Reutilizaci¨®n o reciclaje de neum¨¢ticos, la alternativa legal al vertedero

Cerca de 1.000 millones de neum¨¢ticos se lanzan cada a?o a la basura. De estos, solo en Espa?a se reciclan unas 200.000 toneladas, pero muchas otras se pierden en el camino, por la negligencia de los usuarios y, sobre todo, por el incumplimiento de las normativas. El negocio de reciclaje de neum¨¢tico es complejo y desde 2006 gestionado ¨²nicamente por dos entidades. Antes de esa fecha, el almacenamiento y la reutilizaci¨®n generaba muchos beneficios, y por esta raz¨®n muchas empresas, como la que gestionaba el vertedero de Sese?a que ha ardido este viernes, se dedicaban a la compra y venta de neum¨¢ticos usados en lugar de seguir la v¨ªa m¨¢s ecol¨®gica.

Los llamados cementerios de neum¨¢ticos fueron declarados oficialmente ilegales a partir de 2006, con el Real Decreto 1619/2005, aprobado por el Gobierno de Zapatero, que impuls¨® la medida con el objetivo de paliar el problema medioambiental que conlleva depositar miles y miles de neum¨¢ticos al aire libre con los riesgos que conlleva. La normativa establece un mecanismo de reciclaje obligatorio de neum¨¢ticos utilizados a trav¨¦s de un proceso en dos l¨ªneas.

Puede ocurrir que el neum¨¢tico pueda vuelva a tener vida propia. Dos entidades privadas, Signus y TNU, con los llamados sistemas integrados de gesti¨®n, son los que establecen si un neum¨¢tico es apto para ser reutilizados o tiene que ser reciclado. Si puede ser recauchutado, es decir, reparado, podr¨¢ volver a la carretera, siempre y cuando cumpla los mismos est¨¢ndares de calidad de las ruedas nuevas. Los neum¨¢ticos m¨¢s grandes, por su valor, son los que suelen recuperarse con mayor frecuencia. Cada a?o las ruedas usadas que tienen nueva vida son unas 300.000 en los coches, y unas 600.000 para camiones y autobuses, seg¨²n datos facilitados por la Asociaci¨®n Espa?ola de Neum¨¢ticos Reciclados.

Si las gestoras detectan que el neum¨¢tico no tiene ning¨²n futuro porque est¨¢ muy deteriorado, tiene que ser reciclado. Se aplicar¨¢ un proceso de destrucci¨®n y descontaminaci¨®n que llevar¨¢ a la rueda a convertirse en calzado, guantes o c¨¦sped artificial. Solo cuando es imposible este tratamiento, Signus y TNU env¨ªan las ruedas a la quema: "De esta forma, se obtiene energ¨ªa, pero se trata de la ¨²ltima v¨ªa que se emprende para la eliminaci¨®n del neum¨¢tico", informan desde TNU.

A lo largo de este proceso las gestoras obtienen unos beneficios, tanto por la venta de los materiales como por el cobro de un impuesto (un euro) a los conductores por cada neum¨¢tico que dejan en el taller, apuntan expertos del sector. Se trata de recursos que se destinan al mantenimiento de las estructuras de descontaminaci¨®n y a la estructura misma de la entidad, y que tiene el efecto indirecto de anular casi en su totalidad el mercado subalterno de compra y venta de neum¨¢ticos usados.

"Es un mecanismo que funciona muy bien", considera Miguel ?ngel Cuerno, presidente de la Asociaci¨®n Nacional de Recambistas del Autom¨®vil (ANCERA) y de la Organizaci¨®n Profesional de Especialistas del Neum¨¢tico (OPEN). Cuerno especifica que el problema se da cuando son los mismos usuarios a sortearlos. Esto ocurre cuando en lugar de ir a los talleres, los conductores compran ruedas por Internet o en los supermercados, para ahorrarse el coste de la mano de obra en un taller, detalla. "Si un particular compra neum¨¢ticos por Internet, ?d¨®nde dejar¨¢ los viejos? Los dejar¨¢ donde no debe: en r¨ªos, descampados o vertederos ilegales", se?ala.

Y las otras piezas del coche, ?se reciclan tambi¨¦n?

En el caso de la compra y venta de otras piezas usadas de coches el negocio es algo m¨¢s rentable, informan desde ANCERA. Se encargan de ello los centros autorizados de tratamiento de veh¨ªculos, que separan las piezas y las venden cuando pueden ser reutilizadas. Los motores y las piezas cautivas (puertas, parachoques, etc.) son las que m¨¢s valor tienen en el mercado.

"Los centros autorizados de tratamiento de veh¨ªculos son empresas que ganan mucho dinero, pero que hacen un bien p¨²blico", apunta el presidente de ANCERA. Seg¨²n Cuerno, el beneficio de estos operadores permite encontrar f¨¢cilmente piezas de recambio para que millones de coches sigan funcionando. Aun as¨ª, Cuerno se?ala que, en algunos casos, Hacienda ha llevado a cabo inspecciones a algunos de estos centros por delitos de fraudes en las ventas de piezas.