?Qu¨¦ est¨¢ rezagando a las Bolsas europeas?
Los mercados mundiales en conjunto comenzaron el a?o con fuertes ca¨ªdas, m¨¢s o menos homog¨¦neas durante las primeras semanas del a?o, arrastrados por el p¨¦simo comportamiento de las materias primas y las perspectivas de un bajo crecimiento global con China en el epicentro. Pero, desde m¨ªnimos, el comportamiento ha sido dispar. Las Bolsas europeas han quedado atr¨¢s y muestran una rentabilidad negativa del 12,5% en el a?o, frente al 1% positivo en EE UU o el 2% del ¨ªndice de mercados emergentes, tambi¨¦n al alza. ?Cu¨¢l es la causa de esta dispersi¨®n?
En primer lugar, el euro se ha apreciado frente al resto de las principales divisas, pese a la aplicaci¨®n de medidas expansivas por parte del Banco Central Europeo (BCE). Los motivos hay que buscarlos en el mensaje m¨¢s acomodaticio por parte de la Reserva Federal, que ha enfriado la perspectiva de subida de tipos de inter¨¦s en EE UU. La consecuencia: una apreciaci¨®n importante de la renta fija estadounidense y una depreciaci¨®n del d¨®lar. El mensaje de Janet Yellen ha tenido un impacto mayor que el de Mario Draghi.
La depreciaci¨®n del d¨®lar ha tenido un impacto muy positivo en los indicadores de sentimiento econ¨®mico en Estados Unidos, especialmente en el sector manufacturero, y alivia la presi¨®n a la baja en las perspectivas de crecimiento y beneficio empresarial. Tambi¨¦n facilita la recuperaci¨®n en los precios del crudo, lo que resta presi¨®n sobre uno de los sectores m¨¢s comprometidos durante los meses anteriores. Y, por ¨²ltimo, es muy positiva para los emergentes, que ven reducida la dificultad para financiarse en su propia divisa, y tambi¨¦n en d¨®lares. Pero supone un efecto negativo en el mismo sentido para las econom¨ªas europea y japonesa, que est¨¢ pesando en las valoraciones de sus compa?¨ªas como consecuencia de las menores previsiones de beneficios.
Otro factor es el riesgo pol¨ªtico, con hitos muy importantes a corto plazo, como el refer¨¦ndum sobre la permanencia del Reino Unido en la UE, las dificultades econ¨®micas que vuelven a vislumbrarse en Grecia, o las dificultades en grandes econom¨ªas de la Eurozona para reconducir sus d¨¦ficits p¨²blicos e introducir medidas de ajuste estructural, casos de Espa?a, Francia o Italia. Tambi¨¦n pesa sobre los ¨ªndices europeos la gran proporci¨®n de bancos que contienen, uno de los sectores m¨¢s castigados por sus dificultades para generar beneficios y capital en un entorno estructural de tipos bajos.
?Puede estar gener¨¢ndose una oportunidad de inversi¨®n en las Bolsas europeas? A medio plazo puede que s¨ª. Pese a las dificultades en el corto plazo, la econom¨ªa estadounidense previsiblemente recobrar¨¢ vigor en los pr¨®ximos meses, lo que elevar¨¢ las expectativas de inflaci¨®n y obligar¨¢ a la Reserva Federal a volver a un discurso m¨¢s restrictivo en tipos de inter¨¦s, revirtiendo la subida del d¨®lar. Ese mensaje de subidas cada vez est¨¢ m¨¢s lejos en la Eurozona, y este periodo de fortaleza relativa del euro no hace m¨¢s que enfriar a¨²n m¨¢s la expectativa de una subida de tipos hasta el plazo de a?os. Por otra parte, las perspectivas para los beneficios empresariales es tan mala, que pr¨¢cticamente s¨®lo cabe esperar sorpresas positivas en la temporada de publicaci¨®n de resultados que comienza en pocas semanas.
Siempre con prudencia, por supuesto, pero el momento de compra en Bolsas europeas puede estar cerca. Nuestra recomendaci¨®n: valores s¨®lidos, con negocios cre¨ªbles y con buena visibilidad en los resultados, y poco peso en financieros, pese a que puedan ser los que lideren los rebotes.
Alejandro Vidal es director de Estrategia de Mercados de Banca March
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