones laborales son clave y deben formar parte de los acuerdos comerciales a nivel regional e interregional, como en las negociaciones entre Europa y EE UU.
P. ?C¨®mo ve la situaci¨®n laboral de Espa?a?
R. Los espa?oles siempre tienen vocaci¨®n de di¨¢logo social, desde la restauraci¨®n de la democracia, y eso ha sido un elemento clave en el desarrollo de su econom¨ªa. Espa?a ha tenido que pasar por unas reformas sociales controvertidas, no acordadas. La tasa de desempleo sigue siendo muy alta. Estuve hace dos semanas en Grecia y hay que decir que lo que Europa le pidi¨® en t¨¦rminos de reformas laborales y lo que se ha hecho no han provocado hasta ahora un efecto positiva del empleo y el crecimiento econ¨®mico.
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