Perdidos con las comisiones de los cajeros
Tras el nuevo decreto del Gobierno, la variedad de tarifas aplicadas despista a los clientes
Hace unos d¨ªas, Kutxabank envi¨® a sus clientes una carta para informar de las nuevas condiciones ¡°para la retirada de efectivo a d¨¦bito en cajeros¡±. El banco vasco adjunt¨® las seis posibles tarifas que tienen sus clientes desde enero: si sacan en la Kutxabank, gratis; si es dentro de la red de Euro 6000, 0,45 euros; si es en Bankia y Sabadell, 0,65 euros; si es en el resto de entidades dentro de Espa?a, ¡°lo que cobre el titular del cajero¡±; si es en Europa, ¡°lo que diga el libro de tarifas¡± y si es ¡°en otras redes, un 3%, m¨ªnimo 2,10 euros¡±.
Esta situaci¨®n es similar a la que viven los clientes de los bancos que proceden de las antiguas cajas de ahorros, como Unicaja, Ibercaja, BMN, Abanca o Liberbank, que tambi¨¦n pertenecen a Euro 6000. Otras entidades tienen circunstancias parecidas.
Tras el decreto del Gobierno, que entr¨® en vigor el 1 de enero, la variedad de comisiones que se aplican en los cajeros se ha disparado. Hasta ahora, la existencia de tres grandes redes, ¡ªServired, 4B y Euro 6000¡ª simplificaba las tarifas. Sin embargo, la desaparici¨®n de las dos primeros como redes comerciales ha complicado el panorama.
Como puede verse en el gr¨¢fico adjunto, para un cliente no ser¨¢ f¨¢cil saber de antemano lo que le van a cobrar en los cajeros que no sean de entidad, donde sacar dinero siempre es gratis. La variedad de tarifas para los que acudan a un cajero que no es de su banco (o su alianza) es ampl¨ªsima: desde los dos euros que cobra CaixaBank y otras 10 entidades, hasta los 0,50 euros de ING Direct, que apenas tiene m¨¢quinas.
Las asociaciones de defensa de los consumidores, como la OCU, consideran que ahora existe ¡°mayor confusi¨®n¡± que antes en las comisiones aplicadas por la desaparici¨®n de Servired y 4B. ¡°El panorama para el usuario no podr¨ªa ser m¨¢s desalentador¡±.
Fuentes de Euro 6000 recuerdan que ¡°es la ¨²nica red de las tres que se mantiene igual que antes del decreto, uniforme, bien se?alizada y con el mismo n¨²mero de cajeros. Hemos apostado por nuestra marca propia, que aglutina 9.000 cajeros al coste m¨¢s bajo, 0,45 euros. Esta dimensi¨®n y uniformidad ha ayudado a cerrar los acuerdos con Bankia y Sabadell¡±, apuntan. Servired no ha querido opinar, mientras que en 4B apuntan que ¡°la implantaci¨®n la han hecho los propietarios de los cajeros. Los sistemas de pago no hemos intervenido¡±.
Otra entidades que piden no ser citadas recuerdan que la tarifa que se aplica al cliente aparece en la pantalla antes de ser cobrada y el cliente siempre puede negarse a pagarla. Este sistema evita ¡°comisiones sorpresa¡±, dicen, aunque no soluciona las dudas previas al escoger uno u otro cajero.
Expertos en redes de cajeros critican los mensajes que algunas entidades han colocado en las pantallas. Por ejemplo, se dice que ¡°esta operaci¨®n tiene un coste de 0,90 euros¡± y, despu¨¦s, se a?ade que ¡°el emisor de la tarjeta no le cobrar¨¢ por esta operaci¨®n¡±. ¡°?No es m¨¢s sencillo poner, como ocurre con Bankinter, entre otros, que la operaci¨®n no tiene comisi¨®n?¡±, se preguntan. Miguel San Pablo, director general de Financiaci¨®n y Medios de Pago de ING Direct, coincide en que hay mensajes en los cajeros ¡°que crean confusi¨®n¡±. ¡°Se puede explicar de una manera m¨¢s sencilla¡±, apunta. Un competidor a?ade que ¡°la informaci¨®n de la pantalla es cierta y exhaustiva, pero provoca confusi¨®n. El cliente no sabe bien qu¨¦ tarifas y qui¨¦n se las va a aplicar¡±.
Limitar las tasas
El Gobierno intervino en la guerra de cajeros para acabar con la doble comisi¨®n que se cobraran (algo que ha conseguido), despu¨¦s de que CaixaBank decidiera cobrar dos euros a los no clientes que usaran sus m¨¢quinas. A esta tarifa se a?ad¨ªa otra del banco due?o de la tarjeta que ha desaparecido. Sin embargo, el Ejecutivo no limit¨® el m¨¢ximo que se pod¨ªa cobrar. Facua-Consumidores en Acci¨®n, reclama que ¡°el Gobierno fije un importe m¨¢ximo porque las comisiones repercutidas sobre el cliente no se corresponden con el coste del servicio prestado¡±. La OCU tambi¨¦n lo demanda.
Los consumidores coinciden en se?alar que los tres grandes bancos, CaixaBank, Santander y BBVA, son los ganadores de esta batalla porque han mantenido las altas tarifas que propusieron inicialmente.
¡°La situaci¨®n beneficia a los grandes bancos por su elevado n¨²mero de cajeros: entre los tres suman el 44% del total¡±, dice la OCU. Las tres entidades han declinado responder a preguntas sobre la situaci¨®n actual. En su lugar, han enviado unas l¨ªneas en las que justifican sus comisiones y aseguran que se han reducido para la mayor¨ªa de los clientes. Otros expertos apuntan que otro objetivo de esta batalla era frenar el crecimiento de ING, que hab¨ªa hecho bandera de la gratuidad de los cajeros para sus clientes. San Pablo, director general de esta entidad, admite que la situaci¨®n les ha obligado ¡°a un replanteamiento completo. Hemos conseguido alianzas con bancos y gratuidad total a partir de la extracci¨®n de 200 euros en todos los cajeros¡±. ?Ha perdido ING esta batalla? ¡°Veremos si hay fuga de clientes, pero estamos tranquilos¡±.
El Ejecutivo ya no habla de cargos ¡°desorbitados¡±
Miguel Temboury, subsecretario de Econom¨ªa, afirm¨® en?Expansi¨®n en octubre pasado: "No hay justificaci¨®n para cobrar dos euros por un servicio" [sacar dinero del cajero] "que antes costaba 0,75. Y est¨¢ por ver si alguna entidad cobrar¨¢ ese importe". Tambi¨¦n afirm¨® que esperaba que se redujeran las comisiones en los cajeros.
Al final, los tres grandes bancos, CaixaBank, Santander y BBVA, han establecido tarifas cercanas a los dos euros. Ahora, fuentes de Econom¨ªa no quieren posicionarse sobre aquellas declaraciones y las tarifas desorbitadas. ¡°La comisi¨®n la fija libremente la entidad atendiendo a su pol¨ªtica comercial¡±, dicen.
En Econom¨ªa hacen un balance positivo del decreto ¡°porque se ha conseguido una mejora para los clientes: se ha eliminado la doble comisi¨®n que se quer¨ªa imponer y, por primera vez, se establece que el due?o de la tarjeta no puede repercutir a su cliente m¨¢s que lo que le cobra a ¨¦l el propietario de la m¨¢quina¡±.
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