La pobreza energ¨¦tica entra en campa?a
Mientras las formaciones pol¨ªticas apelan al bono social por su tir¨®n electoral, los grupos el¨¦ctricos presionan para redise?ar las ayudas
No han tardado mucho los l¨ªderes pol¨ªticos y sus tropas en apelar en sus discursos iniciales de campa?a ¨Cen realidad, no lo han dejado durante estos meses de transici¨®n electoral- al bono social el¨¦ctrico y, por extensi¨®n, a la pobreza energ¨¦tica. Este problema se ha agravado con la crisis y la reducci¨®n de ingresos en los hogares. Por ello, tiene un alto componente demag¨®gico al que es f¨¢cil agarrarse por su tir¨®n popular. El argumento definitivo lo pone una clientela de 2,5 millones de ciudadanos potenciales votantes, que son los que se acogieron al bono social el a?o pasado.
Tampoco parece casualidad que los responsables de las grandes compa?¨ªas el¨¦ctricas de este pa¨ªs (Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa) hayan coincidido en sus respectivas juntas generales de accionistas (tambi¨¦n en la presentaci¨®n de resultados y en cualquier oportunidad de hablar en p¨²blico) en reclamar un redise?o del bono tras criticarlo. A la tarea se han unido las otras dos el¨¦ctricas tradicionales (EDP Hidrocant¨¢brico y Viesgo), aunque al ser m¨¢s peque?as est¨¢n bastante menos afectadas.
Las el¨¦ctricas, que responsabilizan a los dos ¨²ltimos Gobiernos de no haber conseguido atajar y definir el problema, se sienten legitimadas para hacer esa reclamaci¨®n. Son ellas las que soportan la totalidad del coste del bono social, que el a?o pasado super¨® los 180 millones de euros. Seg¨²n las el¨¦ctricas, el actual planteamiento no llega a los hogares que realmente lo necesitan, que tendr¨ªan que ser los que tuvieran un nivel de renta m¨ªnimo o se encontraran en situaci¨®n cr¨ªtica.
Seg¨²n las firmas, casi un mill¨®n de personas reciben apoyo sin necesitarlo
El bono social, que parte de 2009, cuando Miguel Sebasti¨¢n estaba al frente del Ministerio de Industria con el Gobierno socialista y que se mantuvo en la etapa del PP de Rajoy, supone reducir la factura el¨¦ctrica un 25% siempre y cuando se tenga un contrato de menos de 3.000 vatios, sea familia numerosa, tener una pensi¨®n m¨ªnima o que todos los miembros de la familia est¨¦n en paro.
Sin embargo, los dos primeros criterios son controvertidos. Las el¨¦ctricas revelan que muchos usuarios tienen contratos de menos de tres kilovatios para trasteros, garajes o segunda vivienda, lo que precisamente no concuerda con la pobreza energ¨¦tica. Asimismo, sostienen que bajo el paraguas de familia numerosa se puede esconder mucha picaresca y que algunas familias, pese a ser numerosas, no adolecen de un nivel de renta bajo ni sufren vulnerabilidad energ¨¦tica. Para los dos restantes criterios no existe discrepancia alguna y, adem¨¢s, es f¨¢cil de comprobar.
Por eso, las el¨¦ctricas piden una remodelaci¨®n en la que, manteniendo los criterios v¨¢lidos, se busque una f¨®rmula que permita identificar la renta y se fije una m¨ªnima para conceder el bono social. Asimismo, solicitan que no sean ¨²nicamente las compa?¨ªas las que soporten los costes y que participe tambi¨¦n el Estado a trav¨¦s de los Presupuestos Generales.
Las empresas piden crear un fondo para mejorar el aislamiento de las viviendas
En ese sentido, Endesa ha presentado una propuesta de real decreto para que act¨²e el Gobierno, aunque ya ha recibido la respuesta de que un Ejecutivo en funciones tiene estas muy limitadas. A su juicio, se deber¨ªa asignar un fondo centrado en asegurar el suministro a las familias que de verdad no puedan pagar la factura y que sean identificadas como tales por los Ayuntamientos, que son los que manejan la informaci¨®n m¨¢s fehaciente. Iberdrola, en parecido sentido, ha propuesto un sistema que cruce los datos de suministro el¨¦ctrico con los que tienen los servicios sociales, que tambi¨¦n cuentan con informaci¨®n.
Las el¨¦ctricas completan su petici¨®n con otra queja ancestral: si se quitaran los extracostes y cargas impositivas de la tarifa ajenas al suministro y a la generaci¨®n el¨¦ctrica, las familias tendr¨ªan que pagar casi la mitad menos. Es decir, se eliminar¨ªan muchos factores que hacen m¨¢s onerosa la pobreza energ¨¦tica. Y rematan con otra de claves del sistema: el deficiente aislamiento t¨¦rmico de las viviendas, causa del aumento del consumo y que, precisamente, afecta m¨¢s a los hogares con m¨¢s pobreza energ¨¦tica. Por ello, adem¨¢s de redise?ar el bono social y limpiar de extracostes la tarifa, tambi¨¦n solicitan crear un fondo para rehabilitaci¨®n de viviendas.
Aunque las razones de las el¨¦ctricas tienen bastante consistencia, no parece que los grupos pol¨ªticos vayan a clarificar sus posturas en la campa?a si eso les va a reducir el p¨²blico receptor y, en definitiva, restar votos. A juicio de las el¨¦ctricas, el n¨²mero de beneficiarios se reducir¨ªa si se aplicaran criterios justos de los actuales 2,5 millones de usuarios a un mill¨®n menos. Asimismo, los 180 millones de euros de coste se quedar¨ªan en menos de 150.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.