¡°En M¨¦xico hay petr¨®leo para rato¡±

Piso 44. Torre Pemex. El despacho mira al sureste, hacia una ciudad sin fin que se inclina ante el nevado y majestuoso Popocat¨¦petl. El volc¨¢n que vigila la historia de M¨¦xico. "Si estalla, lo mejor ser¨¢ salir corriendo", bromea Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez Anaya. Tiene 48 a?os y hace apenas un mes que asumi¨® la direcci¨®n de la petrolera estatal. Ingeniero y economista por el MIT, doctor por Harvard y profesor en Stanford, Gonz¨¢lez Anaya es considerado un mago de las finanzas p¨²blicas. Su ¨²ltima misi¨®n fue sacar del marasmo al Instituto Mexicano de la Seguridad Social, donde logr¨® recortar dos tercios el d¨¦ficit. Ahora se ha encaramado a un volc¨¢n m¨¢s alto e inestable. Pemex ha registrado las mayores p¨¦rdidas de su historia y parece a punto de estallar. Gonz¨¢lez Anaya, desde su despacho con vistas al Popocat¨¦petl, dice que no lo permitir¨¢.

Pregunta. Se aprob¨® la reforma energ¨¦tica, se acab¨® el monopolio y se hundi¨® Pemex. ?Viv¨ªa la compa?¨ªa demasiado protegida?

Respuesta. No, al contrario. Gracias a la reforma energ¨¦tica Pemex va a poder llevar adelante los ajustes que tiene que hacer. La situaci¨®n se debe en gran medida a la ca¨ªda del precio del petr¨®leo. Hace dos a?os, el barril estaba a 100 d¨®lares y ahora ronda los 25.

P. 30.000 millones de p¨¦rdidas, 87.000 millones en deuda, 147.000 millones de pasivo, falta de liquidez... ?Se puede estar peor?

R. Pemex se enfrenta a un problema importante de liquidez, que no de solvencia. Y lo mismo que todas las petroleras del mundo, vive ajustes fuertes.

P. ?Y cu¨¢l es su margen de maniobra?

R. Hemos anunciado un ajuste de 100.000 millones de pesos (5.700 millones de d¨®lares). Se dice f¨¢cil, pero es una cantidad enorme de dinero. Y hay que hacerlo, no hay opci¨®n.

P. ?Es un encargo del presidente?

R. El presidente me dio dos instrucciones: ajustar los costos y las estrategias de negocios a la nueva realidad del petr¨®leo, y utilizar al m¨¢ximo la reforma energ¨¦tica. Despu¨¦s de un mes, agregar¨ªa una tercera: un buen manejo de los pasivos.

P. El Gobierno anunci¨® un rescate para Pemex, ?conoce las condiciones?

R. De momento no hay detalles, pero yo no lo llamar¨ªa rescate. Somos el primer contribuyente del Estado mexicano.

P. Tambi¨¦n se anunci¨® el despido de 10.000 trabajadores.

La compa?¨ªa es el primer contribuyente del Estado mexicano

R. Uno de los activos m¨¢s importantes de la empresa son sus ingenieros y trabajadores. Los ajustes se har¨¢n por rentabilidad y estrategias de negocio. Ser¨¢n los que sean, pero el despido no es el fin. El fin es ser rentable.

P. Si usted pudiera empezar de cero, ?qu¨¦ masa laboral le dar¨ªa a Pemex?

R. Prefiero no especular. Nadie empieza de cero. Lo que tenemos que hacer es sacar ventaja de nuestras posiciones. La fuerza laboral es uno de nuestros activos.

P. Pemex tiene siete veces m¨¢s personal que la noruega Statoil, ?no es exagerado?

R. Insisto, nos debemos medir por la rentabilidad y la productividad. Al final del d¨ªa, la parte laboral es un costo importante pero tenemos un presupuesto muy, muy grande. Las decisiones se han de tomar caso por caso.

P. Los presupuestos de Pemex se calcularon con un precio del barril a 50 d¨®lares, pero ahora est¨¢ en torno a 25. ?C¨®mo pudo darse un error tan grave?

R. Yo no lo llamar¨ªa error. En M¨¦xico, el presupuesto se establece mediante un precio del petr¨®leo que propone la Secretar¨ªa de Hacienda y aprueba el Congreso. En ese momento se preve¨ªa un precio de 50 d¨®lares y se contrataron las coberturas federales correspondientes. ?Qu¨¦ pas¨®? El mercado se ha deteriorado r¨¢pidamente desde noviembre y Pemex tiene que hacer un ajuste.

Dios no dibuj¨® las fronteras, si hay petr¨®leo en EE UU, lo hay de este lado

P. ?Cu¨¢nto va a durar la crisis?

R. Eso es dif¨ªcil de decir. Nadie lo sabe.

P. ?Un ciclo largo?

R. El consenso apunta a una recuperaci¨®n gradual, pero nadie sabe de qu¨¦ monto ni cu¨¢ndo. Espero mejoras paulatinas, pero peque?as.

P. ?Estamos entonces ante un horizonte de crisis?

R. Nosotros hicimos el ajuste con una previsi¨®n media de 25 d¨®lares el barril.

P. ?Y cu¨¢nto pueden aguantar con ese precio?

R. Hay muchos campos rentables a ese precio. En el ajuste lo que hicimos fue sacar de producci¨®n el petr¨®leo que no es rentable a 25 d¨®lares el barril. Si el crudo sube, podremos aumentar la producci¨®n. Pero es m¨¢s importante mejorar nuestros costos.

P. ?No cree que la crisis ha restado inter¨¦s a las subastas petroleras?

R. Yo he visto un enorme inter¨¦s por participar en las subastas y hacerlo con Pemex. Mire, esto ya se ha vivido antes y acabar¨¢ dando la vuelta.

P. En 2004, M¨¦xico produc¨ªa 3,3 millones de barriles, ahora s¨®lo 2,2. ?Se puede revertir esta tendencia?

R. Ten¨ªamos dos de los yacimientos m¨¢s rentables del mundo y ahora se est¨¢n agotando. El reto es reemplazarlos, estabilizar y a medio plazo revertir la tendencia. Dios no dibuj¨® las fronteras, si hay petr¨®leo en Estados Unidos, hay petr¨®leo de este lado.

P. ?Hay esperanza de encontrar un gran pozo como el de Cantarell?

R. Esa no es la apuesta. La apuesta es desarrollar de forma met¨®dica todas las cuencas. Hay petr¨®leo para largo en M¨¦xico.

P. ?No es exagerado que la carga fiscal que soporta Pemex sea del 70%?

R. Pemex es una empresa productiva del Estado. Esa es parte de nuestra funci¨®n. Estamos abiertos a hablar de esta carga, pero es una decisi¨®n del Estado, no de Pemex.

P. Si pudiera decidir, ?la rebajar¨ªa?

R. Deje que le conteste de otra manera: ?qu¨¦ dir¨ªa cualquier empresario sobre su carga fiscal?

P. ?Qu¨¦ objetivos le gustar¨ªa alcanzar al fin de su mandato?

R. Me gustar¨ªa tener una empresa recuperada financieramente, eficiente, transparente y productiva. Y con buenas perspectivas en el corto plazo.

P. Pemex se la est¨¢ jugando, ?no? Porque con la crisis han salido a flote todos sus problemas.

R. Pues s¨ª. Pero mejor que salgan ahora, que luego y en peores condiciones. No hay duda.